¿Destino? Hmph, lo destruiré por el bien de todos

Capítulo 6

Naruto había tenido las cinco horas más duras de su vida, ni siquiera su combate contra Madara o Kaguya lo había agotado tanto, fue una fortuna que hubiera cortado el enlace mental con sus inquilinos y no tuviera el rinnegan activo, se sentía cansado pero estaba feliz.

Justo ahora se encontraba mirando el techo, Yume acostada sobre su pecho con una gran sonrisa.

-Luego soy yo quien tiene una abrumadora resistencia.

-(Veo que te divertiste Naruto) – Kurama expreso con diversión, ya pensando en cómo molestar al chico en el futuro.

-(No empieces Kurama, al menos no esta vez, ya si quieres me molestas después, ahora hay alguien que parece impaciente para que le patee el trasero)

Tal y como Naruto había dicho, el raikage estaba parado delante en frente de la puerta de la casa que el Uzumaki había creado, su aura eléctrica ahora siendo de un color negruzco, indicando que ya no era solo raiton normal, sino una versión avanzada de este, conocida como rayo negro, el cual logro controlar por completo durante el tiempo que el rubio no estuvo presente, él se entrenó como un loco para volverse más fuerte y no perder ante el chico.

-¿Está seguro de esto raikage-sama? No ha buscado pelea, tal vez no sea lo adecuado ahora – un anbu parado unos pasos detrás de él índico con algo de miedo.

-No, no he buscado pelea pero si el raikage la quiere se la daré – el rubio respondió, su ropa siendo una chaqueta blanca, pantalones naranja y la misma capa que cuando peleo contra Pain – había venido sin ninguna intención de pelear pero si quiere que lo derrote ahora no hay problema.

La voz de Naruto era un poco fría y potente, cosa que provoco que el anbu cayera de rodillas al suelo por la potente presencia del chico mientras el raikage sentía nervios por primera vez, cosa que ni siquiera el hachibi había logrado conseguir.

-Entonces eso significa que vas a faltar a tu palabra.

Eso toco un nervio en Naruto, quien dejo salir todo su chakra en una explosión, el color siendo de un plateado divino pero sin ser su modo Ashura, el gran poder que el rubio emanaba en ese momento asusto al raikage, quien comprendió demasiado tarde que su oponente no era alguien que pudiera superar en el corto plazo, tampoco en mucho tiempo, solo era alguien inalcanzable para él.

-¿Quiere pelear de una vez raikage?

No sabiendo muy bien que hacer, el hombre se puso en su pose de combate, sintiéndose bastante alterado y nervioso pero aumentando el chakra y el poder en su técnica, lo que solo provoco que Naruto se tomara esto en serio.

A lo lejos, un clon del Uzumaki, sostenía a una aun dormida Yume, su mirada era seria, al igual que el original, él estaba enojado, ese hombre sabía que había una inocente y de todos modos decidió ir a atacar.

Naruto fue el primero en moverse, su velocidad siendo superior a la del raikage, incluso con sus sellos activos pero sabiendo que la velocidad y poder del Uchiha que tenía que enfrenar aún seguían siendo super a la suya.

Un fuuton: rasengan apareció en su mano, su color siendo de un blanco casi plateado del como el tono que su chakra, su ataque fue esquivado por poco, provocando que este atravesara sin dificultad alguna la casa que había construido con anterioridad como si de papel se tratara, la consecuente explosión de chakra y viento hizo titubear la resolución del raikage, el cual por un momento pensó en rendirse, hasta que recordó sus múltiples batallas con el hachibi, si podía vencer al bijuu, podría vencer al chico que salió del nuevo cráter en el campo de entrenamiento ¿verdad?

Naruto no dijo palabra alguna, estaba bastante enojado y Yume no estaba para ver, por lo que decidió activar sus ojos, ambos pasando a la máxima expresión de su poder, siendo el rinnegan con tomoes y la evolución del byakugan, de la cual tenía que pensar en un nombre.