RWBY ZERO

Capitulo 61

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Beta-ed por Ryujomaru15

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Vacilar.

Hazel no sabía por qué, pero el nombre fue como un trueno contra el cielo complaciente de su mente. Tan pronto como la palabra salió de la boca del Rey de los Conquistadores, las nubes invadieron su cabeza, destellos de imágenes extrañas pero tan familiares bombardeando su conciencia.

Un complejo en expansión con una torre del reloj a la cabeza. Furia por ser menospreciado y degradado.

Sombras que se filtran a través de un denso bosque, un sello de sangre pintado sobre la hierba. Una oportunidad de demostrar su valía.

Una risa estruendosa encima de un carro de rayos. Un golpe contundente que fácilmente podría otorgar una suave palmada.

Un desierto. Prueba de una ambición insaciable y una voluntad ilimitada.

Un manto carmesí que hacía que el mundo pareciera tan grande, tan maravilloso.

Su corazón, tanto tiempo firme y sin vida, de repente latió como una estampida de cascos de caballo. Por un momento, la neblina de su interminable existencia pareció aligerarse, una terrible esperanza se encendió en su alma.

Pero luego las imágenes continuaron. Y el sueño se convirtió en pesadilla.

Un puente. El acero escarlata trazaba un pasaje a través de un río iluminado por la luna. Y al final estaba él, el rey dorado.

Gilgamesh.

Sacó su espada y el maravilloso desierto se convirtió en cenizas, su ambición insuficiente contra la ley de la creación. El manto carmesí se desintegró a la luz de las estrellas, la sangre que lo había manchado perdió una vez más.

Había un niño. Un niño asustado. Un niño leal. El niño se había presentado ante dos reyes. Uno, había desafiado, declaró su verdad. La verdad que le dio el otro. El rey de-

Conquistadores.

El Rey de los Conquistadores le había dado su verdad. Su orden.

Le había ordenado que viviera.

"Waver ... ¿ese era mi nombre? ¿Antes de conocerla?"

El Rey de los Conquistadores asintió con la cabeza, su rostro eternamente sonriente se hundió en el dolor. "El tú de mi Reality Marble me informó de tu existencia hace un tiempo. Me dijo lo que pudo de lo que pasó, de cómo te volviste como eres ahora, pero había bastantes lagunas".

Hazel se rió entre dientes. Era un sonido seco, una diversión compasiva, aunque no podía decirlo hacia sí mismo o hacia Iskandar. Fue más que sorprendente que esta versión alternativa hubiera podido acceder a cualquier parte de su pasado, especialmente porque él mismo apenas podía recordar los detalles. Todo lo que recordaba de la primera aparición de la corrupción era una oscuridad insondable que gritaba a través del cielo, un firmamento de barro que descendía hasta donde alcanzaba la vista. Habría ardido junto con la ciudad si una oleada de pétalos de flores rosadas no se lo hubiera llevado. El trabajo de Ozpin, cuando Gaia acababa de liberarlo y antes de que su maldición lo redujera. Quería información de la zona cero y esperaba que el último maestro superviviente de la guerra pudiera ayudarlo. Desafortunadamente, Hazel estaba tan confundida como cualquiera.