Que más podría perder?

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Resulta que la habitación de maki estába mucho más lejana que la de sus hermanas mayores, caminaron a través de la mansión por los pasillos menos transitados para evitar cualquier tipo de encuentro indeseado. Todo estaba bien hasta que llegaron a una puerta de un color rojo carmesí que se veía bastante maltratada, cosa que alertó a las dos mayores, y sin hacerse de esperar más, entraron en la habitación. Pudiendo apreciar una habitación con paredes de un color morado, pero igual de maltratada que la puerta y la habitación tenía varias comodidades que la mayores no tenían en su habitación, como una televisión, un escritorio junto con su computadora, sillones, varios muebles, etc. Y junto a la cama se encontraba una pelirroja con un traje a medio quitar mirando anonada a las mayores de la habitación

- M..maki!!- gritaron casi al unísono las hermanas recién llegadas lanzándose en un necesitado abrazo a la menor.

- E..li, umi- susurro la menor en su cercanía- que hacen aquí?, Mi padre las libero?

- No, nada de eso- dijo la mayor negando con su cabeza- estamos huyendo, tenemos que huir juntas

- No hay tiempo que perder- dijo UMI tomando a la menor de la muñeca- tenemos que irnos

- Esperen!!- dijo la de ojos amatistas- esto está mal!, No debemos desobedecer la órdenes de nuestro padre, el esta haciendo de "mounstro" por nuestro bien- dijo haciendo comillas la palabra mounstro- el nos quiere juntas.

- Pe..PERO QUE ESTAS DICIENDO MAKI!!- dijo la mayor de las hermanas enrabiada- el nos ha hecho la vida imposible al separarnos y torturandonos diariamente.

- Si él no nos quisiera no nos estaría enseñando de la crueldad del mundo de esta manera- dijo maki sería y firmemente

- Para eso hay otras formas de enseñar- intervino por fin UMI.

- No una forma más efectiva que la que el utilizo con nosotras, que no o entienden?!, El es el que de verdad está sufriendo al enseñarnos de esta forma. Pero el lo hace porque es valiente y porque nos quiere- dijo la pelirroja inexpresiva y con total seguridad. Probocando desilusión en las mayores. Ese hombre le había lavado el cerebro a la mas vulnerable de las tres. Era algo que realmente no sé esperaban.

- Lo siento maki, pero tú vendrás con nosotras- dijo la mayor de las hermanas, y tomándola como un saco de dirigió a la puerta hasta que sintió un fuerte dolor abdominal que la obligó a ponerse de rodillas

- Yo no me iré a ningún lado- expresó la menor con serenidad poniéndose de pie. Al parecer ella había inmovilizado a la mayor- y ustedes tampoco.....aún no podemos estar juntas, ustedes aún no comprenden el amor que nuestro padre nos intenta dar, por lo que tendrán que seguir en la "enseñanza" impuesta valientemente por nuestro padre a nosotras.

En eso llega el padre de maki a la habitacion junto con unos hombres robustos con traje a su espalda, estos últimos empujando a un pequeño hombre cojo que las tres reconocieron bien.

- Me enorgulleces hija mia- expresó el mayor refiriéndose a maki. Provocando en esta última una pequeña sonrisa que no paso desapercibida por sus hermanas mayores- a diferencia de tus hermanas mayores, que aún no logran entender todo lo que sacrifico por ellas.

- Jamás lo entenderemos- replicó la rubia - jamás entenderemos la crueldad con la nos has "criado"

- Vaya, de verdad me decepcionan- expresó demostrando falsa desepcion- pero eso no viene al caso- ahora desviando su mirada al joven que se encontraba en el suelo- a si que tú fuiste el responsable de que UMI y Eli salieran de su cuarto. Desobedeciste puntualmente mis órdenes y provocaste un retraso en el aprendizaje de mis hijas.......esto no tiene pago....... sabes?

- S..señor, per...perdoneme, yo solo estaba ayudando a sus hijas..... Se veían tan mal que yo pensé- fue interrumpido por el dueño de casa otra vez

- QUE MIERDA SABES TU QUE ES LO MEJOR PARA MIS HIJAS, NO TIENES IDEA- expresó con furia en sus ojos. Que luego de un tensó silencio suavizó su semblante y dirigiéndose a maki- hija, no necesitamos gente que estorbe en nuestro camino a la felicidad, y como deseabas tanto que te diera una misión, ahora te la doy. Mátalo.

