Dagger| ❝Sin importar lo rápido que me mueva, el tiempo seguirá pasando. Nunca se detiene. Nunca lo hará. Pero cuando estoy contigo, Cassie. Cuando estoy contigo... parece detenerse❞
[Prohibida la copia parcial o completa de esta historia]
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「❛ 𝑐𝑎𝑝𝑖𝑡𝑢𝑙𝑜 𝑑𝑖𝑒𝑐𝑖𝑜𝑐𝘩𝑜 ❜」'
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En cuanto puso un pie nuevamente en su tierra ni siquiera se detuvo a golpear a los responsables de su aventura pues en su cabeza sólo había una cosa presente y un claro objetivo. Ella quería ver a Barry.
Sabía bien que el horario de visita no estaba habilitado pues era plena madrugada, pero eso jamás sería un impedimento para Cassie. De ser necesario estaba dispuesta a fingir ser un hombre y cometer el peor delito de la historia con tal de estar junto al hombre que amaba.
Así que no dudo.
Conocía Iron Heights como la palma de su mano. Cada pasillo, cada celda, incluso la identidad de cada uno se los presos y memorizando uno que otro crimen después de haber investigado exhaustivamente desde el momento en el que Barry había sido tomado detenido. Cassie jamás dejaba ninguno de sus movimientos al alzar, y esta vez no fue la excepción.
Su cuerpo estaba débil, el nivel de energía que había ocupado durante los últimos meses era mucho mayor a los que había ocupado durante toda su vida y cada centímetro que dolía se lo recordaba a gritos, pero no le importó mucho en realidad.
Cerró sus ojos y supo que las cámaras de seguridad quedaron desactivadas. No era tan idiota como para dejar a la prisión con los peores criminales de la ciudad sin energía, solo necesitaba un punto de ventaja, y lo consiguió. Saber que apagar y que no era lógica básica.
Al menos para ella.
—¿Alguna vez te he dicho lo sexy que luces con barba?
—¿Cassie? —Dio un saltó para quedar de pie y retrocedió al verla frente a él—. Espera... ¿Cómo se que realmente eres tú?
—¿Qué acaso ya olvidaste a tu esposa? Hiciste que me sintiera dolida, Allen.
