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Seúl, Corea del Sur.

El ambiente cada vez estaba más tenso, el Gobierno les presionaba de cerca con el tema de la captura de Lisa, cada vez les echaban más la soga al cuello amenazándoles con llevarlos presos. Había pasado exactamente una semana desde que la chica les contacto, una semana perdiendo dinero a lo estúpido para recuperar el casino, Taehyung estaba desesperado y negándose a hablar con ellas.

Jimin ya había localizado a Rose, no fue nada del otro mundo, ella estaba en Paris donde se conocieron, pero de igual forma se negaba a dialogar.

Entonces, ¿quieres hablar con ellas? – Pregunto el mayor de todos –

– ¿Y si se entera el Gobierno? – Pregunto Kim menor– Changbin nos tiene en la mira

Aunque nos esté vigilando no nos hará daño, me debe algunas – Respondió mientras daba vueltas por la habitación – Jimin mañana mismo puedes viajar a Paris

¿Es una orden? – Pregunto desconcertado recibiendo una asentimiento como respuesta – Sabes que sí, mañana mismo me voy

– ¿Él va ir solo al lugar donde más lo buscan? – Pregunto de inmediato Min –

Se cuidarme solo hyung – Respondió rápidamente –

No puedes ir solo, puede pasarte algo – Volvió a interrumpir – Es peligroso

Está bien, dejen las discusiones – Interrumpió Hoseok – Vayan ambos y listo

Puedo hacerlo solo, llevo un año dependiendo de mí mismo – Alegó Jimin –

Van a ir ambos y se acaba la discusión – Regaño el líder desviando la vista a Yoongi – Y no quiero peros

Mañana van a ir a Paris Jimin y Yoongi – comenzó Jin – Hoseok, Tae y Jungkook ustedes tienes que ir a Tokio a solucionar el escandalo

Vayan a arreglar sus cosas, necesito que tengan todo listo y viajen de la manera más sigilosa – ordeno Namjoon –

Todos asintieron y comenzaron a salir de ahí, lo que menos necesitan eran pelean entre ellos.

Gracias a la corrupción del Gobierno, el tiroteo que tuvieron hace unos días no fue visible para los medios de comunicación, ya que lo que menos querían era un escándalo que incluyera a los altos mandos del Gobierno coreano.

A veces Namjoon se preguntaba si de verdad estaban haciendo lo correcto, si de verdad escogió a su grupo para salvar al mundo, a base de corrupción, a base de muerte. De verdad lo estaba haciendo bien, era un buen líder y han librado muchos problemas, pero, ¿a qué costo?

Por una parte sabía que escogió a los mejores chicos y por otra pensaba que les había arruinado la vida solo por cometer una estupidez hace algunos años.

Le salvo la vida a uno, para arruinar la de seis, el mismo se consideraba la peor escoria que existía, salvar a su mejor amigo a cambio de hacer estas mierdas.

Llevaba 4 años lamentándose de su decisión, ahora estaba así por querer beneficiarse el mismo, en cierta parte quería mandar al carajo todo, de todas maneras iría a parar al mismo lugar antes o ahora, la cárcel.

Seúl, Corea del Sur. 3 de Marzo del 2016.

Varios soldados lo amenazaban, algunos le golpeaban y otros se reían de él, pero acaso era su maldita culpa haber nacido en una de las familias más ricas de Corea y que gracias a eso a sus 22 años ya fuera Capitán de la brigada 11 de las fuerzas especiales de Seúl. Él no quería ser militar, él se dejaba pisotear por los altos mandos, pero todo acabo cuando se metieron con Jackson.

Su mejor amigo casi hermano desde la infancia, lo golpearon e hirieron hasta dejarlo inconsciente, según los doctores unos golpes más y el joven Wang no hubiera sobrevivido.

Fue contra los idiotas que lo hicieron y no se tentó el corazón para asesinarlos en un intento de salvar a su amigo.

Todo estaba borroso, estaba empapado, no sabía si por la lluvia o por la sangre. Estaba parado viendo lo que acababa de hacer, seguramente iría a la cárcel, pero al menos ahí sería un buen lugar para morir.

Lo llevaban como si de un perro se tratase, en aquella sala estaban los altos mandos de la Milicia y el Gobierno. Su padre estaba allí y lo veía con decepción, lo veía con asco. Le propusieron un trato algo arriesgado, pero lo tomo.

Reunir a varias personas para hacer el trabajo sucio, al final de cuentas ya era un perro sin dueño y si no lo hacia el iría a la cárcel y asesinarían a Jackson, personalmente lo de él le valió pero no podía hacerle eso a Wang.

Rebuscó en miles de expedientes tratando de alargar la situación, pero seis chicos le llamaron la atención, seis jóvenes que tenían una cosa en común: no tenían nada que perder en esta vida.

Lo peor de esta situación es que ni sus seis chicos, ni su mejor amigo sabían lo que él había hecho. Y se arrepentía, pero ya no había vuelta atrás.

Namjoon, ¿me estas escuchando? – Pregunto el mayor sacándolo de sus pensamientos –

L-lo siento – dijo soltando un suspiro y pasando sus manos por su rostro con frustración –

Tranquilo, todos estamos teniendo malos días – Le sonrió con amabilidad – ¿Todo bien? ¿Quieres hablar?

– ¿Porque decidiste venir Jin? – Pregunto de repente desconcertando al mayor –

E-estaba aburrido de mi vida tan cotidiana, solo que a veces pienso que carajo hice para estar aquí - Y con eso logro que el menor se sienta más culpable – Oye tranquilo no es tu culpa – se apresuró a decir al ver al chico en ese estado-

S-si es mi culpa – respondió con la voz rota –

Ven vamos a descansar, al menos date ese lujo hoy – lo atrajo hacia el llevándolo a su habitación –

En el camino el mayor se dio cuenta que su líder de verdad se sentía culpable, a pesar de no ser tan unidos, Jin juro que siempre cuidaría a Nam. Le tenía un cariño especial a ese hombre, un cariño el cual no era correspondido.

El menor se recostó en la cama inmediatamente causando una sonrisa en los labios del mayor, el azabache se recostó a su lado comenzando a jugar con los mechones morados de Namjoon, el moreno solo sonrió un poco mostrando sus hoyuelos.

Al menos ese día podía descansar cerca de su mayor.


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Perdón si es muy corto, he estado un poco ocupada unu

Como va? 

EDITADO

❝La Elite: BTS❞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora