Survivor ◦ Draco Malfoy [4]

02. GOLDSTEIN

[CAPÍTULO DOS]
GOLDSTEIN

...

Esa mañana tenía un muy mal humor, estaba algo emocionada por el cumpleaños de Harry, Ginny y Hermione habían hecho un pastel en la madrugada para él y tambien estaba feliz por Fleur y Bill sin embargo ese no era mi día. Observé el vestido azul cielo sobre la cama, Fleur decidió regalarmelo para usarlo ese día y usó la excusa de que a mí me quedaba mejor el azul, y que aquel vestido había sido uno de prueba para el que usaría ese día en la ceremonia pero que había descartado por completo.

No pude hacer muchas quejas pues era la petición de la novia, y yo no la haría enojar ese día. La boda sría en unas cuatro horas y Fred y George me habían llamado para ayudarlos a todos para montar la tienda. Bajé los escalones aún en pijamas y con el cepillo de dientes en la boca, mi cabello era un desastre y también mi rostro. Me recosté en el marco de la entrada dedicandome a cepillar mis dientes sin cuidado y al escuchar el aviso de Arthur para llevar a cabo la tarea, solo levante mis manos a mis lados alzando la tienda y colocandola en su lugar.

Los gemelos me observaron con los ojos entrecerrados y yo volví al baño para terminar de asearme, até mi cabello en una coleta alta sin peinarlo y bajé de nuevo. Pero me quedé en cierto shock al observar a Harry y Ginny besandose, George me tomó del brazo y se llevó un dedo a la boca en señal de que hiciera silencio.

Me apoyé junto a él del fregadero observando la escena con una sonrisa burlona hasta que Ginny se dio cuenta y nos dedicó una mirada tensa, a lo cual George y yo sonreímos aún más. Harry se giró para ver lo que Ginny veía y nos fulminó con la mirada a ambos.

-Primero que nada, buenos días cumpleañero -Murmuré riendo, George asintió y ambos se perdieron girando los ojos para buscar más privacidad.

-Así que...¿cómo has estado Annabelle? Tenía mucho tiempo sin verte -Buscó conversación el gemelo.

-Bueno, ya sabes...un poco de ésto y aquello -Intenté explicar pero mi cara no tenía buena expresión.

-¿Qué tal van las cosas con el odioso hurón? -Mordí mi lengua al escuchar su mención y desvié la mirada de George, él entendió mi silencio y habló -¿Estás bien?...

-Sí, es solo que, es dificil todo éste asunto y realmente no es algo de lo que quisiera hablar -Dije al fin, el pelirrojo solo avanzó hacia mí y me abrazó de forma protectora.

-No te preocupes Annie, yo sé cómo te sientes pero...recuerda que estoy aquí y también Fred si necesitas algo, un amigo, un apoyo, un hombro donde llorar, un lugar donde quedarte, incluso un proveedor si tus intenciones van más allá de las civilizadas en un lugar -Me guiñó un ojo de forma exagerada y reí sonoramente. Pero su risa paró de repente observando por la ventana detrás de mí -No puede ser...