⏭CAPITULO 1⏮

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Maldito despertador, sono justo en el momento en que besaria a ese chico. Pero no! Ahora resulta que hasta una alarma no quiere verme feliz.
Como pude estire mi brazo para poder detener el sonido del despertador y justo cuando lo hice las voces de mis dos amigas se hicieron presentes....
Genial, ahora sólo falta que aparezca Barney el dinosaurio.
-Parce levantesé-me dijo Catalina, creo que por la primera palabra que expresó se dieron cuenta que es Colombiana
-¿Qué tienen contra mi?-pregunté tapando mi cabeza con la almohada como si esa fuera mi salvacion a todos mis problemas
-¿Nosotras? Nada, sólo vinimos a avisarte que el agua caliente se fue, sólo queda agua fría para bañarse-me comunico mi segunda amiga Magali con una sonrisa tan inocente
-Lo que me faltaba-hundí mi cabeza en la almohada, pero sentí que me jalaron los pies, eran las chicas
-Ya levantase que se la hace tarde para ir a trabajar-me recordo Catalina
Me sente en la cama para después tallar mis ojos con frustación.
-Más les vale que mi desayuno ya este listo cuando termine de alistarme por que si no, ustedes serán las que pagaran por ello-les advertí
-¿Sabes? Ahora nos acordamos que dejamos los frijoles hirviendo y no que queremos que se quemen-las dos salieron de mi habitación como alma que lleva el diablo.
Hace más de 4 años que nos mudamos a Londres, originalmente solo yo viajaría pero convencer a mis amigas que no me acompañaran es como convencer a un daltonico que si ve a colores.

***
Termine de arreglarme, bañarme con agua fría me ayudó a despertar mejor, pero también hizo que la piel se me pusiera de gallina.
Trabajo en una empresa en la cuál todos los años me asignan un nuevo jefe, últimamente son mánagers a los cuales tengo que darles mi hermoso servicio.
-Que cara-me hablo Magali
-Es la única que tengo, no la puedo cambiar aunque quiera-solo escuche las risas de ambas
Pude ver que si hicieron el desayuno, eran arepas como les dice Catalina, les di una mirada a las dos para después sonreirles.
-Esto se ve delicioso-comente señalando la comida
-No solo se ve, sabe delicioso-comentó Magali sentandose en una de las sillas
-¿Crees que te asignaran otra vez al coordinador de uno de los equipos de fútbol?-me pregunto Catalina dandole una mordida a su comida o bueno a su arepa
-Espero que no! La última vez que eso sucedió termine odiando el fútbol-tan solo recordarlo me causo escalofrio
-Imaginate que seas la asistente de un mánager de algún famoso, sería cool-tanto Magali como yo compartimos la misma nacionalidad: Mexicana y en ocasiones nos toca explicarle a Catalina lo que significa cada palabra que decimos
-Si lo sería, pero también sería agotador-comente bebiendo el zumo de naranja que tenía
-Me imagino...Pero bueno, hoy también nos toca trabajar en el bar-comento Catalina con una mueca
-Es verdad, se me había olvidado
-expreso Magali, ambas trabajan en el mismo bar, pues a pesar que vivimos aquí desde hace 4 años, no conocen muy bien el lugar
Pero perdiendose se aprende ¿no?

No somos diferentes || Tom HollandDonde viven las historias. Descúbrelo ahora