Yes, My Lord (C. Norte x Chile)

Capítulo 27

En medio de la noche la quimera estaba feliz de ver que alguien inesperado lo venía a visitar, pero antes de dejarlo entrar a la habitación fue con mucho cuidado a la puerta para colocarle seguro y así evitar que los guardias del pasillo pudiesen atraparlos en caso de que se dieran cuenta que un invasor estaba con Chile, ahora que era más seguro la quimera volvió a la ventana para abrirla y así dejar que su amigo Sur entrara

-buenas noches Chile, me alegro poder verte de nuevo jejejejeje- se sentó en el marco de la ventana siendo cuidadoso de no meter mucho ruido para no alertar a los guardias, vestía ropa negra para pasar mejor inadvertido por los de seguridad del Gyoban ya que gracias a su hermano mayor habían duplicado la cantidad de guardias

-Sur que alegría verte! No esperaba tu visita- solo podían hablar susurrándose pero eso no quitaba el hecho de estar felices, la cola de Chile se movía de un lado a otro al sentirse acompañado, ya no estaba tan solo como pensaba

-no es obvio? Vine a verte- le dedico una enorme y brillante sonrisa, había esperado tanto tiempo con poder volver a ver a Chile una vez más que ahora lo aprovecharía al máximo- ven acompáñame al techo ahí podremos hablar más tranquilos

-al techo? Pero eso es...- miro de nuevo a la puerta, recordó que Akane le había dicho que no debe salir en las noches por su seguridad, lo mejor era quedarse en su habitación hasta el amanecer

-no te preocupes, volverás aquí antes del amanecer lo prometo- le extendió la mano invitándolo a que saliera, le hubiese encantado venir a verlo durante el día pero aun no es tiempo

-mmm... está bien, pero antes del amanecer- acepto la invitación, con ayuda del surcoreano se aferró a él para luego trepar hasta el techo donde nadie los molestaría

Luego de llegar al techo Sur lo invito a que fueran a otra parte del Gyoban, dijo que conocía el lugar perfecto para los dos así que corriendo con cuidado por los tejados se movían sin ser vistos por nadie de seguridad, el surcoreano lo llevaba tomado de la mano para guiarlo por lo que Chile solamente se preocupaba de no caerse por estar vistiendo esos trajes largos que le hacía vestir Akane. A lo lejos la quimera diviso como una especie de torre que estaba bien apartado de los edificios centrales, cuando llegaron resulto que era un verdadero mirador la quimera podía ver el hermoso paisaje nocturno desde ahí, según Sur ese lugar dejo de usarse desde que la directora Akane heredo el Gyoban ya que por lo las razones de ella ese lugar no tenía ningún propósito solamente para estorbar

-qué te parece?- miraba enternecido como Chile miraba maravillado el paisaje, con la luz de la luna y vestido de esa manera lo hacía ver tan hermoso ante los ojos de Sur

-es hermoso, gracias por traerme aquí Sur- se acomodó un poco el traje por el frio viento que había esa noche, pero al sentir como lo cubrían con algo más lo hizo ver hacia atrás, el surcoreano lo había abrigado con su chaleco

-jejejeje me alegra tanto de estar contigo de nuevo- le dedico una tranquila sonrisa, por fin estaban juntos nuevamente

-y porque me trajiste a este mirador? Aunque no me quejo, es un lugar precioso- entendía de que no pudo venir de visita durante el día ya que según Akane nadie a excepción de Norte podría venir a verlo pero le llamaba la atención el lugar en donde estaban

-para charlar más cómodamente, aquí los guardas no nos molestaran ¿Cómo has estado Chile?- hace meses que no se veían y quería saber cómo la a pasado ahora que tuvo que aguantar a su hermano

-oh pues veras...

Se sentaron en el suelo y comenzaron a charlar, Chile le conto como fue su entrenamiento con Akane hasta que logro conseguir el rango de Kisaeng también en las pequeñas aventuras que vivió junto a Yoon y las sirvientas hasta llegaron a gastarle bromas a algunos de los guardias que eran groseros con ellas liberándose siempre del castigo, también le conto como fue su primer día de clases y las cosas que le estaban enseñando, todo siendo escuchado por Sur, este después le comenzó a contar como comenzó a dar más conciertos y escribir canciones aunque le confeso que algunas canciones no las ha publicado porque son para Chile, esto solamente hizo muy feliz a la quimera quien no dudó en decirle que le gustaría escucharlo cantar