La menor lo miro con cierta interrogante, esperaba que se retractara o desmintiera sus palabras, pero nunca llegó. Por lo que como órdenes directas, saco un cuchillo de su tobillo y como si lanzará un dardo lanzó un cuchillo impactandolo directamente en su corazón y por si fuera poco tomo otro cuchillo escondido en el torso de su cuerpo y lo lanzó en su garganta. Probocando que el joven no dejará de sangrar

- IZUMI!!- grito la peliazul corriendo a socorrer inútilmente al joven que ya se encontraba muy pálido-NO!, NOOOOOO!. PORQUE RAYOS LO HISISTE!, QUE LE HISISTE A MAKI!!- grito acercándose peligrosamente a su padre, siendo interceptada por una pequeña pelirroja

- Que no entiendes UMI!, Solo queremos una familia feliz, sin intrusos de por medio- dijo maki como siempre, sin expresar nada en su semblante ni en su voz.

- Déjalo maki, no sirven las palabras contra la actitud de  desidia que ellas disponen- replicó su padre tranquilamente- lo que necesitan es aprender a través de la sensibilidad. Maki, graba tus iniciales en el bello torso de UMI- dijo pasándole un cuchillo

Y esta última, sin pensar mucho en lo que su padre le exigía se lanzó contra la peliazul agarrándola fuertemente de las manos. Mientras que la rubia trataba de intervenir, pero fue detenida por los guardias que habían venido con su padre. Maki con una mano agarro firmemente las dos muñecas de UMI, posisionandolas sobre su cabeza, mientras que con la otra mano levantó levemente su polera, dejando ver su blanco y delgado torso. Pero de igual forma se podían apreciar moretones, debido a los golpes que está recibía en su "crianza". Esto provocó un malestar en la menor y por más que quisiera no podía continuar.

- Que sucede maki- pregunto el mayor un poco impaciente. A lo que maki se levantó, se posicionó frente a él y dijo...

- No puedo.....no puedo hacerlo- respondió inexpresiva sin brillo que identificará en sus ojos amatistas.

- Ahh si?- replicó su padre. Se le había acabado la paciencia y al igual que en su infancia, le dio un golpe en el estómago, pero este no le causo un dolor infernal y miedo, como habría sucedido hace años. Sino que un enfermizo placer recorrió su cuerpo. Y con una sonrisa decorando su rostro, recibió los fuertes golpes que le proporcionaba su padre.

- Maki!!- grito UMI en un intento de correr a salvar a su hermana menor

- No vengas- recibio una fría e incuestionable orden de la menor. Probocando que todo su cuerpo se detuviera de golpe observando fríamente como dejaban a su hermana malerida, pero lo que más le sorprendió es que su rostro era decorado por una sonrisa que no desaparecía por más que su padre le golpeara.

Los minutos fueron pasando pero los golpes no cesaron en absoluto. La ropa de maki se fue desgarrando y dejando a la vista múltiples margas de cortes, desde sus brazos hasta sus piernas. Les era imposible a la rubia y la peliazul imaginar lo que su hermana menor había sufrido, definitivamente a su hermana menor la habían roto.

Los golpes cesaron y la pelirroja aún tenía su sonrisa y al reincorporarse y ponerse de pie, dio una reverencia a su padre, esperando sus palabras.

- De verdad me dejas sin palabras...... Hija mía- dijo para levantar el mentón de la menor y mirarla directo a los ojos- eres la persona más fiel, confiable y fuerte, que he conocido jamás. Te cambiare de habitación. John tomen todas las cosas de esta habitación y llevenlas al cuarto C16. Será la nueva habitación de maki-informo recibiendo un asentimiento por parte del nombrado- Limpien a este gusano- dijo refiriéndose a Izumi- y lleven a las niñas a su cuarto, ya no aguanto tanta incredulidad junta-expreso por último saliendo de la habitación junto con Maki.

El plan de huir de UMI, tuvo más bajas que buenas noticias. Osea ahora sabía que sus hermanas estaban bien, pero Izumi murio por su culpa, maki sufrió frente a sus ojos y bueno, tanto la rubia como la peliazul fueron insultadas por su propio padre. Y aunque fuera insalubre, una pequeña esperanza se instaló en la mente de UMI. Tenia que hallar otra forma de poder estar las tres juntas sin obligar a nadie su presencia. Debía recordarle a maki que son las hermanas y estaba dispuesta a darlo todo. Pues.... Que más podría perder?

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Continuará

Corazón sin caraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora