Manada ¦ Soojun

3 🐰 Tradición.

La alarma resonó por toda la habitación y eso hizo despertar al omega ajetreado y un poco asustado. Se recargo contra el respaldar y tomó su celular de la mesa de dormir mirando la hora. Era aún temprano, pero los conejos, al parecer no dormían sus horas completas en la noche. Frunció su ceño, ayer sus padres se habían ido y había tenido una pequeña pelea con ellos antes, pero no pudo evitar quedarse en aquella casa. Y ahora estaba ahí, haciendo de las reglas de aquellos leporidos.

Quito La sabana de su cuerpo y tomó sus pantuflas con sus pies así levantándose de su cama. Aquel lugar era demasiado caliente y eso lo hacía sudar en demasía. El sol pasaba por ahí y se asomaba por la ventana. Un lugar lleno de flores, un campo de zanahorias visible.

Fue hacia su maleta y empezó a rebuscar topa y una toalla para así ducharse y ponerse algo cómodo. Él vivía en el hemisferio norte, en un bosque caducifolio. Así que el calor ahí no existía, es por eso que se mantenía aún más joven de lo que es.

Suspiro y se aproximó al baño ya llevando las cosas que necesitaría. Abrió la regadera de la tina y cuando la tuvo llena se metió en esta respirando hondo y disfrutando del frío de esta. Cerro sus ojos y trató de relajarse sin darse cuenta que alguien había entrado a su cuarto para dirigirse al baño. Alguien pasó su mano por su mejilla y barbilla y eso le hizo abrir sus ojos sorprendidos y chapotear dentro del agua –¿Q-quién...? –Preguntó confundido.

Ahí vio a ese conejo con una sonrisa tan molesta que le causaba repulsión –¿Qué haces aquí? –Preguntó sin ningún tipo de amabilidad, haciendo que sus ojos demostrarán enojo e ira.

–¿Qué no puedo ver a mi futuro omega? –Contestó– Vine aquí para avisarte que tendremos una junta esta tarde. Iremos con los abuelos, es una tradición tener autorización de ellos antes de casarnos.

YeonJun Río y el alfa frunció su ceño –Ni creas que seguiré tus mierdas de-

–Lo harás y no reprocharas, pequeño zorro – Habló fuerte y claro utilizando de nuevo su voz de mando que hacía que el omega de zorro bajara sus orejitas.

YeonJun solo miró el agua sin prestarle atención y sólo mostrando su blanquecino cuello. Soobin pasó sus manos por este acariciando de arriba hacia abajo y haciendo que el cuerpo de YeonJun se sintiera acalorado al instante.

El omega gimió y tapó su boca al momento quitando con su mano disponible al alfa de aquella zona –No me toques –Dijo entre dientes.

Soobin solamente negó y se rio saliendo de ahí.

Cuando salió del baño con una toalla sobre su cintura se encontró con una ropa la cual el no había puesto ahí. Se trataba de un traje rosa, una boina, un pantalón ajustado y un suéter del mismo color que le quedaría por debajo de su cintura. Refunfuño enojado, ¿Hasta le harían vestir como ellos quisieran?.

No obstante y para evitar problemas se puso la ropa. Se sintió acalorado aún. No se sentía bien, menos estando en aquel tipo de clima.

Ya pronto arruinaría aquella junta.

Los padres de Soobin se aproximaron al auto y Soobin y YeonJun se mantenían en el asiento de atrás. El camino se hizo muy tortuoso, nadie hablaba, solamente la madre de Soobin se mantenía dormida contra el respaldar y el padre de este mismo miraba hacia enfrente con una sonrisa.

Soobin, Soobin pensaba que tenía el permiso de tocarle. Pues no dejaba de pasar su mano por su pierna y toquetearla a su gusto. El omega estaba por quitar su mano hasta que de pronto el lo hizo y ya estaban frente a la casa de los abuelos.

Salieron del auto y los señores aquellos estaban frente a la gran puerta esperándolos. Soltaron un quejido sorprendidos al ver a YeonJun.

Una parte de él estaba riendo. Si se trataba de abuelos tradicionales no permitirían el casamiento.