Silenció absoluto había en aquél lugar, athanasia deseaba que la tierra se la tragase ahora mismo.
¡¿COMO HABÍA PASADO ESTO?!
Miró como su padre miraba Amenazadora mente aquél dios de la guerra.
Ares
Tragó un poco de saliva mientras que apretaba la mano de pandora, que estaba aún lado de ella, la mujer la miró con dulzura.
—Todo estará bien—le murmuró.
Asintiendo miró hacía al frente y tembló ligeramente, al ver que aquél dios la miraba con sus potentes ojos azules.
Zeus
Ese era su nombre.
Rápidamente aparto la mirada ya que le dio algo de vergüenza, miró a sus alrededores y vio a casi a todos los dioses–que conocía– que la observaban y miró al suelo.
Esto era demasiado para ella, lo único que quería era no llamar la atención de estos dioses y mas si era Zeus.
Pero por culpa de Ares, ahora todos sabían de ella, si tan sólo no hubiera salido aquél día, tal vez ares no se hubiera dado cuenta sobre su existencia.
Sentía que era su culpa, aún que thanatos y hypnos le hubieran dicho que no era cierto, aun sentía culpa, y mas culpa sentía al ver a thanatos herido. Ya que había peleado contra Ares aquél día. Ese día pegó el gritó de su vida para llamar a su padre, para que salvara a thanatos. Ya que Ares era demasiado fuerte.
Y después de eso ella cayo desmayada, y días después despertó para saber que habría un juicio en donde la necesitaban a ella.
Temió lo peor, tenía miedo eso estaba más que claro, no sabía lo que le harían. Aunque su padre hades le dijo que jamás permitirá que la alejarán de el, además de que tenían el apoyó de Deméter, Perséfone, Hestía y Hécate.
Ninguno iba a permitir que le hicieran algo a ella. Primero tenían que pasar sobre ellos si querían llegar a ella.
Agradecía mucho aquél gestó, pero no quería que nadie saliera herido, ya estaba un poco traumatizada con ver a thanatos herido, no quería ver a nadie herido, por ahora. Ya que sabia en un futuro no tan lejano habría gente que saldrá herida o muerta. Negando con la cabeza decidió mejor ponerse a pensar en lo que sucedería ahora.
—Silencio —habló después de tanto tiempo, zeus, miró a su hermano hades.
El gobernante del inframundo al sentir la mirada de su hermano menor, lo miró con seriedad.
—Bueno...de lo que tengo algo seguro es que al menos se la razón del porque, dejaste de pelear contra athena por el dominó de la tierra— dijo mientras que miraba a athanasia, esta al sentir su mirada se encogió en su lugar, aquél hombre le ponía estar de alerta—Si que la tenías bien guardado esto querido hermano —sonrió de medio lado, aquélla niña le llamaba mucho la atención y mas aquellos ojos, pero dentro de ella había algo mas, algo poderoso.
Sonrió al saber que era, esto se había vuelto muy interesante, si que su hermano mayor, la tenía muy bien escondida. Era como un rey codicioso escondiendo su mayor tesoro de las personas.
Hades si que había encontrado un GRAN tesoro.
—Mi señor— hera miraba con seriedad a su esposo, ya sabía mas o menos. Lo que el debería estar pensando.
Pero si se equivoca y dice que quiere a esa niña como una concubina –obviamente cuándo creciera–no dudará en plantearle unos buenos golpes, hasta que recapacite.
Golpe fuerte.
Al escuchar aquel fuerte golpe todos vieron al causante de aquél ruido.
—¡Hades!— se escuchó la voz de una mujer y la vieron, era la diosa de la guerra.
Athena.
Vieron que no tenía una buena expresión en su rostro, se veía enojada algo raro en ella. Que se mantenía serena. Esto era una nueva faceta.
—¡Dime, es por esa razón de que me pediste un acuerdo de no volver a pelear por el dominio de la tierra!— gritó, todos aguardaron silencio, querían saber que le contestaría.
Zeus al principió pensaba silenciarla, pero al escuchar eso, también esperaba escuchar la respuesta que hades le daría. Esto se había puesto mas interesante.
—Yo....
¡He vuelto!
Espero que estén listos, por mi regreso!
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𝐓𝐇𝐄 𝐔𝐍𝐓𝐎𝐋𝐃 𝐒𝐓𝐎𝐑𝐘▬𝑷𝒓𝒊𝒏𝒄𝒆𝒔𝒂 𝑬𝒏𝒄𝒂𝒏𝒕𝒂𝒅𝒐𝒓𝒂
FanfictionSabes que es lo que mas duele, sabes el dolor que causa saber que ala persona a quien quieres te asesiné solamente por una absurda razón y que te remplaze fácilmente con alguien que nisiquiera es tu hija, nadie te quera sinceramente como yo lo hice...