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No sé si la vida de todos los adolecentes sea igual pero de algo estoy seguro, la de ninguno podría ser tan patética y monótona como la mía, sabia que todos los chicos de mi edad e incluso menores se divertían más que yo, mi rutina consistía en levantarme, ir al escuela, volver a casa, hacer tarea, ayudar a mi madre en los deberes, claro sin que mi padre se diera cuenta, cenar y dormir.

Al menos la escuela era un pequeño escape, ahí los pocos amigos que tenía no eran unos idiotas y me gustaban las clases en especial la actividades extracurriculares, siempre ame el baile pero mi padre me obligó a entrar al equipo de fútbol, no es que no me gustara, todos mis amigos estaban en el equipo pero no era lo que amaba, aunque no quería decepcionar a mi padre y por eso lo hacía.

Lo único realmente desesperante eran las tontas chicas que se la pasaban coreando mi nombre en cada entrenamiento, me perseguían a todos lados, y todo el tiempo se sonrojaban cuando estaban a mi lado ¿Que enserio no tenían clases o una vida?, lo sé cualquier chico en mi lugar estaría más que complacido pero yo no soy cualquier chico.

–Deberías hacerle caso al menos a una de ellas, mira que todo el tiempo están detrás de ti, si al menos una de ellas voltea a verme– pero en que demonios pensaba

–Que dices Kyuhyun esas chicas son desesperantes, no me dejan respirar ni un segundo, el único momento de privacidad que tengo es en el baño, gracias al cielo han respetado el que no puedan entrar o estaría perdido

–Vamos hombre no me vas a negar que te gusta que todas esas bellezas te persigan

–Realmente no, y ya deja de parlotear que tengo que llegar temprano a casa-

–Algun día vas a caer Hae y ese día no solo tu ganaras si no lo haremos lo dos, ella me presentará a una amiga, nos enamoraremos, nos casaremos, tendremos 2 hijos, un perro y seremos felices por siempre– dijo pasando su brazo por mis hombros

–Sigue soñando Kyuhyun

De alguna manera se que mi amigo lo decía en broma, pero desgraciadamente esto me recordaba las palabras de otra persona....

"Cuando piensas traer una chica a casa Donghae, ya tienes 17 años eres un hombre, o me vas a decir que la chica eres tu, ten cuidado que eso no sea así yo no crié a un chupa pollas"

Maldito viejo como me gustaría gritarle a la cara que si, me gustan las pollas, que me parece mejor el pecho plano de un chico que los senos de una chica pero no lo hacia solo por mi madre, sabia que si me iba de esa maldita casa estaría bien, pero ella que le haría ese bastardo si en presencia la trataba como un trapo viejo, no ni siquiera quiero imaginarlo.

–daran alcohol y no de el barato como la vez pasada, esta vez será del bueno, Hae...¿Donghae estas escuchandome?

–Ahh..no que decías

–¿Que si iremos a la fiesta?

–¿Que fiesta?

–Vamos Hae no te hagas el tonto, la fiesta de Yoona, sabes que tu eres el primer invitado, esa chica esta loca por ti, lo que nos consigue un acceso VIP a el patio de su mansión, tiene piscina y esta vez darán alcohol del bueno, no las baratijas que bebi la vez pasada, así que si iremos verdad

–¿Es un requisito indispensable que yo asista?

–Vamos amigo si tu no estás no me darán la entrada, además nunca sales a divertirte pareciera que eres un anciano

–Ya sabes que no me dejan salir– ¡Mentiroso! gritaba la voz de mi interior, la verdad no salía porque no quería dejar a mi madre sola

–Por eso no hay problema llévame con tu padre y yo le pediré permiso

• Castillo de Cristal • [EUNHAE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora