Capitulo 2.

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Me vesti con unos jeans negros ajustados, una remera del logo de Rolling Stones y mis borcegos negras. Me deje mi cabello risado castaño con californianas suelto. Me lena de leon. Me maquille, rimel, labial, delineador y boom.

Lista.

Some, tarde menos en arreglarme, tan solo quince minutos, un nuevo record.

- Oye, ¿enserio usaras esos jeans? - me pregunto James.

- Si ¿porque? - le pregunte.

- Porque se te marca demasiado el trasero - dijo el mirandome con cara de horror.

- ¿Cual es el problema? - dije sonriendo - solo son unos jeans - dije.

- Bien, vamonos, trasero de Nicki Minaj - se burlo James.

- Callate chabelo! - le dije.

- ¿Chabelo? - me pregunto.

- Si, ya sabes eres infinito, no maduras y sigues igual, no te haces viejo - dije y me miro raro - que no cambias infantil - le explique sonriendo.

El solto una carcajada.

Bajamos las escaleras entre empujones, risas y comentarios estupidos sin sentido.

Mire a Noah sentado en el sofa con una cortada en la frente, tenia un poco de sangre. Ups.

El me miro y sonrio.

- Wow. Q ue hermosa te ves hoy Catherine - dijo el y me guiño el ojo - Nah mentira, siempre te ves igual, chica ruda - añadio.

El pelirrojo caucasico de ojos cafes me sonrio.

- Chica ruda, claro, y lo siento yo arroje el despertador por la ventana - dije.

- No hay problema, nisiquiera me dolio - dijo el.

- ¿A no? - dijo James burlon - debi de estar imaginando todos los quejidos del Ed Sheeran que no sabe cantar que esta en el sofa - dijo James. Yo rei.

- El imitador de Ed Sheeran - dije riendo.

- Un maldito pecoso sin talento - dijo James.

Reimos mas fuerte.

Noah nos saco la lengua.

- Papa se fue a trabajr, asi que vamonos - dijo James.

Yo asenti y salimos de la casa.

James subio al auto de Noah y bajo la ventanilla.

- Aun no puedo creer que tu tengas una motocicleta genial y yo no tenga ni un auto - se quejo James.

Yo rei, siempre decia lo mismo.

- Me la regalo papa en mi cumpleaños tonto y papa no confia en ti por eso no te da un auto, dice que lo estrellaras - dije riendo.

- Pero no es justo, soy mayor que tu - dijo el.

- Solo por dos minutos idiota, recuerda que somos mellizos - dije.

- Dos minutos son dos minutos, mi pequeña melliza - dijo el.

- Tonto - dije.

- Presente - dijo el.  Yo rei.

- Catherine ¿carreras hasta la escuela? - pregunto Noah.

- Claro, el que pierda le compra el almuerzo al otro por un mes - dije.

- Trato hecho - dijo Noah y me guiño el ojo.

Yo subi a mi motocicleta  negra y la arranque, me coloque a lado del auto de Noah, me puse en casco y sonrei.

Nunca te abandonare.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora