RWBY ZERO

Capitulo 22

Un herrero toro fauno colocó la nueva armadura de Jaune en el mostrador. "Ahí tienes, hijo", exclamó el hombre fuerte. "Va a ser más pesado de lo que estás acostumbrado, pero me lo agradecerás la próxima vez que te enfrentes a un par de garras".

"Wow" susurró Jaune con asombro. "Yo ... no sé qué decir."

"No tengo que decir nada. Solo póntelo" ordenó el herrero. "Iré a buscar el resto".

El hombre con cuernos volvió a su taller.

Jaune miró fijamente el magnífico chasis. Ruby y él lo habían estado diseñando durante semanas, ampliando el blindaje y reforzando el acero. Después de que Mordred hubiera masacrado a la horda de Grimm que atacaba la aldea y él y Ruby ayudaron a apagar los incendios, el herrero de la ciudad estuvo más que dispuesto a hacer los ajustes necesarios para ellos, sin cargo.

Ahora, aquí ante él estaban los frutos de su trabajo.

"Bueno, te lo vas a poner o te vas a quedar mirando, idiota", le espetó Mordred. Se apoyó contra la pared de la tienda, comiendo vigorosamente palomitas de maíz de una bolsa que tenía en la mano. Le recordaba a su madre y sus propios hábitos glotones, y con su rostro aún idéntico, Jaune no pudo evitar la punzada que le llegó al corazón.

Durante los cuatro meses que había pasado con su Sirviente ... hermana ... hermano ... lo que sea, había ganado un nuevo aprecio por los hermanos con los que había crecido. Claro, le habían trenzado el pelo mientras dormía y lo habían obligado a ponerse vestidos, pero también le hacían sopa cuando estaba enfermo y lo ayudaban con su tarea para que pudiera pasar al siguiente grado. Mordred pasó todos sus días buenos llamándolo 'pretendiente' y golpeándolo en la cara.

En sus días malos, insultó a mamá y luego él quiso darle un puñetazo en la cara.

Jaune negó con la cabeza y se quitó la armadura básica que había comprado para Beacon. De todos modos, se había vuelto un poco pequeño. Tal vez el paso brutal de Qrow de casa segura a casa segura estaba funcionando bien después de todo. Se volvió hacia los demás.

Las manos de Ruby se llevaron a la boca. Ahogó un coro de risitas. Mordred se levantó directamente de la pared en estado de shock. Incluso el siempre imperturbable Archer arqueó una ceja.

Eso realmente preocupó a Jaune. "¿Qué? ¿Qué es?"

Ruby señaló su pecho. "¿Que es eso?"

Jaune miró su suéter oficial de Pumpkin Pete. "¿Qué? ¿Mi sudadera con capucha? Siempre he tenido esto".

Ruby siguió riendo e incluso resopló. "¡Tiene un lindo conejito!" ella declaró.

"Es Pumpkin Pete" insistió Jaune contra su risa. "¡Ya sabes, del cereal!"

"¿Qué hiciste? ¿Enviar una tapa de caja para un premio?" Preguntó el segador rojo, jadeando por respirar.

"Sí, cincuenta."

Ruby se detuvo por un momento. Entonces, se rió aún más fuerte. Finalmente, se quedó sin aire y cayó al suelo.

Jaune se desplomó. No fue culpa suya. Mamá había comprado docenas de cajas por semana, principalmente para ella. Pensó que a ella le gustaría el suéter como regalo de cumpleaños, pero la compañía le había enviado la talla equivocada. Mamá no se había enojado. Ella dijo que se veía lindo con él.

Mordred negó con la cabeza. "La insistencia de este mundo en unir animales a la comida es ridícula. Si estás vendiendo cereales, ¿por qué elegirías un conejo como símbolo?"

Jaune abrió la boca para discutir. Después de todo, la historia de fondo del cereal era clara: Pumpkin Pete fusionó sus calabazas con malvaviscos para alejar a los Grimm que querían comerse sus calabazas mágicas para destruir a la humanidad.