🍭𝑀𝑢ñ𝑒𝑞𝑢𝑖𝑡𝑜🍭 𝓡𝓪𝓿𝓷 𝔁 𝓛𝓮𝓮𝓭𝓸 (𝑌𝑜𝑢𝑛𝑔𝐻𝑎𝑘)

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Te diré un Secreto

Ravn: ¡Gracias y adiós!|___ cerró la puerta con gran brusquedad.

Seo Ho le dijo que el día pasó de lo más tranquilo, sin nada raro e inusual, incluso le dijo que talvez el propio YoungJo podría ser un  sonámbulo, eso explicaría por que repentinamente desaparece su comida.

Obviamente YoungJo creyó que eran sólo suposiciones, además nunca en su vida, y porque sus padres tampoco lo notaron, el no era sonámbulo, ni siquiera sufre de algún desorden del sueño. Por esas razones terminó corriendo casi a patadas a su amigo.

Ravn: Ardilla del demonio.|__ camino directo asta la habitación.

Se quito los zapatos y se dejó caer en la cama, talvez debería considerar la idea de Seo Ho, puede que sea una teoría pero por alguna razón comenzaba a tener sentido.

Leedo: ¿Estas bien?|__ abrió sus ojos de golpe al escuchar esa vocecita.

Ravn: Si, tranquilo, estoy muy bien.|__ respondió secamente.

Leedo: No estás bien, te escucho molestó, ¿pasó algo?|__ volvió a preguntar, estaba tan preocupado por el bienestar de su amigo.

Ravn: Pasa, que desde que llegaste han estado pasando cosas muy raras últimamente, Dios....¡me estoy volviendo loco!,¡¿por qué te digo esto?!, ¡Sólo eres un muñeco!|__ alzó la voz, y eso fue la señal que tanto espero Geon Hak.

Leedo: Te diré un Secreto, Siempre y cuando no me vuelvas a gritar.|__ su amigo lo quedo viendo con mucha curiosidad.

Ravn: ¿Tú?, ¿un secreto?, pfffff Hakkie no me hagas reír, sólo eres un ¡M-U-Ñ-E-C-O!|__ cerró sus ojos con fuerza para evitar seguir gritando.

Leedo: Un muñeco que te entiende a la perfección.|__ nuevamente abrió los ojos de par en par.

Con lentitud su mirada viajó asta un chico, alto, fornido, cabellera rubia y hermosos ojos.

Leedo: Muy bien ahora grita y corre.|__ siendo así, se cubrió sus orejas por los gritos de YoungJo.

En su desesperación por salir corriendo cayó al suelo, logrando golpearse un poco la cabeza.

Hakkie intento ayudarlo a reincorporarse pero YoungJo volvió a gritar cuando lo tuvo cerca, no tuvo más opción que gatear e ir asta la puerta, la cual con mucha dificultad logró abrir.

En su segundo intento por escapar de ese muñeco de ahora casi un metro ochenta, volvió a caer, por lo menos ahora logró llegar a la cocina.

Leedo: ¿Me dejaras explicarte?|__ alzó una ceja mientras observaba a su amigo desde el marco de la puerta, se agachó un poco para estar casi a la altura.

Ravn: No... No puedes ser... ¡Estas vivo!|__ poco a poco retrocedió cuando el "muñeco" se acercó un poco.

Leedo: No me tengas miedo, por favor...|__ la voz de Hakkie era mucho más profunda que la YoungJo, pero por alguna parte de él vio a su pequeño muñequito.

Se levantó del suelo y con pasos firmes se acercó a su Hakkie, no podía negar que se veía extremadamente apuesto y sexi, ¿cómo dentro de ese muñeco se ocultaba un hermoso hombre?, era algo que no tenía explicación, tomó el rostro de su muñequito, se sentía tan bien sentir el  calor de sus mejillas, su piel era tan suave, tan delicada, tan lindo y malditamente..

Ravn: 《violable》|__ pensó una vez que se adaptaba a la nueva apariencia de su Hakkie.

Leedo: Por favor... No me dejes otra vez|__ se levantó de su lugar para abrazar al mayor con fuerza.

Ravn: Tranquilo, no lo are... No estarás sólo|__ acaricio suavemente esa cabellera rubia.

Una sonrisa con gran malicia apareció en el rostro de Hakkie, ahora sólo le hacia falta deshacerse del novio de YoungJo.

Estaba más que decidido a tener a YoungJo sólo para él y nadie más.

[....]

Después de un rato YoungJo llegó con varias bolsas en mano, todo esto debido a que ahora su mejor amigo necesitaba ropa a su nueva medida, y desde luego, verlo devorar casi toda la comida de su nevera también fue un gran motivo por ir de compras, y  abastecer nuevamente su nevera.

Ravn: ¿Desde cuando eres humano?|__ bingo, la pregunta del millón. Geon Hak sólo se limitó a sonreír.

Leedo: Cuando tenías seis años, una vez dijiste que te gustaría que fuera real, tampoco se como ocurrió, pero después cuando te fuiste con tu madre, algo en mi cambio, podía moverme mejor, podía sentir... incluso descubrí que puedo cambiar de forma, era como si... todo tu cariño tomo forma, convirtiendome así...|__ sus ojos brillaban relatando lo sucedido.

Ravn: Eso es... ¡¿Por qué no me lo dijiste hace años?!|__ chillo mientras sacudia a Geon Hak de un lado a otro.

Leedo: No lo hice por que no quería que te diera un ¡Puto ataque de pánico!|__ apartó las manos de YoungJo y lo miro sin ninguna pizca de gracia.

Ravn: ¡No fue un ataque de pánico!|___ poco a poco se fue calmando. 

Leedo: Caer de la cama, gatear y gritar ¿no fue un ataque de pánico?|___ alzó sus cejas en espera de una respuesta, aunque ni siquiera llegó.
--- Eso imaginé.

Ravn: Tú ganas, pero dime algo.|__ su semblante cambio a uno intimidante.
--- Fuiste tú, desde un principio ¿verdad?

Leedo: ¿Que cosa...?|__ su nerviosismo se empezó a notar.

Ravn: El helado por ejemplo.

Leedo: Eh... sip.

Ravn: El pollo.

Leedo: Eh... sip.

Ravn: Dejar el jabón en la bañera.

Leedo: Eh... nop, ese fuiste tú.|__ nuevamente sonrió.

Ravn: La gente tenía razón, son como una versión de Chockye.|__ se dio la vuelta para ignorar a Geon Hak.

Leedo: Con la excepción de que no he asesinado a nadie.|__ sonrió incrédulo, de alguna manera le empezó a gustar la idea de que Hakkie este vivo.
--- Eso lo sé, por que una vez invitaste a tu molesto amigo y otros chicos a casa a ver películas, y terminaron viendo esa especialmente, después creiste que podía observarte.

YoungJo encarnó una ceja, claramente  la respuesta era obvia.

Leedo: Ok, si lo hacía.|__ le pareció adorable ver ese puchero.

La vida se encarga de hacerte buenas y malas jugadas, en ocasiones tiende a darte la más grande sorpresa.