H U N G E R 「Cannibal!Tododeku AU」

ஓீ͜͡ঔৣ͡ ↬ T W O

Izuku fue incapaz de pegar el ojo durante toda la noche, pero, en vez de quedarse dando vueltas sobre el colchón, decidió aprovechar el tiempo para pensar en varias estrategias que lo ayudarán a descubrir información relevante acerca de aquellos aspectos que el caníbal se ha negado a compartir con los profesionales que lo han tratado en el pasado.

Su plan principal es actuar genuinamente interesado en los gustos del criminal, intentando crear la imagen de un joven aficionado a las situaciones morbosas y a las páginas de contenido sangriento que pueden encontrar en internet. De no resultar, entonces se arriesgará y tomará el camino romántico, tal y como lo decidió la tarde del día anterior.

Es su segunda oportunidad y tiene muy claro que si falla no habrá una tercera. En el mejor de los casos, su fracaso lo llevará a un largo período alejado de las misiones de gran importancia, tomando el rol de un oficial normal de policía. Por otro lado, en el peor de los casos, será despedido y despojado de los títulos que tantos años le costó conseguir.

Ha memorizado el trayecto a la habitación de Todoroki, a quién encuentra con una expresión relajada mientras mantiene sus ojos en las páginas de un libro diferente al que leía en su primera visita, demostrando así su capacidad mental avanzada que le permite procesar diversos tipos de información con sólo echarles un vistazo.

Midoriya respira profundamente tras saludar a Fuyumi, configurando y adaptando su nueva personalidad, aquella que necesita imitar de forma extremadamente convincente para que al semi albino le sea imposible descubrir su mentira, y, cuando se siente listo, avanza.

-Buenos días, señor Todoroki- saluda mientras se coloca entre la silla y el cristal. El criminal cierra su libro al levantarse de su cama.
-Agente Midoriya, es un placer tenerlo nuevamente en mi humilde prisión, dígame, ¿Trae otro cuestionario? Porque me temo que hoy también me negaré a responderlo- indica con desinterés, pasando una mano por el corto y blanco cabello de su lado derecho.
-La verdad, no- comienza su actuación utilizando un tono más dulce, nervioso y bajo. Uno de sus dedos va a su mejilla para rascarla con fingida timidez. -Hoy vengo con intenciones personales, me gustaría saber más sobre sus gustos-

Shoto alza una ceja con incredulidad, aunque eso no impide que le dedique una amplia sonrisa al agente. Los movimientos de Izuku están perfectamente estudiados, pero su ejecución es torpe y fácil de reconocer por alguien que usaba los mismos métodos para conseguir la tierna carne de inocentes jóvenes a los que enamoró y manipuló hasta el punto de incitarlos a entregarse completamente.

Esta vez puede dejarlo pasar, es divertido observar a un novato intentar imitar a un profesional.

-No hay nada que decir, ustedes ya saben todo de mí- aclara, acercando su silla al cristal para sentarse frente al pecoso.
-Leerlo no es lo mismo que oírlo, ¿Qué dice? ¿Me permite escuchar el por qué eligió la carne humana sobre los productos animales?- inquiere mientras de su bolsillo saca una pequeña libreta con el número trece en la portada. -Si no le molesta, tomaré algunas notas para mi uso personal-
-A diferencia de usted, mi infancia fue difícil, mi padre buscaba la perfección en cada uno de sus hijos, pero conmigo parecía estar obsesionado y solía golpearme cuando cometía errores, por otro lado, mi madre me amaba muchísimo, ya imaginará porque decidí conservarla junto a mí para siempre-

Midoriya sabe que Shoto desarrolló una obsesión malsana con la carne humana durante su etapa pre adolescente tras investigar mucho sobre el tema. Son los primeros datos descritos en el informe principal, por lo que necesita desviar la conversación hacia algo más profundo, quizás hacia un recuerdo reprimido que saldrá a flote si encuentra el camino correcto para llegar a él.

-Me aterrorizaba ser descubierto, pero no pude evitarlo, necesitaba comprobar por mí mismo que la carne humana era tan deliciosa como lo describían en el «Cannibal Cafe»- la sonrisa en su rostro es simple, pero tiene una pizca agresiva que se graba en la retina del pecoso.
-¿Puede darme una razón concreta del por qué canibalizó a su madre?- su mirada busca ese algo en los ojos bicolores del caníbal, sin embargo, —al contrario de su sonrisa— estos demuestran tristeza. -¿Señor Todoroki?-
-Ella merecía todo lo bueno de este mundo, por eso no pude permitir que su cuerpo fuese enterrado con esos horribles cortes en sus brazos, no era su culpa el que yo fuese un niño inútil, así que eliminé cada dolorosa marca de su ser... Y luego no pude detenerme- traga saliva, el sólo recuerdo del sabor le hace agua a la boca. -Tenía tanta hambre...-