Un chico misterioso (KAI & TÚ)

Capítulo 7

¿Qué hacía en mi casa?

Nada más verle abrir la puerta, volví a romper a llorar. Enseguida le dije:

- Kai, vete porfavor.

- ___(tn), lo siento. - Dijo con pena y esperando otra respuesta.

Esta vez alcé un poco más la voz.

- Kai, vete de aquí porfavor. - Le dije llena de lágrimas.

Después de mirarme fíjamente durante un buen rato, él se fue, pero antes dijo:

- Sé que te he hecho mucho daño, pero no soy yo el que tiene la culpa de todo. Y..., esto nunca lo olvides, nunca dejaré de intentarlo, nunca te dejaré ir.

Era impresionante saber que no era mentira, ya que nada más entrar en la habitación, subió bastante su temperatura.

¿Y si no fue sólo por su culpa? Daba igual. Ahora tenía otras cosas que pensar, como quién me había llevado al hospital. Porque mi madre no lo había hecho.

. . .

Al día siguiente, fuí con una chica del instituto que había conocido cuando Kai estaba desaparecido.

Tampoco me llevaba muy bien con ella, pero no iba a ir con Xiumin y Luhan, porque podrían ser el otro hombre lobo que se hallaba en el bosque, aquella maldita noche.

Al llegar al instituto, vi a Kai, a Luhan y a Xiumin, sentados en un banco del patio.

Notaba como Kai me miraba fíjamente, aunque intenté mirarle lo menos posible. Pero..., esque me miraba de una forma tan especial... Al verle, noté también que sus ojos estaban llorosos y cansados casi como los míos. Y de nuevo, no pude contener que una pequeña lágrima, bajara por mi blanca y fría mejilla.

Estaba enfadada con Kai, pero viéndolo así, me daban ganas de besarle y notar su alta temperatura tan agradable de nuevo. O uno de sus cálidos abrazos.

Pero me había hecho mucho daño, y no solo por el dolor. También por los sentimientos que sentía por él.

Estaba con Esther (la que me había acompañado aquella mañana) sobre las escaleras de la puerta del instituto, cuando...

- ___(tn), me han dicho que lo de tú y Kai ya no... - vi a D.O muy animado y feliz.

- Sí, y... D.O, ¿por qué no me dijiste que eras un hombre lobo? - le pregunté.

- Tenía miedo de que pensaras mal de mí.

- D.O, prefería no mezclarme por unos días con el tema de los... (hombres lobo) - dije.

- Vale, lo entiendo. - Dijo él cuando se fue.

En clase no paraba de mirar a Kai disimuladamente, pero sin abuso, porque él sí que me miraba fíjamente.

Cuando acabaron las clases, me fuí a casa. Y de nuevo al subir las escaleras y dirijirme hacia mi habitación, me encontré un posit pegado a mi espejo que decía:

"Tranquila, esto no es de Kai, somos Luhan y Xiumin. Ya sabemos que quieres tomarte un tiempo para recapacitar, pero, si quieres saber la respuesta de quién era el otro, dirígete hacia el bosque."

Cuando pude entender la situación, ya estaba caminando hacia el bosque. Y sin esperarlo, ahí estaba Kai, con el cabello rubio (se había teñido y... Le quedaba genial) y una rosa roja en la mano derecha. Creo que ya sabía de qué iba eso, y no podía ver esos ojos llorosos mirándome fíjamente. Le echaba mucho de menos. Así que me acerqué a él y ví que su mano inclinaba aquella preciosa rosa. Muy rápidamente, cogí la rosa y rodeé su cuello con mis brazos. Y...