One-shot (Haikyuu X Rayis)

🦉🃏 Bokuto Kōtarō 🃏🦉

Te paraste frente a aquellos puerta y tomaste aire, la abriste y la luz de la habitación hizo que cerraras los ojos por unos momentos.
Al abrirlos te encontraste con un desconocido.

-¿Quién es usted, donde está Muzume?- preguntaste mirando a aquella persona.

- Oh, tu debes de ser (t/n) Kakuzu- el hombre se levantó para saludarte- mi nombre es Bokuto Kōtarō y soy tu nuevo psicólogo- acercó su mano para saludarte pero tú pasaste dentro de la habitación ignorandola.

- Tu o Muzume ¿Que importa? Después de todo son las mismas frases de mierda...- te sentaste en en sofá y el mayor hizo lo mismo.

- Bueno...-viste como ojeaba unos papeles- Aquí pone que no has hecho muchos progresos py que eres algo difícil- te oyó chistar la lengua pero decidió ignorarlo.

Tu mirabas por la ventana viendo a los pájaros pasar por delante volando ente las nubes.

- En fin, cuéntame ¿Que tal esta semana, como te sientes?- volviste la mirada y lo examinaste.

-¿No eres muy joven para ser psicólogo?- este te miro sorprendido.

- Las preguntas las hago yo y si, soy joven, tengo 20 años- sonrió- pero volviendo a la pregunta...

- Es lo mismo de siempre....no tengo ganas de levantarme, por mucha hambre que tenga el meterme cualquier cosa en la boca me produce arcadas, siento un vacío en el pecho y no dejo de llenarme la cabeza de preguntas estúpidas...

-¿Que tipo de preguntas?

- ¿De qué sirve vivir? Si voy a estar siempre sola y no voy a poder disfrutar de las cosas entonces....¿Que sentido tiene? ¿De verdad vale la pena esperar a que algo bueno me suceda?- tenías la mirada baja.

- ¿Alguna tendencia suicida?- te miro serio.

- Pfff....todo el tiempo, lo único que me quita las ganas de llorar es el dolor- le enseñaste tus muñecas- y me estoy quedando sin espacio.

Bokuto miro horrorizado todas aquellas cicatrices, estás llegaban hasta casi el hombro y eran demasiado profundas.
Le contaron que estaba en estado grave pero esto casi lo superaba.

- Ya veo...bueno ¿Que te gusta hacer?

-Que importa, lo que me gustaba antes ahora solo me resulta aburrido o innecesario.

"Esto es demasiado difícil"

- Musume se ha ido porque no lo soportaba ¿Verdad?- Bokuto te miro confundido- debe de dar pena el ver a alguien joven con este tipo de pensamientos y cicatrices....supongo que lo entiendo, yo también me repugnaria al ver esto- bajaste tus magas- si vengo aquí es porque me están obligando...

- Muzume no se fue por esa razón, a él le han trasladado...eso es todo- dijo en busca de que poder decir.

- Ya....no hace falta que mienta, acabemos con esta hora insufrible para ambos y volvamos a nuestras vidas- lo miraste a los ojos y este noto tus grandes ojeras a pesar de todo el tiempo que dormías.

- ¿Tomas las pastillas?

- No.

- ¿Por qué no? Son buenas para ti.

- Ya...ya no me hacen efecto...los antidepresivos ya no me hacen nada...- Bokuto comenzaba a quedarse sin ideas.

- Dios...- susurro.

- Dios...eso digo yo- bufaste- se que no tengo salvación, moriré de pena o de cansancio si no es que me suicidó antes, asi que, no se sobresfuerze pensando en una solución.....simplemente no la tiene- te levantarte y te acercaste a la ventana- mo todos estamos hechos para vivir en este mundo...

Bokuto también se levantó.

- Si tan solo fuera un pájaro....miralos, vuelan libres, lejos...

-¿Te gustaría ser como ellos?- se acercó.

Tu te quedaste callada viendo a aquellas aves surcar los cielos.

-¿Sabes? A veces me siento culpable de tener depresión...

-¿Y a que se debe?- pregunto Bokuto rezando por hacer un progreso.

- Yo tengo familia, comida en la mesa y todo lo necesario para una buena vida, pero aún así....me siento como una desgraciada, hago sufrir a mis padres...y pienso que sí me fuera todo iría mejor pero se que no es verdad porque mi madre se pondría triste...- lo miraste- lo único que hago es molestar y no puedo dejar de hacerlo porque causaría algo peor...tan solo quiero dejar de sentirme así....

- Bueno, para eso estoy yo aquí, para ayudarte- te diste la vuelta y le volviste a mirar a los ojos- no me puedo ir hasta que te sientas viva y feliz.

- ¿Lo premete?- no sabías porque pero sus palabras te ilusionaron.

- Lo prometo, no me iré hasta conseguirlo- tu asentiste y volviste a sentarte al sofá.

- Hoy en clase de matemáticas mi profesora me ha dicho que he mejorado un poco- Bokuto sonrió casi con una lágrima.

- No me digas, eso es genial- se sentó frente a ti- cuéntame más.

Las semanas pasaron y con ella las consultas en las que cada vez hablabas más o incluso se te escapaba alguna sonrisa, la primera vez que reiste Bokuto se echó a llorar de la emoción.
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Ya habían pasado 14 meses y estabais en vuestra última hora.

-¿Como te sientes?- te pregunto sentandose a tu lado.

- Feliz....de verdad, feliz y con ganas de vivir- sonreiste un poco- no se como lo has hecho, pero gracias... de verdad.

- Ese es mi trabajo, aunque te echaré de menos- río.

- Ya....bueno, ha sido un placer Bokuto- le tendiste tu mano y este la agarró sonriente.

- No quiero volver a verte en esta habitación, (t/n)- asentiste y saliste de allí.

Suspiraste y caminaste hacia la salida.

-¡Oye!- oíste la voz de Bokuto a tu espalda, te diste la vuelta y este corrió hacia ti- ¿Te apetece tomar un café algún día?

Reíste al ver sus mejillas sonrojadas y asentiste.

- Me encantaría- ambos sonreísteis.

- Tienes un sonrisa preciosa- te toco la mejilla.

- Gracias a ti puedo enseñarla- pusiste tú mano encima de la suya.

-Es mi mayor logro....bueno, nos vemos- dijo volviendo a ponerse nervioso.

- Si...ya nos vemos- dijiste del mismo modo.

Esta vez sí saliste de lugar y  sonreiste de vuelta a casa.