Protegiendo lo más importante de mi vida.

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Al leer esa carta mi mente no sabía que pensar, y estuve caminando en mi habitación de un lado a otro, como si yo fuera una leona furiosa y enjaulada, hasta que me decidí a enfrentar directamente a SooYeon. Salí de mi cuarto, y de la casa, casi como si fuera corriendo, estuve a punto de empujar a SoHee, solo que tuve los reflejos necesarios para poder eludirla. Subí a mi moto, y mientras iba a la casa de SooYeon, pensaba en la excusa que usaría para poder hablar con ella. Cuando ella fue a la casa, le dijo a SoHee que ella era mi mejor amiga, por lo cual yo creí que la que había ido a mi casa era HyoYeon, pero en la escuela, había visto que todo este año escolar, había estado muy alejada de YuRi, la que, en años anteriores, solía ser la mejor amiga, así que tal vez esa idea no sería buena en esta ocasión, en la esquina previa de la casa de SooYeon me detuve y estacioné mi motocicleta. Estaba escudriñando en mi mente por alguna idea que pudiera ayudarme a hablar con ella, cuando vi que a lo lejos se aproximaba a toda velocidad el Ferrari de SooYeon, así que me acerqué con mi motocicleta para cortarle el paso e impedirle entrar a su casa, y al mismo tiempo me bajé de la motocicleta furiosa, dirigiéndome hasta la puerta del chofer, y abriendo esa puerta llena de furia.

   - ¿Qué demonios es esto? – le pregunté a SooYeon, al mismo tiempo que le lanzaba en la cara la caja en la cual venía la ropa interior de YoonAh y la carta amenazadora.

   - No lo sé, es la primera vez que veo esta caja. – me dijo SooYeon, luciendo muy sorprendida.

   - Ay, no me vengas con eso. Abre la caja, mira su interior, lee la carta y dime que tú no me mandaste esa carta y lo otro. – le dije a SooYeon llena de furia, poco me faltaba para sacarla de su auto y agarrarla a golpes.

   - De acuerdo, espera. – me dijo y abrió la caja. – Esta ropa sucia ha de ser tuya verdad, ¿Qué tipo de broma de mal gusto es esta? – me dijo SooYeon, intentando burlarse de mí.

   - Lee la maldita carta antes de volver a decir algo, o te sacaré del auto y te agarraré a golpes. – le dije a SooYeon, transpirando ira por cada uno de los poros de mi piel, como si de sudor se tratara.

   - Oh, con que está ropa es la de esa ocasión. – me dijo cínicamente SooYeon, aceptando que ella había formado parte de lo que le había pasado a YoonAh.

   - Entonces, aceptas que sabes de donde provienen esas prendas, ¿verdad? – le pregunté a SooYeon.

   - Sí, claro, yo estuve ahí, pero, ¿a qué viene todo esto?, dime, ¿Cuándo vas a quitar esa chatarra desvencijada de mi camino? – me dijo SooYeon, y su cinismo hizo que mi sangre empezara a hervir.

   - Y entonces, dime, ¿a quién te refieres como la próxima víctima? Porque estoy segura que tú me mandaste esta carta. – le dije a SooYeon, tomándola por la blusa, ya que no podía contener más mi rabia.

   - Estoy segura de que no me creerás, pero, no tengo nada que ver con esto, pero yo que tú, cuidaría a las dos chicas que menciona la carta, y ya lárgate, si no quieres que llame a seguridad o a la policía. – me dijo SooYeon, y lo que me dio más miedo fue que, cuando me dijo que ella no había mandado la carta, parecía estar diciendo la verdad.

   Me dirigí rápidamente a mí motocicleta, me subí e inmediatamente me fui de esa casa, necesitaba pensar, y nada me ayudaba a pensar mejor que escuchar y sentir el motor de mi Honda CBF, así que me fui directo a una gasolinera, ya que quedaba poca gasolina en el tanque, y necesitaba conducir esa motocicleta por todo San Diego, para aclarar mi mente. Después de rellenar el tanque, y gastar la mitad del mismo, me di cuenta que estaba camino a la casa de HyoYeon, no sabía porque me había dirigido a ese lugar, pero, una vez que identifiqué el camino a su casa, me di cuenta que necesitaba hablar con ella lo más pronto posible, y sabía que en la escuela no iba a poder, así que me dirigí a su casa, extrañamente, pude notar que el Ferrari azul de SooYeon se encontraba afuera de la casa de HyoYeon, por lo cual me fui al restaurant que estaba cerca de la casa de HyoYeon, y estando ahí, le mande un mensaje.

+18 Mi Pecado: Amarla. - TERMINADA -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora