Digimon Tamers & Frontier: Unidos

Capitulo V: Equilibrando la balanza

El D-Reaper había vuelto al área oscura después de la batalla, encontrándose con los señores demonios satisfechos por sus logros, aunque esperaban una victoria total contra sus enemigos. La más molesta era Lilithmon, que veía opacada su capacidad de brillar por la de un ente ajeno a ellos, además de darle mala espina por el poder que tenía.

En cuanto volvió, fue interrogado por Barbamon, mientras Demon lo defendía a ultranza, Lilithmon no estaba de ánimo para darle su confianza.

- Pensé que destruirás de una vez por todas a esos humanos, yo aun siento su presencia- Dijo Lilithmon.

- Están muertos, estos cañones son lo más poderoso de mi arsenal- Dijo el D-Reaper.

- LIlithmon no creas que tu seas la correcta contra ellos, D-Reaper se encargará- Dijo Demon.

- No lo creo, has fracasado en tu misión virus de segunda- Dijo Lilithmon molesta mostrando una imagen de cómo sobrevivieron.

- ¡Eso no es posible!- Dijo el D-Reaper.

- Tus cálculos han fallado, no has cumplido tu misión, ahora lárgate- Dijo Lilithmon empoderandose de la situación.

- No, esto es parte de mi plan- Dijo el D-Reaper sacando sus tentáculos.

En ese instante hizo salir del suelo tentáculos suyos, capturando a Demon, como a Lilithmon, mientras que la energía del trono de Barbamon los contuvo, mientras los demonios se resisten a la captura, Barbamon se levantó desafiante contra su nuevo enemigo blandiendo su báculo.

El D-Reaper, decidido, envolvió a sus presas en capullos, mientras Barbamon se preparaba para enfrentarlo, apuntando con su bastón.

- Anciano aléjate, después de ellos sigues tú- Dijo el D-Reaper.

- No lo creo, no sabes el problema que te has metido- Dijo Barbamon.

- Ah, si, los destruiré fácilmente, y después ambos mundos serán míos, yo seré el equilibrio entre ambos mundos- Dijo el D-Reaper.

- Estás fantaseando mucho, ¡pandemonio perdido!- Dijo Barbamon lanzando su poderoso rayo de la oscuridad.

Barbamon lanzó un gran ataque con fuerzas del area oscura contra el D-Reaper, impactando en su pecho e hiriendo, causando bastante daño y destruyendo los capullos que mantenían encerrados a Lilithmon y Demon, liberandolos de su corto encierro, mientras Barbamon agarraba al D-Reaper de su cuello, dándole un ultimátum después del intento de golpe de estado que intentó dar.

- Nunca antes me habían intentado hacer esto, y has fracasado, te daré una última oportunidad para que destruyas a esos niños, o te lanzaré a las fauces de Leviamon, y creeme, no te gustará para nada- Dijo Barbamon soltando al virus.

- Está bien, ustedes ganan- Dijo el D-Reaper recuperando su forma original.

- Tienes tres días, la Tierra es tuya pero vuelve a hacer lo que hiciste y lo pagarás Dijo Barbamon.

- Está bien, ¿y si se resisten?- Dijo el D-Reaper más sumiso.

- Pues acabalos- Dijo Barbamon cerrando su puño.

El D-Reaper había entendido la orden, lo habían perdonado, y ahora tenía que cumplir, de lo contrario, un poder superior lo haría añicos, en cuanto se abrió un portal hacia la Tierra lo tomó inmediatamente, no debía fallar esta vez, porque sabía lo que le esperaba.Demon y Lilithmon, por otro lado, miraban sorprendidos por la reacción del gran Señor Demonio, por todo el poder que desató y que era capaz de liberar en su mundo.