Doble Vida [TodoBaku], ¡Completado!

.05.

¡Descubierto!

Katsuki había descubierto que era Monsieur Enmascarado. La adrenalina se disparó dentro del cuerpo de Shoto. ¿Qué iba a decirle?, ¿Cómo podría justificar semejante engaño?, ¿Por qué lo había hecho?. Él jamás hacía cosas como ésa; la desesperación lo había llevado a hacerlo y ahora iba a su perdición.

Lo observaba atentamente mientras él intentaba reunir el valor necesario para confesar.

Katsuki levantó una mano para llevarla hasta el mentón de manera pensativa. Qué mano tan delicada, qué piel tan perfecta. Las facciones de su rostro parecían casi frágiles. Deseaba con todas sus fuerzas que esa mano lo acariciara, aunque era más probable que lo siguiente que hiciera con ella fuera darle un golpe por haberle mentido.

-Katsuki, puedo explicártelo.

Estaba tomando aire para prepararse cuando fue él quién continuó hablando:

-Me he dado cuenta de por qué decidiste mandarme al club en lugar de llamar tú a tu amigo y pedirle que viniera a la fiesta.

-¿Sí? -Shoto, frunció el ceño.

Katsuki sonrió tímidamente.

-Claro que sí.

No parecía enfadado y eso hizo que Shoto se sintiera aliviado.

-Tratabas de buscarme pareja -dijo él.

-¿Cómo?.

-Es muy amable de tu parte.

-¿Por qué soy amable? -no comprendía nada. ¿De qué estaba hablando?.

-Es lo que me agrada de ti, Shoto. Eres amable e increíblemente considerado. Siempre piensas en los demás.

Amable y considerado, de eso nada. Se había comportado de un modo malicioso y taimado, y no se enorgullecía de ello.

-Es amable de tu parte cuidar de mi vida amorosa.

-¿Tú vida amorosa?-ahora sí que estaba completamente perdido.

-Sí -dijo él- Es todo un detalle que me hayas mandado a que conociera un tipo tan impresionante como tu amigo el Enmascarado. ¿Cómo sabías que lo que más necesito en este momento es una aventura? -su sonrisa aumentó- ¿Te lo dijo Emiko?

"¿Qué?"

Shoto lo miro boquiabierto. Observó su rostro y se fijó en lo largas que tenía las pestañas.

Tenía la respiración algo acelerada y los ojos brillantes. Estaba precioso. Cautivador. Y todo por un hombre que no era nada más que producto de su imaginación.

-No me digas que se te ocurrió a ti solo que podría haber química entre tu amigo y yo -se echó a reír de un modo que lo hizo estremecer- Vamos, Emiko ha tenido que contarte algo.

-No entiendo nada.

-Tú amigo y yo...bueno, digamos que la química ha sido increíble -dijo sonrojándose con fuerza.

-¿Crees que yo pretendía emparejarlos?.

¿Realmente tenía la menor idea de lo que sentía por él?

-¿No es así? -parpadeó con sorpresa y luego frunció levemente el ceño.

-¡Por supuesto que no! -golpeó la mesa con el puño.

Katsuki lo miro, asombrado, como si hubiera visto un fantasma.

-¿No?

-Por el amor de Dios, Bakugo-gruño Shoto con una frustración que le nublaba la mente y  le impedía pararse a pensar lo que iba a decir. Las palabras salieron de su boca de golpe- ¿Por qué iba a presentarte a otro si te quiero para mí?