Capitulo 4

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¿Cómo demonios supo nombre?. Era la pregunta de la castaña. Sacarla de aquel lugar había sido difícil. Todos los pacientes la vitoreaban como si se tratara de una gran celebridad, pero Lalisa se mantenía indiferente a ellos, su atención estaba en la de ojos felinos, quien empezaba a alarmarse por las constantes miradas de la tailandesa

-Bien, nos tomara un par de horas, Cicilia esta algo lejos de la zona

-Calculo unas 5 horas en coche

-- Más una media hora extra si incluimos el almuerzo- Jennie miró con reproche a su compañera quien le dedicó una mirada por el retrovisor- ¿Que? No pienso tomar carretera con el estómago vacío

En la patrulla Jennie se encontraba en el asiento trasero junto a  Lalisa con las pistola lista, mientras Jisoo conducía. La tailandesa se mantenía pasiva en su camisa de fuerza, estaba en completo silencio lo que empezaba a inquietar a las agentes

Por otro lado Jennie podía sentir el constante roce del hombro de Lalisa con el suyo, sabia que era a posta y aquello la ponía peor. Le hubiese gustado ser ella quien conducía, aunque sabia que fue la mejor elección, ver esos ojos miel sobre ella por el retrovisor iba a conseguir hacerla chocar.

-¿Sera posible aflojar un poco el bozal? Esta muy ajustado... O quitarlo, eso seria bueno- pidió la tailandesa tranquilamente

Jennie soltó una risa irónica y negó con la cabeza

-¿Y arriesgarme a que me quites medio tajo de piel? Sigue soñando Manoban

Los vellos de su nuca se erizaron al sentir el frío metal del bozal en su oreja y el sonido de su respiración.

-No me subestime agente Kim, muerdo delicioso, especialmente cuando se trata de esa piel delicada del sur- susurró con voz seductora haciéndola tragar fuerte ¿pero que diablos acaba de decirme?. Y aun peor. ¿por qué no la empuje de inmediato?

-¡Un maldito movimiento más y te vuelo los sesos!- amenazó Jennie con autoridad apuntando su sien. No iba a permitir ser el blanco fácil de esa psicópata por muy buena que estuviera

-Tenlo por seguro que tú seras la última en querer lastimarme Jennie Kim

-Mi trabajo es llevarte a Cicilia, pero nadie dijo que no te pueda entregar con uno o dos agujeros en cada pierna. No me tientes Manoban

Lisa la miró pensativa pero no dijo nada más. En cambio Jisoo soltó una carcajada ante la respuesta de la castaña

-Vaya, tenias bien escondido ese carácter Kim, me grada

❇❇❇

-¡Oh vamos Jendeukie, muero de hambre!

-¿Que demonios es eso?- Jennie rió ante el apodo- aun no vamos ni a mitad de camino, espera un poco más

-¡Han pasado dos malditas horas, vengaa, no puedo conducir con hambre!- la pelinegra hizo un puchero

-Entonces conduzco yo... ¿Estas haciendo puchero?- preguntó

-Es mi arma secreta- respondió Jisoo volviendo a hacerlo. aquellas dos no eran ni de cerca las agentes intocables que decían ser

-¡Diablos! Todo menos el puchero- La castaña lo pensó por un momento. Jisoo apretó con fuerza el volante en espera de una respuesta- Bien, un drive-in será suficiente

-¡Bieen! Vi un KFC a menos de 20 minutos, eso servirá- suspiró feliz- ¡Joder, de solo pensar en las alitas de pollo se me hace agua la boca!

Jennie rió

Psycho Love (Jenlisa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora