sengen week ༉‧ 2O19

◡̈ | day O6

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domestic

Un horario completamente distinto.

Ese era el principal problema que tenía aquella inusual pareja, formada por científico y mentalista.

Mejor dicho, sus horarios no eran ni siquiera horarios. Había veces en las que Gen tenía programas, entrevistas u otras cosas que hacer, a veces ocurrían muy temprano y llegaba exhausto hasta el anochecer.

Por otro lado, Senku tenía un horario fijo, aunque claramente no lo seguía mucho. A veces se entretenía tanto en lo que hacía que se quedaba hasta altas horas de la noche, como consecuencia llegaba tarde al día siguiente; y así sucesivamente.

Aunque a simple vista no les afectara la esclavitud del trabajo, en verdad resultaba solitario llegar y no encontrar otra presencia.

─Ah, otra vez ─dejo su abrigo en la entrada, para simplemente recostarse en el sillón y empezar a jugar con su celular. Revisando cualquier tontería que distrajera a su mente de la mala suerte que el creía tener.

Poco a poco se volvió una bolita en aquel sillón, desprendiendo un aura de "querer atención", a pesar de ser el centro de su trabajo y tener las miradas de todos, no venía de la persona que él deseaba.

Su vida lo transforma en un ser más responsable, pero aún tenía la mente de un adolescente.

─Ugh, ¿Por qué se me ha condenado con un destino tan malo? ─profesaba el mentalista con su reconocido drama. No podía evitar pensar que podría hacer para pasar más tiempo con el contrario, no quería verse demasiado empalagoso, pero tampoco quería dejar de ver a Senku cinco noches seguidas como a sido últimamente.

La mejor idea era descansar, ya lo resolvería mañana. Cuando estaba por cerrar sus ojos una suave manta lo cubrió por completo, mientras una suave mano le alborotaba su cabellera.

─Kukuku el destino no existe, simplemente no logramos coincidir ─ la voz tranquila de Senku le hizo abrir los ojos, volteándose inmediatamente. Ahí delante estaba la persona que parecía no haber visto hace tanto tiempo, dándole motivación para continuar con sus excéntricos pensamientos.

─Deja de pensar cosas tan melodramáticas, nos vimos hoy en el desayuno ─como si leyera mentes, el casi albino no evitaba reírse de él y a la vez sacudía unos mechones que tenia en su frente.

Una extraña emoción los recorrió, igual que tener mariposas en el estómago.

─¡Pero solo fueron unos minutos! ─ los típicos pucheros de Gen era algo que el científico estaba bastante acostumbrado, de hecho, extrañaba aquel espectáculo que hacía ─ Además estaba medio adormilado, mis cinco sentidos no disfrutaron de la presencia de Senku-chan

La expresión del nombrado cambio a un seria, acto que el mayor conoce perfectamente. Se acerco un poco al menor, consciente de la timidez o exceso de orgullo que tenía, "Siempre tan tímido".

Tomo del brazo al más joven, haciendo que se recostara junto a él en el sillón.

Decidieron simplemente charlar, preguntándose como les había ido en el trabajo. Asagiri Gen apoyaba su barbilla en el hombro del contrario mientras se quejaba como los de su alrededor eran tan superficiales, algunas veces llegándolo a aburrir por completo.

Ishigami Senku sabia cuando su actual pareja exageraba las cosas que le ocurrían solo para que él lo reconfortara, así que le daba uno que otro mimo tanto como su orgullo se lo permitía.

Por su lado, él no tenía nada de que quejarse. La razón de su excesivo trabajo era solo porque él quería y perdía la noción del tiempo, dejando de lado el hecho de que su cuerpo necesitaba dormir. De hecho, recientemente su jefe le había prohibido la entrada al trabajo fuera de su horario, lo cual le resultó un tanto molesto.

Principal razón por la que hoy había llegado temprano.

─Gwah, mínimo ya podemos descansar ─ y después de decir esas palabras el de cabellos oscuros cerro sus parpados, acostándose encima del menor y quedándose completamente dormido.

El que vestía una bata no iba a creerle al otro, ¿Cómo iba a quedarse inmediatamente dormido?

Estiro sus brazos hacia la cara del otro, dándole uno que otro pellizco en las mejillas para ver algún signo de movimiento. No iba a tragarse el hecho de dormir en aquel incómodo sillón.

─Vamos mentalista, muévete ─ sin muchas ganas empujaba el cuerpo del otro, intentando dejarlo de lado para poder levantarse e irse a la habitación a dormir ─ Gen despierta. . .

Susurros con un tono adormilado salían de la boca de Gen, negándole el paso y estrechando aún más el abrazo que antes habían formado. Se notaba el cansancio en ambas partes, y la idea de dormir re-acaramelados no le molestaba del todo.

Dio un ultimo suspiro, rendido ante la situación en la que se encontraba. Se acurruco un poco mas para que antes de cerrar los ojos un "Good night" saliera de la voz del contrario.

Dejándose llevar por la cálida noche en la que se encontraban.

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Al igual que a todos, los rayos del sol lo atacaron directamente a los ojos, causando que se despertara de aquel relajado sueño que hace tanto no tenía.

Senku froto sus ojos antes de abrirlos completamente, a su lado ya no se encontraba la presencia del mayor, confundiéndolo por un momento.

Tomo asiento en el sillón, fijo su vista en el suelo y justo cuando logro enfocar la imagen que veía entendió todo; el cuerpo dormido de Gen se encontraba tirado en el suelo, jalando como podía una esquina de la sabana.

Supuso que una pelea se llevo a cabo anoche, el vencedor se llevaría la comodidad de ocupar todo el espacio y era obvio quien fue el perdedor.

Dio un suave golpe a Gen, dándole a entender que se levantara.

─Ya es de día mentalista ─ le quito la sabana, caminando directo a la habitación dispuesto a descansar todo el día de hoy.

Removiendo en su lugar, el nombrado sintió la ausencia del otro y como por arte de magia el sueño se le fue por completo.

─Ah, Senku-chan no me dejes ~ ─y así, Gen se levantó rápidamente

Ambos se adentraron en la habitación, decididos a disfrutar del tiempo del otro.

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