• Castillo de Cristal • [EUNHAE]

12.

Le gustaba admirar las flores de cerezo, eran muy hermosas, aunque le traían recuerdos muy amargos también le traían momentos felices.... los más felices de su vida.

Desde que era pequeño creció con una ideología muy arcaica, su padre era muy estricto por lo tanto toda su vida se basaba en reglas y más reglas acerca de cómo se supone que debía comportarse. Mirando esas flores no puede hacer nada más que recordar su bella sonrisa y el brillo de sus ojos.... ese brillo que tan de repente se apagó .

–Cuando Minkyu y yo nos casemos llevare una corona y un ramo de cerezos

–¿Y se puede saber porque?

–El y yo nos dimos nuestro primer beso debajo de un cerezo, es nuestra flor, es nuestro amor......

Siempre solía hablar de el día que finalmete pudiera estar con el amor de su vida, desafortunadamente no pudo ser. Aún recuerda cómo es que de la noche a la mañana dejo de ver esa sonrisa que siempre iluminaba su día y un día sus ojos se cerraron para siempre.

¿Culpaba a alguien? claro que lo hacía,  culpaba a su padre por ser un maldito, culpaba a su madre por no hacer nada, pero sobretodo todo se culpaba a si mismo por no ser valiente, por no haberlo ayudado hasta el final. Por su culpa estaba muerto.

–¿Estas seguro de esto?

–Nunca en mi vida había estado tan seguro

–Pero....

–No intentes detenerme, sabes que eres lo más importante para mí, pero también merezco ser feliz

–¿No eres feliz conmigo?

–Claro que si, tu siempre me has cuidado. Pero es tiempo que tome mi propio camino, ahora tengo alguien que me ama y yo lo amo también, seremos muy felices......

Lastimosamente la realidad con frecuencia no es como queremos y por más que planeas algo casi siempre la probabilidad de que eso salga totalmente diferente es muy alta.

–¡Eres un maldito bastardo que le hiciste!

–¡Solo diré que ese malnacido tuvo lo que merecía y ahora debe de estar pudriéndose en el infierno!

–¡TE ODIO, TE ODIO!

–¡Odiame lo que quieras pero un maricon jamás será mi hijo, no permitiré que ensucies el nombre de mi familia con tus porquerías, antes te prefiero muerto igual que a ese idiota al que le abriste las piernas!

–Pues te tomaré la palabra, prefiero estar muerto antes que seguir viviendo bajo el mismo techo que un miserable como tú......

Nunca pensó que perdería tan pronto a una de las pocas personas que le importaban realmente. El no merecía ese fin, debió seguir aquí, convertirse en adulto, cumplir sus sueños, amar tanto como solo el sabia hacerlo. Talvez ahora estaba feliz, quería pensar que después de todo el sufrimiento finalmente había encontrado la paz que necesitaba, posiblemente ahora mismo también estuviera con el amor de su vida, los dos muy juntos para toda la eternidad.

Era una historia trágica y no quería el mismo destino para su hijo otra de las personas que más le importaba en la vida, pero como podía evitar un destino tan cruel si no era obedeciendo a la única persona que el creía que tenía la razón.

–¡Ya deja de llorar malditasea, eres un hombre!

–Mi hermano está muerto, como no quieres que llore

–Pues si esta muerto nadie más que tu tiene la culpa

–¿Que?Yo...yo

–Deja de tartamudear, si tu hermano está muerto es porque tu no me dijiste de sus desviaciones, si tu me hubieses dicho a tiempo lo que sucedía yo le habría puesto un correctivo y nada de esto estaría pasando. Si lo piensas bien tu eres el único culpable de su muerte ¡Tu mataste a tu hermano!

–Eso es mentira, yo amaba que mi hermano, tu eres el único culpable

–No hijo mío, yo no oculte algo que pudo corregirse a tiempo. Ahí es donde radica tu gran problema no sabes tomar decisiones, piensas con el corazón y no con la cabeza, pero no te preocupes hijo si sigues mis consejos te aseguro que jamás te volverá a suceder nada como esto......

A raíz de todo lo acontecido comenzó a pensar seriamente que su padre tenía razón, que no sabía tomar decisiones y que era mejor que este decidiera en todos los ámbitos de su vida. Después de todo el decidio que estudiaría, en que tipo de casa viviría, el día de su boda, como se llamarían sus hijos y la manera en la que estos serían educados, había confiado la mayoría de las decisiones de su vida a su padre pero no estaba seguro si podría confiar el futuro de su hijo menor.

Desgraciadamente el no era fuerte, no era capaz de enfrentar a ese hombre, no quería que alguien más muriera; tampoco iba a matar a nadie. Había llegado a un punto en donde no estaba dispuesto a seguir las órdenes de ese hombre, pero no podía simplemente no podía.

Cuando Donghae era pequeño solía leer muchos cuentos de hadas y jugar con las flores, esto último le recordaba a su pequeño hermano, siempre fue muy apegado a su madre y era un niño muy distinto a su hermano, era cariñoso, amable. Probablemente el hecho de que creciera los primeros años de su vida lejos de su abuelo tuvieron que ver en eso, tontamente pensó que al irse de Mopko su padre al fin le dejaría en paz, pero ni siquiera en Seúl dejó de atormentarlo, decidió mudarse a una casa a las afueras de la capital para estar aún más cerca de su hijo y ayudarlo con la crianza de sus nietos.

Desde ese momento el comenzo a meter ideas en su cabeza, recuerda bien que muy a menudo su padre solía comparar a Donghae con Dongwook, le repetía una y otravez que si no lo criaba de la manera correcta el tendría el mismo destino. Nunca quiso pensar en eso pero ahora la vida de su hijo estaba tomando un rumbo muy parecido al de su hermano y no quería el mismo final para el.

Hacia casi 1 semana que volvía del trabajo, pasaba por el centro cuando pudo divisar una figura muy conocida para el, se detuvo un momento a observar confirmando así que era Donghae, de pronto un chico ligeramete mal alto que el, con piel lechosa y pelo negro, al que reconoció rápidamente como el que lo había traído la vez que había llegado tarde a casa, se abalanzó sobre el para abrazarlo y ¿besarlo?, en ese momento las palabras que tanto lo habían atormentado regresaron a su mente.

"Solo míralo es igual que el, tu sabes que no eres apto para tomar este tipo de decisiones, dejamelo a mi. De lo contario no te sorprendas cuando tu hijo trate de irse con el primero al que le abrió las piernas. Probablemente tenga el mismo destino que ese infeliz"

No, no iba a permitirlo, aunque tuviera que encerrar a Donghae de por vida, no permitiría que el muriera....

No tengo idea que acabo de escribir pero se mira mamalon JAJAJA

Nos leemos luego gente hermosa, sigan se quedando en casa ❤