Epílogo

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– Mamá, necesitamos tu ayuda

– Dime cariño

– ¿Cuál crees que debería ponerme? ¿El vestido o la falda con esta blusa?

Peyton me muestra dos opciones, esta tarde tiene una cita con su casi novio; conocemos a Jadeen desde que su familia se mudó aquí hace ya quince años, los Dawson son cercanos a nosotros, aun así Klaus sigue renuente a dejar que nuestra hija tenga de interés amoroso a Jadeen o más bien que tenga intenciones de salir con cualquier chico, siempre busca cualquier pretexto para evitar que vaya a citas a pesar de la edad de Peyton

– ¿Por qué no mejor eliges algún pantalón?

– ¿Pantalón? – Cassie mira a su hermana mayor – mami Pey se debe ver hermosa porque de seguro hoy Jadeen se le declarara

– Se verá hermosísima usando pantalón

– Pero mamá...

– Cariño logre que tu padre accediera a dejarte salir con Jadeen sin que vaya alguno de tus hermanos con ustedes y haré que se quede en casa sin seguirlos – tomo su mano – también logre que te diera permiso de llegar pasada la media noche por favor pon de tu parte

– Tienes razón – Peyton mira hacia su hermana – entonces elegiremos otra cosa

– Ya que

– Cassie, cariño no molestemos a tu padre, ya sabes que aun continua sensible por lo de tu universidad

– Lo sé mamá, pero papá debe de entender que quiero estudiar en Stanford y para ello debo irme

– Aun tenemos un año para hacerlo entrar en razón así que nada de meterse en problemas porque de lo contrario se pondrá más renuente

– Afortunadamente te tenemos a ti – Peyton me abraza – papá siempre sede ante tus palabras

Sonriendo ante esas palabras abandono la habitación de mi hija mayor; han transcurrido ya veintidós años desde que fui a Nueva York, veinte años de que empecé mi noviazgo con Klaus y diecinueve años desde que nos casamos; éramos una familia medianamente grande, Peyton nuestra hija mayor de ya veinticinco años, seguida de Marco de diecinueve, Cassie de diecisiete y finalmente Lucas de quince; no hay día en el que me despierte dando gracias por tener esta vida, por haber formado esta familia

– Mamá ¿Qué es esto? ¿Podemos abrirlas?

Marcos llega hasta mí con una caja que está cerrada y tiene mi nombre, detrás de él aparece Lucas cargando una caja un poco más pequeña; por mi mente pasan varias cosas que tenemos en el garaje pero no puedo ubicar que tendrán esas cajas, los tres vamos hacia la sala

– Lucas trae unas tijeras por favor

Mi hijo más pequeño desaparece en la cocina y en segundos reaparece junto a lo que le pedí, sin esperar más me dispongo a abrir las cajas, dentro de estas aparecen álbumes de fotos, al abrirla me encuentro con las ecografías de mis hijos, fotos de ellos cuando eran bebés, son fotos de la familia en general

– Mamá ¿Qué es esto?

– Oh – le sonrió a Marco – es la primera ropa que le pusimos a tu hermana Cassie cuando nació

– ¿Qué son esos papeles?

– No lo sé, a ver dámelos – meto las fotografía a la caja para tomar los documentos – son las citas que me daban para revisar mis embarazos

– ¿Por qué papá guardo esto?

– Porque es importante – le contesto a Lucas – son recuerdos muy valiosos, lo entenderán cuando tengan sus hijos – les sonrío a ambos – ahora sigan limpiando el garaje o su padre se molestara cuando llegue

– Mamá siempre has sido muy bella

Lucas sostiene una fotografía de mi rostro la cual tomaron en la boda de Dylan; creí perdida esa foto pero veo que mi esposo la guardo muy bien; Marco continua sacando los objetos de las cajas mostrando varias cosas que creí haber perdido hace muchos años

– Solo sigan con la limpieza

Pasadas unas horas escucho un auto, sé perfectamente que se trata de mi esposo; lo escucho hablar con los chicos los cuales aún continúan con su castigo, el cual ganaron al obtener una multa de tránsito y ocultarlo; minutos más tarde lo veo entrar a la sala, su sonrisa es contagiosa, lo observo con detenimiento mientras se quita el saco y la corbata, la vida junto a Klaus ha sido estupenda

– En que tanto piensa mi esposa que esta distraída

– En ti y – me levanto yendo hacia él – en lo afortunada que soy al tener esta familia

– Yo soy el afortunado, al tenerte como mi mujer y que me dieras esos hermosos hijos

Lo único que puedo hacer ente sus palabras es abrazarlo, los años han curado en su totalidad las heridas que me hizo Colton, todas ellas fueron sanadas gracias a mi familia y al hombre que tenía en los brazos, ahora solo me queda ver crecer a mis hijos y disfrutar el futuro con mi familia 

Obsesión Peligrosa. [COMPLETA ✔]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora