Fanfic 1: Un viaje especial

Capítulo 15

-¿Y ahora qué? ¿Se aliarán para molestarme con eso?-pregunta Kili.

-No, a mí me basta con que me digas como se llama-digo. Duda un poco antes de responder, aunque lo hace en voz tan baja que apenas y logro entender-¿Me odiarás si te digo que no escuché?

-A veces puedes llegar a ser desesperante ¿lo sabías?-me dice.

-Sí ya lo sé, ahora cierra el pico y responde-digo impaciente.

-Se llama Tauriel-responde sonrojándose un poco-¿Ya estás feliz?

Sonrío satisfecha

-¡Es muy lindo!-le digo mientras le doy un abrazo.

-Bien, bien, pero ahora tú cierra el pico y no digas ni una palabra.

-Te prometo que tu secreto está a salvo con nosotros-digo seriamente.

-Lo que ella dijo-agrega Fili.

Acabado ese asunto, nos acercamos al resto mientras esperan las armas. Bardo llega con varias cosas y las deposita en una mesa.

-¿Qué es esto?-preguntan todos.

-Las armas-responde Bardo-Eso es una palanca y aquello un martillo. En defensa de sus vidas eso les servirá.

-Thorin, tomemos esto y vayámonos. He peleado con menos que esto-murmura Balin.

-Les aseguro que no conseguirán nada mejor por aquí. Las mejores armas se encuentran en la armería principal-dice Bardo antes de irse.

Cuando menos me doy cuenta, los demás ya tienen su plan para ir por armas de verdad. Esperamos a que oscurezca un poco y salimos sigilosamente. Nos movemos lo más rápido que podemos y por fin llegamos a la armería y entramos por una ventana.

Estoy lista para tomar algo cuando varias voces me llaman.

-¡Lana! No nos vendría mal un poco de luz-claro, olvidaba que mis ojos son un par de velas que tienen luz propia sin necesidad de llamas. Voy a todos los rincones con los ojos abiertos a más no poder y evitando parpadear.

Cuando ya estamos a punto de escapar un ruido llama nuestra atención. Me acerco a la escalera y veo que Kili ha resbalado dejando caer todo lo que llevaba.

Al momento, oigo que los guardias ya vienen hacia acá. Me pongo helada y trato de ayudar a mi hermano a ponerse de pie y huir pero ya es tarde. Levanto la vista y veo que nos tienen rodeados.