Psycho Love (Jenlisa)

capítulo 20

Mozart sonaba en la estancia y un sutil olor a flores impregnaba el ambiente. Girasoles. Miles de girasoles decoraban los jarrones de la estancia dando un aire tranquilo y armonioso. Los largos y delgados dedos de Lisa acariciaban las teclas del piano con parsimonia, siguiendo las notas de fondo, sus ojos se mantenían cerrados en señal de concentración.

-No has perdido el toque

Sonrió con cariño mientras cubría el teclado

-Aún podemos recordar viejos tiempos- la tailandesa miró a la rubia recostada en la puerta. No había nada de la pequeña de 7 años hambrienta y demacrada que luchaba en las calles

-Extraño los viejos tiempos, todo parecía más fácil

-Ciertamente no lo era Rosie, por eso hacemos lo que hacemos- suspiró y se puso de pie mirando los girasoles a su alrededor- extrañe este lugar

-Lo supuse, pasabas gran tiempo encerrada en estas cuatro paredes

Lisa la miró pensativa

-¿Lo tienes?- la rubia asintió, después de todo por eso estaba alli- Bien, llama a Taeh y a Jack, mientras mas rápido acabemos con esto mas pronto podremos alistarnos para festejar

-¿Todavía crees que es buena idea lo de Jennie Kim?

-Lo es, Jennie es mi As bajo la manga

-No lo se Lisa, si ella se entera...

-Cuando ella se entere yo estare fuera de su alcance- la interrumpió- ahora vayamos a ver a el señor Kang, e oido que no le gusta esperar- Ironizó con indiferencia

❇❇❇

-Joder Jisoo, no lo sé, no me siento comoda con esto

Jisoo la miró de pies a cabeza analizandola. Se habia ido a la casa de Jisoo a prepararse, habia dejado todo en su casa para que su novio no lo viera. Por suerte para ella, Kai estaba de guardia, pero aun asi le aviso que saldria con la agente y otras amigas

-¿Son muy altos? Siento decirte Jen que con tu estatura jamás podrás alcanzar los labios de ese mujeron

-¡No hablo de eso!- sus mejillas enrojecieron- Además, no sé que tanto hablas si tú eres otro maldito pitufo, y Rose no es muy baja que digamos

-Y por esa razón los mios son igual de altos. ¿De qué te quejas?

-No veo correcto que hayamos comprado cosas con un dinero que no es nuestro

-Oh vamos Jennie, son mafiosas. Con un tronar de dedos les llueve dinero del trasero, ¿qué más da unos pocos dolares? Imagino que la jefa de blackpink tiene en el banco una larga hilera de cero a la izquierda... Y solo fueron dos vestidos y un par de zapatos

Jennie recordó el nombre del registro

-¿Quién crees que sea esa tal P. Bruschwailer?

Jisoo terminó de maquillarse

- Será su secretaria o alguien a sus servicios, o quizás le esta robando a alguien, ¿¡qué se yo!? Gracias a esa mujer estamos vestidas de infarto, así que ¡Gracias Bruce Willis!!

-Es Bruschwailer - corrigió la castaña. Tomó unos chetoos y se los llevó a la boca mientras revisaba sus redes. Un mensaje la distrajo y casi se atraganta

-¡Por eso debes masticar bien tu comida!- la regañó Jisoo

-¡Están abajo!

-¿Estan?

-Rose y Lisa

-¡Oh dios mio!- Jisoo volvió a verse en el espejo por quinta vez

Mientras tanto, en el auto Rose empezaba a impacientarse

-Como tardan...

Lisa tamborileó los dedos en el volante con nerviosismo. ¿debía llamarla? ¿se habría arrepentido? La castaña le había informado que estaría en el departamento de Jisoo y también le había enviado la dirección de la última

-Vaya, quien diria que ese par luciría tan bien en esos micro vestidos

-¿De qué...? -Lisa tragó en seco al ver hacia donde veia su amiga- Joder...

Jennie llevaba un vestido rojo de corsé que alzaban sus pechos de forma exquisita, y que dejaba ver sus prominentes curvas, especialmente sus bonitas piernas

-¡Lisa!- volvió a llamar Rose con impaciencia

-¿Eh?

-Solo abrele la puerta y deja de comertela con la mirada, ya tendrás tiempo para eso después

Lisa rodó los ojos y obedeció. Casi perdió el aliento, De cerca la castaña se veia aún mas hermosa

-Jennie...-susurró en un suspiro

-Lisa...

A la más alta casi le flaquearon los pies al oírla pronunciar su nombre.

-Hola mí reina chanel- susurró la tailandesa con una bonita sonrisa

Las mejillas de la coreana enrojecieron y antes que pudiera hablar la pelinegra ya las estaba llamando desde el interior del BMW plateado de Manoban

-¡Ya dejen de verse como idiotas y suba!

-¿Quieres otro tiro Chicken? Porque balas me sobran- amenazó Lisa

-¡¡Pensándolo bien, tomense su tiempo, no hay prisa!!

❇❇❇

-Pense que iriamos a un bar- comentó Jennie confundida

Lisa sonrió, arqueando una ceja irónica

-¿Dije bar?

-Dijiste tomar unas copas

-Oh si, pero en una discoteca

La tailandesa cerró el auto y le entregó la llave a un chico que de inmediato lo quitó de la entrada ¿eso se hacia en una disco?

-Pensé que eso solo se hacían en los hoteles 5 estrellas- comentó la pelinegra sin poder creerlo

-O en las discotecas, restauranes y casinos de lujo- aclaró Rose situándose junto a Lisa- y aún más si se trata de la dueña

Jennie y Jisoo intercambiaron miradas, ambas igual de confundidas

-¿Y quién es la dueña?

-Nosotras, por supuesto

Sin más, continuaron su camino hacia la entrada, junto a la puerta habia una larga hilera de personas en espera y dos enormes guardias custodiando la entrada. Bastó ver a Lisa y a su lado a Rose para que ambos abrieran paso, ofreciendo una leve reverencia

-No pueden pasar- uno de los hombres cubrió la entrada justo cuando las agentes se dispon5ian a pasar

-De ahora en adelante Mark, ambas señoritas tienen completo acceso vip- intervino Lisa con brusquedad, y siguiendo de largo

La pelinegra se situó frente al portero con actitud altanera

-¿Escuchaste gorila? ¿Vez esta cara? ¡Será mejor que memorias bien el rostro de Kim Jisoo si no quiere perder tu trabajo!

Adentro todo lucía impresionante. Mesas de cristal, asientos de cuero, y una amplia pista repleta de gente bailoteando. Jennie siguió de cerca a las chicas, lo menos que queria era perderlas de vista. Subieron unas escaleras que las llevaba a la zona vip. Jennie amplió los ojos, sorprendida, lo que creía que sería una zona más lujosa de la disco era en realidad un ambiente completamente diferente

-¿Un casino?

Jennio perdió el habla. Allí arriba la gente vestia ropa de diseñador. Miró incrédula las mesas de naipes, y al final una de billar y algunas otras maquinas de casino, incluso olia a tabaco ¿Se podía fumar allí?

- Tenía entendido que no se podía fumar en una disco- comentó sin dejar de mirar a su alrededor

Lisa la miró y se encogió de hombros

-Literalmente estás en un casino- respondió divertida.

Jennie miró a la arrogante tailandesa y todo a su alrededor. Al parecer, iba a ser una larga noche