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Intentos fallidos es lo que estaba haciendo el chico de ojos avellana, llorando día y noche sin consuelo pues buscaba un lugar solo para liberarse..el problema es que el no era libre, era presa de sus sentimientos negativos, preguntas con respuestas vacías, carentes de positividad era lo que tenía.
Perdió todo contacto con sus amigos, pues no tenía internet en aquella casa del alien. Lo peor de todo, es que no había pasado un mes, dos, quizás tres..no, todo eso había pasado en tan solo 3 días. Las llamadas hacia la escuela pidiendo su regreso, una ayuda económica proveniente de una beca.. la merecía por tener el promedio más alto sin embargo, llamadas había pero respuestas nulas. Se le fue negado todo tipo de acceso, y es que el problema radica en qué la educación no es educación si no ganas dinero. ¿Qué más da hacer alumnos mediocres si a los maestros se les sigue pagando? ¿Que más da dar una mala educación pero con paga existente?..
La beca que se le había otorgado legalmente, lastimosamente nunca se le fue entregada.
-Deberias llamar a un abogado - menciono Mari un día, aquello tenía razón.
-no tengo dinero para pagar uno - Dijo dib con una mirada carente de alegría
Aquella charla hacia una hueca resonancia en su cabeza. Sin embargo, todo estaba perdido ya para él.. ¿Sus amistades? Las había evitado, no quería caridad, no quería ser débil otra vez. Al pasar de los días cada día, se fue aislando más y más, ahogándose en la Soledad, sin poder respirar e incluso ir a la superficie, pues el peso de la tristeza, insomnio, ansiedad, desesperación ya estaban tomando factura para su cuerpo.
Había veces que incluso preocupaba al mismo alien, pues en unos días, su incomprendido amigo había dejado de comer como antes, levantarse, reír, bromear..
-¿Qué te pasa? ¿Qué tienes? - preguntaba el Alien con tono de burla - "¿te comió la lengua el ratón?".
Paciente e incrédulo esperaba una respuesta del contrario, sin embargo su vil respuesta fue un quejido. Lo cual ocasionó la risa de Zim
-¡¿ya te enojaste?! - menciono gritando en risas, aún riéndose con voz baja volvió a esperar pacientemente la risa del segundo-.
-basta ¿Sí? -Se limito a decir el pelinegro, dándole la espalda a Zim
-owww pobrecita de la nena ¡Esto es un espectáculo para zim! ¡Tienes el descaro de hacerme reír ! -solto una risa que fue bajando poco a poco la intensidad.
La sala se quedó muda, hasta que un débil sollozo salía de la boca de quién se encontraba acostado en el sofá, sin decir nada, simplemente inicio a temblar.
-soy inútil, ¿Por qué sigo aquí?, No pedí vivir, nunca pedí todo el dolor, todos cometen errores pero ¿por qué tengo que ser abandonado por la suerte?, Soy inútil, lo soy lo soy, me odio maldita sea - Pensaba para si mismo, mientras sin darse cuenta inicio a sacar más sollozos que perturban en lo profundo a Zim.
-maldita basura, !dime qué te pasa! - Preguntaba desesperado, tocando y golpeando débilmente la espalda del contrario, haría lo imposible con tal de poder ver la cara de su amienemigo en ese momento.
Sin embargo eso no sucedió, dentro de la futurista casa nadie hablaba y todos callaban. Pasaron dos días en los que se repetía la historia.
-¿Dib? ¿Estás bien? ¿Puedes mover tu asqueroso trasero del sofá de zim? -preguntaba con ánimos Zim, sentándose en el piso frente al sofá en el que estaba su amigo.
El alien hizo eso todas las mañanas, esperanzado de que dib dijera que estaba bien o en búsqueda de una respuesta ya sea negativa o positiva, solo quería encontrar respuestas. Por otro lado, el pelinegro, había dejado de recibir visitas, de jugar, de comer y sobre todo, de reír.
Podrá ser superficial el hecho de que sin la alegría el alma fallece, sin embargo, podrá ser así para los optimistas, pero no para el, aún no era su ruptura (o eso creía).
