A ti, que no sabes que existo...

#11 A mi salud

Bonita frase la que titula esta vez, reí de pensar como puede decirse en tantos conceptos y significar tantas cosas en tan variados escenarios.

Esta vez, lastimosamente debía ser tomada literalmente.

Acabo de ser revisada por mi padre, pasó su mano por mi frente, mi cuello y mis manos. Quería asegurarse que mi cuerpo no se estuviera cocinando a si mismo.

—Si no hay fiebre, no hay infección.

¿Cuantas veces he tenido que vivir ese mismo procedimiento en mi vida? ¿Cuantas veces me he sentido tan mal que simplemente siento ganas de llorar por lo débil que puedo llegar a ser?

—Hay que solicitar una cita con el médico, tendrán que volver a sacarle sangre.

Lo que él no sabe, es el miedo que he generado en los doctores que tienen las agallas de sacarme sangre, porque además de ser extrañamente bochornoso, los resultados son algo que en ocasiones les cuesta leer.

Es asqueroso que tu cuerpo no tenga ganas de comer, tampoco que si llegas a no hacerle caso y alimentarte, rechacé por completo la comida.

Ante todo es irónico, las personas que son débiles físicamente, tienden a ser un poco más puestas internamente y así al contrario.

En mi caso, depende de lo crítico de mi estado, cuando estoy bien puedo ser una persona con la sensación de poder enfrentarme a todo, ahora mismo...Ahora mismo solo soy una joven en una cama, una chica que aunque coma, a los tres segundos tiene ganas de vomitar.

Y alguien que teme con todas sus fuerzas cortarse con una hoja de papel.

Otro punto irónico es como alertas a todas las personas a tu alrededor.

—Debes comer, porque enfermo que come, no muere.

Aunque también quedas totalmente fuera de las actividades tan simples como una charla en el salón.

—Bueno, tendremos que buscar algo que hacer. ¿Y quien se queda a cuidarla?— Escuché desde mi cama, como si fuera un secreto para mí.

Agradezco a todos los doctores que me han atendido, a aquellos que se han rendido también, porque se que no es fácil, y a mis padres, por todo este entrenamiento médico que han tenido que aprender por mi causa.

—Toma esto, nos dará una idea de qué pasa.

Espero poder levantarme de aquí y poder seguir con mis actividades en un rato. Mientras tanto y quien pueda...

Que se tome una a mi salud, que es lo único que puedo decir con una sonrisa.

Estaré bien, siempre he salido de estas, siempre he vuelto a levantarme, y el día que no lo haga, pues bueno...Por algo será.

Catherine.