Capitulo 23

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No puedo evitarlo

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No puedo evitarlo. me levanto saliendo de la tina arruinado todo el piso blanco de mármol, y me arrojo a los brazos de mi hades abrazándolo hasta casi asfixiarlo, fueron demasiados días  sin este gruñón. mmm... one millon de pacco rabonne jamás ha olido mejor. siento su erección, en mi centro y eso solo me enciende mas. susurro en su oído.

-te extrañe-sus manos toman mi cabello. haciendo que lo mire.

-estas demasiado cursi-me gruñe el, antes de besar mis labios. mejor dicho devorar mis labios. me dejo llevar por semejante beso. me encanta....

escucho el gemido de luka cuando su erección vuelve a rozar mi feminidad y me muerdo el labio mirando a mi primer esposo. como una estrella fugaz pasa una emoción desconocida para esos ojos tan azules como las islas cook. "diversión" luka nunca se divierte. pero al verme en estos momentos luce así. y quiero saber por que.

-¿que pasa?-pregunto curiosa.

deja un corto beso en mis labios.

-mi polla necesita atención-dice luka y mi centro se derrite como lava caliente.

me arrodillo en el piso. y miro a semejantes escultura de hombre desnudo que tengo frente a mi. soy tan afortunada de poder degustar semejantes dioses, uno es una versión oscura con tatuajes que recorren todo su cuerpo y mirada peligrosa, el otro es una versión iluminada sin un gramo de tinta y sonrisa traviesa. soy una perra malditamente afortunada.

mis labios van al miembro de mi esposo disfrutando de la rudeza con la que siempre me trata, cuando se trata de mamadas luka sabe lo que quiere y no se anda por las ramas, me encanta que sea rudo conmigo, pero siendo sincera también disfruto de la suavidad de zeus.

-siéntate en el extremo del jacuzzi-pego un brinco cuando la voz de luka perturba la calma, de mi trabajo con su miembro.

señor, si señor. voy hacia el jacuzzi, suspirando cuando el agua caliente toca mi piel, esta perfecta.

me siento en el borde opuesto del jacuzzi quedando con mis piernas fuera del agua, viendo los sensuales ojos de luka. el viene hacia mi como un tiburón y mi corazón retumba como un tambor.

Veneno RusoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora