𝑴𝒊 𝒐𝒎𝒆𝒈𝒂 [𝐴𝑖𝑏𝑎𝑘𝑢]•𝑂𝑚𝑒𝑔𝑎𝑣𝑒𝑟𝑠𝑒• Pausada

Capítulo Seis.

El festival deportivo termino y Bakugou obtuvo una penosa victoria junto con varios habucheos por no ser delicado con Uraraka, eso no le importaria pero no podian ser más hipócritas, ya que esos mismos que le decian cosas irietes no dijieron nada cuando peleo contra no solo un alfa sino con varios, pero a fin de cuentas Bakugou no le importaba eso.

Pero no pudo ser más feliz cuando Shouta lo defendio. Al terminar la ceremonia quizo ir a agradecer tal acto.

Ahora mismo se encontraba en los pasillos para ir hacia la cabina donde estaba el pelinegro, pero a mitad del camino se encontro con Yamada, este le felicito por el primer puesto, Bakugou se enojo pero tenia que tener un buen comportamiento.

Ya tenia mucho problemas con su temperamento en el festival.

---Sí lo que sea--- Suspiro con frustración ---Esos malditos extras no tenian oportunidad contra mi--- Las risas del heroe profesional se escucharon con eco por todo el pasillo.

---Esta es la actitud Baku-chan--- Yamada sonrio e hizo una pose estupida. Katsuki no pude retener la pequeña sonrisa en sus labios ---¿Qué te parece si te invito la comida?, apuesto a que estas hambriento--- Sonrio el alfa, Bakugou se iba a negar con su tipico tono burlesco, y antes de hacerlo el mayor paso su mano por su cuello iniciando un recorfortante abrazo.

Bakugou lo miro con asombro, lucho un poco para soltarse del agarre, muy poco para ser francos, no sabia por que pero su cuerpo de repente se sentia tan calmado si hace unos momentos estaba hirviendo de furia.

Pronto sintio el calor envolverlo con cariño y unas timidas feromonas en el aire.

---Vamos Katsuki--- Al rubio le importo poco cuando una mano fuerte se paseo por su cintura hasta dejarla un poco más a bajo, guiandolo de nuevo por donde habia venido.

Una puerta al final fue abierta y de esta salio Aizawa, su sangre estaba quemando su cuerpo por la furia, sus ojos estaban impregnados de sangre, solto un gruñido y siguio con la miraba al omega.

¿Acaso era tan fácil remplazarlo con unas cuantas palabras bonitas y una tonta cantidad de feromonas?

---Que estupido---Hablo el pelinegro, su aroma delataba su angustia por el menor, pero que podia hacer, suspiro, tan pesado que lastimo su garganta.

No era sencillo ocultar sus celos involuntarios, se sentia avergonzado y humillado por sus bajos instintos de posesion ante el menor, no lo podia evitar, pero tampoco trataria de mentirce asi mismo tan descaradamente, era obvio que no queria a esos dos rubios juntos.

A la mañana siguente de ese arranque muy justificado de celos, Shouta pudo quitarse las estorbosas vendas, ahora podia mover sus extremidades con más tranquilidad, listo para iniciar el dia abrio la puerta del salón, siendo recibido por unos gritos de emoción por sus alumnos, muy pronto se encontro buscando la cabellera rubia de su omega.

Sonrio con ternura mirando los ojos rubis, Bakugou no estaba prestando atencion a su alrededor, miraba las ventanas, mucho más interesado por eso que por la buena recuperación de su futura pareja.

Aizawa no se queria hacer locas ideas pero Katsuki parecia muy tranquilo y su cuerpo estaba repleto de las feromonas de su molesto amigo, solo pasaron un rato juntos, trato de convencer a su intranquilo alfa.

Pero con el transcurso de la clase Bakugou se notaba distante, distraído, el pelinegro busco una excusa para dejar salir a la clase para estar un momento a solas con el cenizo.

---El festival termino, todos hicieron un buen trabajo pero estoy decepcionado de uno que otro, ustedes mismo sabran la razon, bueno, les dare unas horas para que descansen, pueden salir en silencio--- Los adolescentes festejaron y con risas salieron del aula, como Aizawa lo habia predicho Katsuki seguia sentado.