El resto del día pasó "tranquilo" Tras terminar la incómoda charla me metí en la tienda de campaña.
Me desperté cuando el sol acababá de salir. Tenía hambre pero sabia que un conejo no bastaría.
Eran las secuelas de probar sangre humana después de tanto tiempo sin hacerlo.
Miré hacia mi derecha, Damon no estaba.
Me vestí con lo poco que tenía de ropa. Unos tejanos, la sudadera más grande que mi hermano tenía y mis botas de piel.
Salí de la tienda y me encontré a todos allí sentados.
Les saludé con un "hola" Demasiado seco, no estaba de humor.
Me senté al lado de Damon sin decir ni una palabra.
Poco a poco nuestros compañeros se fueron levantando y comenzaron a hacer sus tareas.
Yo me dirigí hacia una de nuestras mochilas de las que saqué una botella de cristal.
Me senté a los pies de un árbol un tanto alejado del campamento.
No quería estar cerca de ellos, no podía.
El sol me pegaba directamente en la cara calentandome ligeramente aunque el frío estaba muy presente en esas fechas.
Pasaron un par de horas hasta que una persona se sentó a mi lado.
Ya sabia de quien se trataba pero aún así giré mi cabeza.-¿que es? - preguntó Carl señalando la botella.
-Bourbon, me ayuda a evitar pensar en tu yugular- dije intentando bromear.
Carl me miró, creo que no lo había hecho mucha gracia la broma.
Llevé la botella a mis labios, noté como el líquido me quemaba la garganta pero me gustaba aquella sensación.
-no se que decirte Ana- confesó el chico.
Volví a girarme, lo justo para quedar de frente a él.
-lo entiendo de verdad, no es algo fácil de asimilar- reconocí.
-vivo en un mundo donde no sólo hay caminantes, sino que también hay vampiros- dijo suspirando.
-te has olvidado de los hombres lobo y las brujas-
Volvió su cabeza y me miró asombrado.
-tienes que estar de broma-
-para nada, los brujos y brujas son los que por ejemplo nos hacen nuestros anillos de día y el mordisco de un hombre lobo es mortal para un vampiro- expliqué.
Asintió con la cabeza procesando la información.
-¿puedo hacerte una pregunta?- dijo.
Asentí ligeramente en respuestas.
-cuando estabamos juntos ¿querias ya sabes...? - comenzó intentado no terminar la frase.
-¿morderte?- dije por el - no, se controlarme, me costó mucho pero ahora puedo hacerlo. Aunque en este momento, por lo de ayer me está costando un poco mas- respondí.
-¿que sientes?- volvió a preguntar.
-puedo notar cada latido de tu corazón y sentir como la sangre circula por tus venas- contesté.
Sonrió de medio lado, no sabía que decir, el tampoco.
-entiendo que a partir de ahora no quieras estar tanto tiempo conmigo- dije tras unos minutos de silenció.
-claro que quiero estar contigo Ana, aunque no lo creas me importas- contestó.
Le miré incrédula. ¿Como podía seguir queriendo estar a mi lado?
El era tan buena persona...
Y yo, era un vampiro, sinónimo de asesina.Holaaa!!
Solo quería deciros que tengo una historia sobre Carl más avanzada que esta. Me gustaría mucho que la leyerais

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BLOOD // CARL GRIMES
De TodoAnastasia Salvatore una adolescente aparentemente normal que sobrevivía en el Apocalipsis zombie, totalmente rota y vacía hasta que se topa con carl Grimes. Secretos oscuros pero... ¿quien iba a imaginar que no sólo los caminantes querían probar s...