H U N G E R 「Cannibal!Tododeku AU」

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⚠️ ADVERTENCIA: MANIPULACIÓN, ASESINATO, CANIBALISMO ⚠️

Izuku se despierta agitado debido al susto causado por la pesadilla que ha atormentado sus sueños. El brazo que ha estirado inconscientemente se desploma suavemente sobre su rostro, rozando una húmeda compresa que se encuentra cubriendo su frente. Su último recuerdo nítido es la expresión perturbada de Tomoe, aunque es incapaz de obtener el contexto que obligó a la fémina a mostrarse tan aterrada, no obstante, está completamente seguro de que tiene relación con el gran nudo que puede sentir en lo más profundo de su estómago, mismo que hace que su cuerpo se sienta pesado y cansado.

Más atontado que adormilado voltea su rostro en dirección a su mesita de noche para comprobar la hora actual, sin embargo, lo primero que sus orbes captan son dos post-it brillantes con caligrafías distintas que indican que sus amigos estuvieron en su casa, probablemente haciéndole compañía durante su estado de inconsciencia. Lentamente estira su brazo izquierdo hacia el mueble para alcanzar los recados, los cuales procede a leer tras frotar sus ojos para obtener una mejor visión de los caracteres.

「 No volveré a cuidar de ti, tonto Deku. Te preparé una sopa para que te olvides de la muerte del maldito caníbal.
SI NO TE LA COMES ME ENCARGARÉ DE ENVIARTE AL HOSPITAL PARA QUE TE AUSENTES MÁS DE TRES DÍAS.
—Kacchan. 」

「 Izuku, te debo una gran disculpa así que espero que nos podamos ver pronto. Hablaré con Toshinori para que no te moleste con el papeleo del caso. Cuídate mucho, sé que pronto estarás bien.
—Hana ❤︎ 」

Una sincera sonrisa se cuela en sus labios. Es extraño que Katsuki se preocupe por su bienestar, aunque le proporciona una sensación agradable incluso sabiendo que es posible que haya sido obligado por su esposa a realizar tal acto de gentileza. Su alegre mueca labial se desvanece al releer la nota de su amigo puesto que el contenido de esta le indica que el fallecimiento de Shoto no ha sido un mal sueño creado por su inestable subconsciente. De su boca escapa un largo y pesado suspiro cargado en tristeza, pero decide levantarse de su cama para centrarse en cualquier actividad que le impida llorar la pérdida de su amado.

No tiene hambre, no obstante, sabe que la comida que Bakugo ha preparado para él le subirá un poco el ánimo. A paso lento recorre los pasillos superior e inferior de su residencia, arrastrando sus descalzos pies por la fría madera hasta que hace ingreso a su cocina, lugar en el que se encuentra con un tazón delicadamente posicionado sobre una bandeja, acompañado por un delicioso honey toast. «Esto es un poco cruel, Kacchan» piensa al observar el pastel proveniente de las pastelerías de Shibuya.

Sus dedos entonces se dirigen al plástico que protege el butajiru contenido por el rojo tazón, recibiendo al instante el aroma a sopa con carne de cerdo que aún desprende un cálido vapor que le da a entender que sus amigos se marcharon pocos minutos antes de que recuperase la consciencia. A pesar de que la esencia del alimento le ha abierto un poco el apetito, aún no es suficiente para mejorar su estado anímico, por ende, decide tomar una cerveza del refrigerador. Dentro del aparato hay envases con verduras frescas picadas —posiblemente por Katsuki en caso de que Izuku desee preparar una nueva comida—, una lata de néctar de melocotón a medio beber, un paquete de mochi olvidado por Ochako y al menos catorce onigiris del 7-Eleven, pero no hay rastro de sus bebidas alcohólicas.

-Kacchan...- murmura, maldiciendo a su compañero por llevarse el único bebestible que lo ayuda a relajarse. -Alexa, enciende la televisión- ordena a su dispositivo inteligente mientras él traslada la bandeja de madera hacia el salón.