⏭CAPITULO 17⏮

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Nuevo día, hoy no quería ir a trabajar ¿por qué? Por que al parecer el haber tomado café, me afectó, me duele el estómago como los mil demonios, pero igual tengo que asistir, quedaron algunas carpetas sin revisar y quiero terminar eso. Catalina amanecio de lo más feliz, sabía muy bien la razón ¿quién no estaría feliz después de recibir un beso en la mejilla por parte de Robert Downey Jr?.
Tenía un chingo de cuadernos en mis manos que ni me fijaba con quien iba chocando o a quien iba saludando en los Studios. Hasta que choque con alguien pero los cuadernos no cayeron al suelo.
—Debería de tener más cuidado damisela sorprendida—levanté la vista para encontrarme con Tom, sople un mechón de pelo pero siguió en la misma posición, la mano de Holland pasó a mi cabello para pasar el mechón atrás de mi oreja
—Gracias—agradecí por dos cosas: 1, por agarrar los libros. 2, por quitar mi mechón de pelo de mi cara
—No tienes nada que agradecer, me doy cuenta que llegaste un poco tarde ¿por que?.
—Por nada sólo...sólo no pude dormir muy bien—mentí con una sonrisa
—¿Estas segura?—pregunto levantando una ceja
—Sí! Estoy segura
POR DIOS BLAKE!!! Claro que no estás segura, estas mala del estómago ¡TE PUEDES MORIR! ¡SI SERAS DE PENDEJA!.

***
Mi estómago cada vez me estaba doliendo más, ni las chicas, ni Tom, ni Anthony saben que me duele, no quiero generar un problema mucho más con las chicas que siempre se alteran cuando me enfermo.
—Voy a salir...quiero descansar mis nalgas—le avise a Anthony, salí de la oficina mucho antes que el me diera una respuesta
Sentía ya el vómito, pero no quería vomitar, conozco un baño sí, pero no quiero, mi cabeza estaba recostada en la pared y mis ojos estaban cerrados, hasta que escuché otra vez su voz.
—¿Estas bien?—pregunto Tom, abrí mis ojos para encontrarme con los de el
—Sí lo estoy, sólo necesitaba tomar ai...—mis palabras fueron interrumpidas por la basca que estaba sintiendo
—Blake..¿segura que estas bien?
—Sólo negué con la cabeza mientras corría en dirección a los baños
Entre a uno y sin pensarlo lo solté todo. El café dejo de ser mi bebida favorita a partir de hoy.
Sentí la mano de alguien en mi cintura, y otra mano apartando mi cabello, era Tom por lo que pude distinguir.
Al terminar de soltar todo, eché agua en el año, me lave la boca y las manos para después suspirar mientras me veía en el espejo.
—¿Por qué no me dijiste que te sentías mal?—pregunto Tom
—No quería preocuparte, bastantes cargos te he hecho pasar por mi culpa y no quiero que te sigas molestando—hable mirando los lavamanos
—¿Y quién te dice que me molesta? Me encanta ayudarte y hablar contigo—hablo
—Te puedo traer problemas.
—¿Y hasta el momento los has traído? Claro que no, aquí todos te quieren, incluyendome
—¿Te han dicho que eres muy tierno Holland?
—Eh...Si, pero se escucha mejor cuando lo dices tú

No somos diferentes || Tom HollandDonde viven las historias. Descúbrelo ahora