No me olvides (Axetale)

Capitulo 1°

Quince años habían pasado desde que Frisk falleció, su hija, la cual había llamado Aliza poco antes de morir, quedo al cuidado de la madre de la castaña

Ya era algo tarde, Aliza estaba volviendo del trabajo, a pesar de tener solo quince había conseguido un empleo de medio tiempo, la paga no era del todo buena, y a veces sus compañeros de trabajo se aprovechaban de ella dejándole las tareas más pesadas, pero algo es algo, y era mejor que no tener nada.

-¿Abuelita? - dijo Aliza entrando a la casa - Ya llegué!... ¿Abuela? - al no recibir respuesta la adolecente comenzo a revisar toda la casa hasta encontrar a su abuela ya dormida en su respectivo cuarto, eso la tranquilizo un poco. Bajo a cenar una sopa instantánea, no tenía mucho tiempo para cocinar algo complejo, su rutina consistía en levantarse temprano, darle los medicamentos a su abuela y desayunar casi casi a la velocidad de la luz, para después ir caminando a la escuela que quedaba a unos 40 minutos de su casa, y luego batallar por su mala vista (culpa de la medicación indebida durante el embarazo de su madre) y sus compañeros que le hacían bullying, luego de eso se dirigía hacia su trabajo en una tienda de abarrotes, y una ves finalizado eso se dirijia hacia su casa para poder cenar algo y hacer sus deberes de la casa y una vez finalizado eso hacer la tarea de la escuela y después de esa agenda tan apretada, poder dormir un poco antes de repetir todo el proceso anterior.

Una vez terminada su cena subió a su cuarto y saco una pequeña caja de madera debajo de su cama, cuando sentía que ya no podía más le gustaba ver el único objeto que le quedaba de su madre, una bella pulsera con un corazón azul brillante como dige, siempre le había parecido hermosa, a veces le gustaba imaginar cómo hubiera sido su vida si ella aún siguiera con vida y jamás la hubieran internado, o si supiera dónde estaba su padre... Pero ella aún tenía esperanza, esperanza en que las cosas mejorarían, esperanza de encontrar a algún ser que la ame y la apoye incondicionalmente, y quién sabe, tal vez encontrar a su padre... con esos pensamientos Aliza se quedó profundamente dormida

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*Bip bip, Bib bib, Bib bib*

-*bostezo* Bien, es hora de comenzar un nuevo y alegre día lleno de oportunidades - se dijo a si misma con sarcasmo, de milagro no a lanzado contra la pared a ese viejo despertador que le irrita tanto.

Tomo un baño rapido y fue a despertar a su abuela, tenía que darle sus medicamentos

-Hey, ¿Cómo amaneciste? - dijo con calidez abriendo lentamente la puerta, al no recibir respuesta se acercó hasta la cama de su abuela y se sentó en un costado de esta - Despierta, es hora de tomar tus medicamentos

-Gracias Aliza, a veces se me va la noción del tiempo - dijo la pobre señora con una sonrisa débil en sus
labios - Pásame un vaso de agua por favor - dijo la anciana sentándose en la cama, y recargando su cuerpo contra la cabecera de esta

-Descuida, para eso estoy yo, para cuidarte - dijo la más joven - Bien, aquí tienes el vaso y la pastilla, tengo que irme o llegaré tarde, hay algo de verdura cocida en el refrigerador.

-Aliza, tengo que hablar contigo - se apresuro a decir su abuela antes de que Aliza saliera totalmente de l habitación

-Lo siento, ahora no tengo el tiempo contado - se sintió mal por haber tratado a su abuela de esa manera, pero no podía permitirse perder su beca y ahora tenía que apresurarse más para alcanzar a hacer la tarea que no hizo ayer.

-Esta bien, tranquila, ya hablaremos cuando vuelvas - dijo sonriendo comprensivamente, Aliza solo contesto con un "Gracias" y salió corriendo hacia la cocina, solo tomo una manzana para comérsela en el camino, no tenía tiempo para más.

