Steve se sorprendió cuando aquella mañana entró al comedor Bucky... pero se notaba tan diferente. No era el Bucky que rescataron de Hydra, sino aquel que fue nombrado sargento antes de irse a la guerra. La sonrisa y mirada, esta tenía un brillo de travesura innata, coqueta, su peinado singular y el cual hacía que se viera más atrevido, la forma en como le quedaba aquel uniforme. Aunque lo más sorprendente era verle sin el brazo de metal.
Pero sobre todo no era el único sorprendido con ello, puesto que tanto Natasha como Sam, que eran los únicos que se encontraban a su lado también se encontraban sorprendidos.
—¿Steve? —Bucky se sorprendió al notar el cambio físico de su mejor amigo cuando pudo diferenciar a quienes estaban frente a él, ya que nunca los había visto. —Te imaginaba más pequeño... —Steve se movió algo incómodo ante el sentimiento de deja vú y el brillo de travesura se reflejó aún más en los ojos grises del más bajo, sonriéndole. —¿También creciste ahí abajo?
Cuando aquellas palabras fueron dichas una risa escapo de los labios de Natasha ante la pregunta de Bucky mientras las mejillas de Steve se coloreaban ante la vergüenza que estaba sintiendo.
—¡Bucky!
—¿Qué?, es curiosidad, Stevie. —Bucky sonrió con inocencia como si aquello hubiera sido de lo más normal preguntar.
El castaño se acercó hasta el rubio hasta el punto en que ambos cuerpos se rozaban, por el momento simplemente se encontraban mirándose hasta que la mano de Bucky paso tocando la entrepierna de Steve, rozando el miembro del más alto. Aquello hizo que el sonrojo de Steve se hiciera más profundo.
—Mmm, para no estar erecto se siente grande. —Mencionó Bucky como si estuviera hablando del clima.
Sam tosió incomodo ante la escena, nunca espero ser observador de esto y esperaba que nunca se volviera a repetir. Si vivía traumándose con el Bucky actual, no quería ni deseaba saber cómo fue en el paso. El sonido llamo la atención del castaño y automáticamente se separó de Steve para prestarle atención a las dos personas que estaban frente a él.
—Hola, ¿quiénes son?
—Esto es confuso, la verdad. En un momento estaba a punto de irme a la guerra y ¿me están diciendo que estoy en el 2019? —Bucky alzó su ceja incrédulo, en parte se encontraba confundido, pero lo creía. De alguna forma.
—Sí, Buck, te lo he repetido tres veces. —Steve se queja mientras pasa su mano por su rostro.
Bucky ríe con diversión al ver tan frustrado a Steve, amaba preguntarle la misma cosa varias veces con tal de ver al rubio de esa forma. Se acercó hasta donde estaba Steve para sentarse sobre el regazo de este, haciéndole sobresaltarse y volverse a sonrojar.
—Entonceees. —Bucky alarga las palabras mientras rodea el cuello del rubio con sus brazos. —¿Vas a enseñarme tu nuevo cuerpo?
—Hey, espérate, todavía estamos aquí. —Se queja Sam mientras se levanta del sofá.
—Yo no. —Y con ello la pelirroja desapareció.
—Entonces, vete. —Le sonríe Bucky de manera inocente antes de volverse hacia el rubio y comenzar a mover las caderas, provocando una fricción sobre ambos. —Stevie, no te pongas tímido conmigo, anda vamos.
Steve no pudo aguantar más y termino alzando a Bucky para dirigirse hasta la habitación de ambos, quizás más tarde se reprocharía por haberse permitido caer ante este Bucky. Pero por el momento iba a disfrutarlo.
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Till The End Of The Line
FanfictionFictober. 2020. Stucky. Son algunos días, no todos.