Pasaron otros tres días, en los que el alien preguntaba cada hora de la comida si estaba bien, incluso, se le ha dicho que el puede alimentarlo sin problemas, y en efecto, el podría hacerlo, pero ¿Quién alimentará su llanto con alegrías? ¿Quién podría hacerlo?.
-¿Estás bien? -Pregunto Zim como de costumbre, tocando suavemente la espalda del contrario. -no has ido ni al baño, por qué no has ingerido nada..
-¡Te estoy hablando maldita basura! -Grito zim, pues la mano casi inerte de su amigo, se cayó por un costado, tocando de esta manera el frío metal.
En ese instante, en ese segundo, pudo ver su cara, una cara pálida, ojos con unas ojeras muy profundas, labios muy secos incluso del enojo comprimido del chico, se podían notar pequeñas heridas de mordidas que esté mismo se produjo.
Al ver esto, el pequeño alien no entendía que pasaba, pues, aún estar tanto tiempo en la humanidad, se le era complicado el adaptarse, así que recordó lo que una vez, en la eskuela le enseñaron a reanimar a alguien, sin embargo ese método no funcionaba en esta situación.
-¡Si no te despiertas tu, te despierto yo! - Procedió a decirlo, mirando el rostro de su compañero, quién no hizo ningún gesto o quejido como normalmente lo hacía cuando estaba enfadado.
Temeroso, el alien procedió a acercarse a los labios del contrario, amenazando con su presencia y llorando interiormente, sin embargo, quería verlo vivo, para molestarlo y tener una vida normal.
Tras unos segundos y unos intentos fallidos de acercamiento, el alien logró reunir el valor suficiente para acercarse, y torpemente unir sus labios con los de su contrario. Acto seguido, supo que no había marcha atrás, había luchado para juntar sus labios con los de el, que no quería volver a luchar. Así que procedió a hacerle la respiración boca a boca, sin embargo no funcionó.
-Y todavía no te dignas a despertar ante el poderoso zim - menciono en un intento de calmarse a si mismo, sonrojado.
Posteriormente no le quedó de otra más que pensar que estaba durmiendo, así que con su pak decidió tomarlo con cuidado, y llevarlo hasta su habitación.
Un lugar que, aún que el alien dormía poco, lo tenía para buscar momentos de paz y como estudio de "estructura humana". Era un cuarto de color vino, con una pared color crema, una pequeña lámpara arriba de su estante blanco y la cama, la cual consistía en una cama baja con muchos cojines y una cobija de color vino. Con cuidado, acostó al chico arriba de las cobijas.
-mis cobijas son muy preciadas y no dejaré que duermas arriba de ellas por qué..se le da la gana a zim (?) -se limito a susurrar y proceder a sacar una cobija de color azul de la maleta del chico, lo arropó y miro por unos momentos, mirando que el chico dormía plenamente.
El alien bajo, y al abrir su nevera se encontró con muchas pilas de waffles, sin embargo considero el darle eso a su amigo, necesitaba algo de nutrientes, carbohidratos, lípidos y vitaminas. Por lo que tomando su disfraz decidió hacer una obra de caridad.
-aun que no me hayas cuidado en nuestra infancia, me borraré todo rastro de mis errores cuidándote- pensaba para si mismo el alien.
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•|Hola! Cómo están? Espero que estén bien!! Yo soy kreizy y espero les guste este nuevo capitulo, muchas gracias a todos por sus comentarios, leídas y votos, se los agradezco pues, de esa manera me motivo más a escribir un nuevo capitulo (a paso de tortuga pero lo hago con mucho amor 💚). Muchas gracias por todo su apoyo! Nos vemos hasta el siguiente capítulo 💚💚.
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•||E M O T I O N A L - F I G H T (ZADR)
Fanfiction•||Una lucha constante en donde no solo están en juego la vida y la muerte, donde en dicha batalla también entran diversos factores como el amor, comprensión y algunos sentimientos. ¿Quién ganará está pelea?, realmente no sé sabe, depende mucho del...