Al llegar a la escuela fue a su locker (no c cómo se escribe) para tomar los cuadernos y libros necesarios, si tenía suerte acabaría con toda la tarea a tiempo y tendría algunos minutos de sobra para estudiar, últimamente no le estaba llendo muy bien en la escuela y ahora su preciada beca que le permitía pagar sus estudios pendía de un hilo

-Hola bichito raro~

-¿Que carajos quieres? - Ashley Murphi, está desgraciada abusiva va un año más adelante que Aliza, y al parecer su actividad favorita es burlarse de quién se le antoja y enrollarse con chicos populares

-¿Que no puedo venir a ver a mi fenómeno favorito? - ese era uno de los tantos apodos hirientes que recibía por sus ojos los cuales cambian de color de acuerdo a sus emociones, suelen ser azules la mayor parte del tiempo, pero en ocasiones de emoción o enojo (como ahora) sus ojos cambian a un color rubí intenso

-No, no puedes, no soy una atracción de circo, así que con el dinero de tu "papi" cómprate un bosque y piérdete - dijo la castaña seriamente, hoy no estaba de humor para las estupideces de esta chica de cabello negro como el carbón, así que en cuanto encontró los materiales que necesitaba, cerro su locker y se dirigió hacia aula

-No me ignores, fenómeno - dijo Ashley "amenazantemente" tomándola de el hombro

-¿Y si lo hago que? - respondió la castaña volteando ligeramente la cabeza de manera sería, Ashley no perdió tiempo, sonrió malisiosamente para luego atinarle un puñetazo en la mejilla derecha de Aliza, pero Ashley cometió un gran error, ella creyó que ya había ganado, así que se dió a vuelta, y estaba a punto de abrir su bocota para decir alguna estupidez cuando fue derribada al suelo por Aliza, la castaña no le dejo reaccionar y golpeó a la de cabello negro en la cara, una y otra vez, estaba harta de que tratarán como basura, tan harta de que gente como ella se aprovecharán de los que no podían o no querían defenderse, por eso no la dejaba en paz, todo lo que le estaba haciendo era para hacerle pagar por lo que había echo. A penas le dió cuatro puñetazos algunos alumnos las separaron por la fuerza

Tan sumergida estaba en sus pensamientos que no se percató del círculo de alumnos que se había formado alrededor de ellas

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-¿Por qué golpeó a la señorita Ashley? - despues de que los alumnos separaran a Aliza de Ashley, fueron llevadas a dirección, dónde Aliza tenía que responder un tedioso interrogatorio ¿Que nadie entendía que esa zorra se lo merecía?.

-Ella me golpeó primero - contesto Aliza en su defensa, pero ella estaba en desventaja, ya que el padre de esa malcriada donaba grandes sumas de dinero a la escuela, así que por obvias razones Ashley no se metería en tantos problemas, es más, ella no tendría ningún problema

-Ashley dice lo contrario... Escucha, Aliza, se que te esfuerzas por no perder tu beca, así que te daré una segunda oportunidad y no te expulsare, lo único que tienes que hacer es ir con ella y disculparte - a pesar de que era la opción más fácil y obvia para no perder su beca, también humillante, pero estaba contra la espada y la pared

-Bien, pero solo si me asegura que no perderé mi beca - dijo la castaña, el director solo asintió con la cabeza para después levantarse de su silla e invitar a Aliza a hacer lo mismo, al salir de la oficina encontraron a Ashley en unas sillas de espera que están al lado de la oficina del director

-Lo siento - la de cabello negro ni se digno a mirarla en vez de eso la desgraciada pregunto con burla "¿Que dijiste? No te escuché bien", Aliza gruño por lo bajo, le parecía realmente vergonzoso lo que le estaban obligando a hacer -LO-SIENTO - Ashley sonrió como la zorra que es, tenía suerte de que el director estuviera ahí, por qué si no le hubiera dejado morado el otro ojo y con la mandíbula rota por obligarla a tener que hacer semejante estupidez, y es que Ashley lo sabía, sabía que sería suficiente obligarla a qué se disculpara en frente de todos lo que se habían juntado a ver el chisme y del director para que todos la molestarán durante el resto de su estancia en la escuela. Aún que no dudaba que despues la demandarían."Te perdono, solo por qué se que eres un miserable fenómeno" después de decir eso todo el alumnado que los observaba comenzó a reír ¿Cómo podían ser tan crueles? esa era la pregunta que a diario se formulaba Aliza, pero por mas que lo intentaba no encontraba una respuesta valida

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Aún sigue habiendo desgracia
Pero solo tienen que esperar al igual que la protagonista
Las cosas se pondrán peor antes que mejor, pero
Cómo dice el dicho, después de la tormenta viene el arcoiris ¿No?