Mire con atención la pizarra, tengo un intelecto que se puede considerar bastante alto, el simple hecho de que estuviese a punto de terminar una etapa de mi vida me enorgullece a infinitas cantidades, me hace sentir una mujer optimista y valiente. Me gusta lo clásico: explorar, adquirir conocimiento y sobre todo leer (en realidad pienso que no puedo vivir sin leer).
- Alella- Mi mejor amigo Aarón interrumpe mis rutinarios y clásicos pensamientos, y, para ser sincera en ello, me mantenía. - Vamos ya termino la clase y debo recoger a Nel. - Solo me limite a asentir, hoy los acompañaría a darle un vistazo a la manada, algo que realmente adoraba, es satisfactorio ver a todas las personas felices y tranquilas, supongo que ello se debe a la posición de la manada y al trabajo de nuestro líder.
Caminábamos por los pasillos de la academia hacia la salida y allí se encontraba aquella despampanante chica de ojos azul marino, cabe aclarar que son casi iguales a los de él. Hace algún tiempo que no lo veo, ni sé nada aparte de que está haciendo su trabajo, quizás unos siete u ocho meses, supongo que es porque tiene que viajar mucho para tener todo en calma.
Hoy las personas del pueblo se encuentran muy ansiosas, pues llega nuestro Alpha y los murmullos no se harían esperar, al parecer el "aún no ha encontrado su pareja" tiene a las recién transformadas con esperanza de ser Luna, aunque siento curiosidad sobre ello no me preocupa en lo absoluto, de hecho la manada está bien así; sin su Luna, sin embargo, muy en el fondo siento celos al pensar que otra mujer este a su lado y las emociones (además de los sueños extraños con él) que siento en algunas ocasiones sin razón alguna no ayuda en nada al tema, es como un pequeño pinchazo a mi corazón.
Nel nos recibió con su hermosa y cálida sonrisa, aquella que me transmite paz y confianza, comenzamos a pasearnos por la manada, ya que Aarón es el segundo al mando, por lo tanto debía estar pendiente que todo estuviera en completo orden.
-¿En qué tanto piensas, Ale? No me digas que es otra vez en el tonto de mi hermano. - Ella lo dice con tanta tranquilidad que no puedo evitar sonrojarme. Solo se burla de mi reacción y ni se diga de Aarón. Son mis mejores amigos, así que solo me queda fulminarlos con la mirada. - Esta bien, esta bien, me callo, pero en serio mi hermano es un tonto, mírate eres una de las mejores personas que pueden existir, no crees qué; ¿podrías ser la Luna de la manada?
-Lo dudo mucho. -Fue la única respuesta que pude articular, puesto que muy en el fondo no descarto la idea, además hace seis meses obtuve mi transformación y aún no he encontrado mi Mate.
- Obstinada. - Susurraron.- Por si no lo sabían, mi audición licántropa está totalmente desarrollada y los escuche perfectamente. - Respondí levantando una ceja.
-Sí, si, ya entendimos. -Dijo Nel - Mira quien viene ahí - Señala cuatro autos. - Es mi hermano.
La mayoría de la manada se reunió para darle la bienvenida a nuestro Alpha, me fui acercando con Nel y Aarón a su llegada. Sentí aquel olor que sé muy bien a quién pertenece: mi Mate. Inhale y exhale profundo, no quiero equivocarme, mientras más me acerco al encuentro, más se intensifica el olor, es simplemente aditivo. Esto es maravillosamente inexplicable, lo veo directamente a los ojos y puedo sentirlo.
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Luna Lell. [Terminada]
LobisomemEl Rey Alpha Erick siempre ha buscado a su alma gemela, su mate, aquella que lo acompañara por el resto de su vida. Ha viajado a muchos lugares en busca de la misma, sin saber que estuvo siempre en su hogar. Ahora que la tiene a su lado, ha prometid...