Total Desastre

V

Son la 5:00 AM y ya estamos mi madre yo abordando el Jet privado para nuestro vuelo a Londres el cual nos tomará cinco horas para llegar.

Me siento en uno de los asientos y mi madre hace lo mismo pero al otro extremo, luego de unos minutos el piloto nos anuncia que pronto emprenderemos el vuelo, me colocó el sintieron de seguridad y me acomodó en mi asiento poniéndome los auriculares y volviendo a cerrar los ojos.

(...)

-Hijo..... hijo - dice mi madre moviendo mi hombro suavemente.

-Mmmm.. - digo alejándome de su toque para seguir durmiendo.

-Cariño, ve a dormir en la cama - insiste sin dejá de moverme.

-Voy en un momento - digo adormilado.

- Charles Peter Davies Lee, despierta ahora mismo - dice con voz seberá.

- Esta bien, ya estoy despierto - digo soltando un bostezó - ¿Que pasa? - digo aún sintiendo los efectos del sueño.

- Tu teléfono a estado sonando constantemente - dice parada frente a mi - Creo qué es tu amigo Bryce - dice encogiéndose de hombros.

- Ah, gracias, lo voy a llamar en un momento - digo sonriendo- ¿Cuánto de vuelo llevamos? - cuestionó desubicado.

- Llevamos alrededor de dos horas y medias - dice mirando su reloj de mano y yo asiento ( aún es temprano) - si quieres puedes comer algo entes de llamar a Bryce - dice acariciando mi cabello.

- No, comeré algo en cuanto lleguemos - digo poniéndome de pies - ¿Tu ya comiste algo? - digo parado frente a ella.

- Si me tomé un té y unos panecillos - dice regalando me una hermosa sonrisa.

-Bien, entonces iré a dormir nuevamente - digo besando su cabello - Cualquier cosa me avisas - digo caminando a la pequeña recamara.

- Si cariño no te preocupes - la escuchó decir.

La estado en la recámara me recuesto sobre la cama en ese mismo instante me suena el teléfono en uno de lo bolsillo trasero, me apresuró a contestar con el ceño ligeramente fruncido al ver que el número que está en la pantalla no es el de Bryce sino uno desconocido.

-¿Alo?- es lo primero que digo.

- Buenos días joven Davies - dice una voz masculina - Le habla el comisionado Smith - se presenta el hombre más no digo nada para que continúe hablando y así lo hace - Es para informarle que ya emos dado con el paradero de su autor, no tiene ningún rasguños, solo unos cables contados, nada más.

- Bien, gracias por informarme - digo anu qué bueno, no cómo si fuera gran problema el perder el auto, si en un momento estuvo (por así decirlo) asustado por la reacción de sus padres y sobre protección pero ya está resuelto.

-¿Usted lo pasará a buscar? - el comisionado interrumpe sus pensamientos.

- No, me temo que no - dice si decir la ratón, no lo vio necesario.

- Entonces que va a hacer, nosotros ya cumplimos con nuestros deber.

- Yo que usted no estaría muy seguro - dice con un tono insinuante - Ni siquiera me a dicho que derivó a quién se lo robo.

- De eso le quería hablar - hace una pausa y continua - Lo oficiales que encontraron el auto octuvieron ningún pista, aparte de una botella de alcohol y unos porro, nada más.

- Pero tal vez pueden verificar si hay huella en el volante o algo, no se. - dice soltando un suspiro - De todos modos, no importa, ya encontraron el auto y ni mientras mi padre no se enteré no hay ningún problema. - dice restándole importancia.

- ¿Es quiere decir que retirará la denuncia?.

- Si, así es - dice mirando el reloj en su muñeca el cual se lo había regalado Kyle de regalo de cumpleaños - Por cierto, el auto lo pasará a recoger un amigo mío - le informa.

- Si, sólo tiene que darme uno datos y listo - y así lo hice - Bien eso es todo, recuerde que cualquier cosa puede llamar.

- Gracias, pero no será necesario - dicho ésto colgó la llamada.

Eso pensó Charles, sin saber que estaba equivocado.

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El sonido de la puerta siendo golpeadas repetidas veces la despertó, Rosalie se había quedado profundamente dormida luego de haberse funado todos los porro que, ahora, Cameron se encuentra de conseguirlos.

No hace ningún intento de pararse pensando en que tal vez quién este tocando la puerta se cansará de no tener ninguna respuesta de parte de ella y, al no escuchar que tocaban volvió a serrar los ojos pero solo por un momento y que la puerta se abrió. Rodo los ojos al saber de quién se trataba y ni siquiera se inmutó al oír los pasos y se dio cuenta de que no eran los pasos pesados de la directora de orfanato, no, ésto eran livianos y totalmente calmados, los conocía muy bien.

- Rosy - dice en un susurro Serca de ella - Tienes que levantarte, la directora te está esperando en su oficina - Rosalie no contesto a pesar de sentirse feliz tener a una de las únicas personas a las que le había cogido cariños en ese lugar, no se movió, no quería hablar - Ya veo, no quieres hablar - dice y se inclina para besarle la frente - No se que hicieron está vez pero se le ve muy enojada - dice ahora acariando le suavemente el cabello - Vez si la convenzo de que ses hoy ¿Ok? - Rosalie asiente lentamente - Voy volver más tarde para que te bañes y te traeré Comida - luego de decir eso se va.

Rosalie se queda igual, sin moverse solo mirando al techo perdida en sus pensamientos que a la vez no lo son, aveces simplemente piensa que no está pensando nada o hay otra veces en las que prefería no pensar nada y no darse la oportunidad de torturar se co sus recuerdos esos que la dejaron marcada en cuerpo y alma deporvida.

En la noche Ana regreso, pero no sola, Cameron la acompañaba este al verla le dedicó un intento de sonrisa, no le gustaba verla así, prefería mil veces que estuviera amargada y grosera, así al menos hablaba y, ¡Asta hacia una mueca por sonreía!.Cameron piensa que por más que pasén los años no podrá acostumbrarse a verla así, por eso cuando está malhumorada trata de complacerla en lo que le pida, y ella solo le pide una cosa.

Sólo comió un poco de la sopa que le preparo Ana y luego tanta insistencia de parte de Ana fue a bañarse, al salir de baño ninguno de lo dos se encontraba en su recámara. Se puso algo de ropa y te tiró nuevamente a la cama quedando dormida casi al instante.