H U N G E R 「Cannibal!Tododeku AU」

ஓீ͜͡ঔৣ͡ ↬ E I G H T

⚠️ADVERTENCIA: VIOLACIÓN, TORTURA, ASESINATO⚠️

Cada pequeño rincón del salón de la residencia se ve inundado por el largo silencio que se ha instalado entre los presentes tras la repentina e inesperada confesión hecha por Tomoe, quién aún se mantiene escondida entre los brazos de su esposo, inmersa en sus traumáticos recuerdos. Izuku logra mantenerse sereno durante los primeros minutos de espera, atento a cualquier palabra que pueda salir de la boca de la fémina, no obstante, su cuerpo comienza a tensarse poco a poco al sentir como en su persona se clava la amenazante mirada, tan fría como el hielo y tan afilada como un bisturí.

-Respira profundo, cariño, puedes hacerle daño al bebé si te agitas demasiado- habla el albino, usando un tono lo suficientemente alto para que el agente comprenda el porqué de su expresión molesta.

Midoriya entonces siente como una fuerte oleada de culpa se estampa bruscamente contra su espalda, provocándole un escalofrío que perjudica el movimiento de sus manos al recoger los trozos de porcelana que se han incrustado en el tatami. Reconoce que su realidad se ha visto sumamente alterada al estar tan inmerso en su búsqueda interminable de respuestas, sin embargo, le sorprende el hecho de no haber sido capaz de percatarse del abultado vientre de la mujer frente a él.

-No tuve otra opción...- repite, aunque su voz ahora suena lenta, como si dentro de su cabeza el interruptor de emociones se hubiese apagado. -Le contaré todo lo que sé, agente Midoriya- el nombrado asiente, deteniendo sus acciones para proseguir a abrir su libreta y tomar notas.
-Tómese su tiempo, lo menos que quiero es perjudicar su estado- sonríe suavemente, dándole a la joven la confianza para comenzar su relato con una frase más impactante que la anterior.
-Yo ayudé a Shoto a esconder los cadáveres-

❝ La oscuridad nocturna de las calles del Barrio de Shibuya es algo a lo que Tomoe ya está acostumbrada, por lo que es capaz de sentirse segura aún cuando existen rumores de un posible asesino en serie merodeando por los alrededores de la Estatua de Hachiko. Está cansada física y mentalmente, su cuerpo ruega por un baño con agua caliente para eliminar la tensión en sus músculos y su cerebro pide a gritos una buena noche de sueño, sin embargo, no puede darse el lujo de cumplir sus caprichos mortales ya que aún le queda un largo camino para llegar al departamento que comparte con Natsuo y Touya hace tres años.

Harajuku se caracteriza por ser una zona bastante transitada a todas horas, por lo que Kurosawa considera que no es cien por ciento recomendable realizar su trayecto habitual debido a que no se siente con la motivación para verse envuelta en una eterna entrevista con los clientes que visitan el Kawaii Monster Café, su extravagante lugar de trabajo donde es adorada por su rol como "Toshio", una Baby Monster Girl. Se mantiene totalmente concentrada en los apuntes que ha estudiado con sus compañeras para su examen de anatomía mientras se dirige hacia la estación de trenes de Shibuya a paso calmado, por lo que no logra percibir a tiempo al hombre que ahora la mantiene acorralada en un pequeño callejón.

Su vestimenta actual consta de un pantalón con tirantes, una blusa oscura y la chaqueta celeste de su novio. Está más que claro que su ropa no cae en la categoría de "provocativa", pero aun si estuviese desnuda en medio de la calle sabe que nadie tiene el derecho a tocarla sin su consentimiento, no obstante, aquel hombre continúa culpándola por provocarlo mientras sus manos se cuelan en la ropa interior de la aterrada joven.

Desesperada intenta quitarse al extraño de encima, pero sus extremidades flaquean cada vez que trata de empujarlo debido a la forzada penetración que ejercen los dedos del hombre en su interior. Duele, aquel no es un toque gentil como el que Natsuo le ofrece cuando están juntos íntimamente, y no importa cuanto arañe, muerda o grite, su atacante se niega a dejar de lastimarla.