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Luego de la directa confesión a Seungmin,Changbin no hizo más que ir a caminar al parque para no ponerse a llorar en plena calle,y no es que sea débil o muy sentimental,simplemente nada le estaba saliendo como quería en esa semana. Se había sentado en uno de los cuantos bancos que suelen instalarse en el lugar,para poder aclarar su mente y calcular los siguientes pasos a realizar para poder ser correspondido,sin embargo,se vio interrumpido a sí mismo ya que a lo lejos divisó una cabellera conocida. Era Felix,quien extrañamente se encontraba en la zona de juegos con algunos niños,eran alrededor de diez y todos estaban sentados en ronda atentos a lo que el mayor les estaba diciendo. Una imagen bastante tierna a los ojos de Seo,aunque aún le parecía algo desconcertante encontrar a su amigo allí,nunca había mencionado algo sobre ello.

Uno...dos...¡tres!,vociferó en voz alta Felix y todos los pequeños salieron corriendo alrededor del sitio a encontrar diferentes y estratégicos escondites mientras que el mayor entre todos ellos disponía a cubrir sus ojos y seguir contando. Luego de unos segundos empezó la búsqueda tras los infantes,fingía tardar algún tiempo para no hacerlos sentir mal y volver el juego un poco más divertido para ellos. Sin duda era un buen momento digno de apreciación,tan solo observar las dulces expresiones en el rostro del muchacho y las revoltosas pero contagiantes risas de los niños.

Una vez acabado el juego,Felix dejó a los chiquillos entretenidos en el sector de los columpios,toboganes y demás,solo para ir corriendo hasta Seo Changbin,quien desde ya hace rato se mantenía observándolo.

---Hey...---dijo en forma de saludo.

---Ah,eh,yo...lo siento,¡Hola!---respondió alterado ya que estuvo bastante distraído por un largo tiempo,tanto que se había teletransportado a su propio mundo y de la nada había vuelto a la Tierra.

---¿Estás bien?---preguntó el pecoso un poco preocupado.

---Sí,es solo que me tomaste desprevenido---murmuró seguido de una ligera risa---¿No sabía que te gustaba jugar con los niños?,¿Vienes muy seguido?---lanzó de repente.

---Sí,hace no mucho me encontré en una situación algo graciosa en la que ellos están involucrados,desde esa vez me pidieron volver a vernos,entonces les propuse ciertos días de la semana aquí en el parque. Aunque jugar con ellos a veces es algo estresante a la vez es muy divertido.---relató mientras mantenía su mirada fija hacia los columpios---¿Y tú?,no sueles deambular muy seguido por aquí,al menos no que yo sepa.

---La cosa es que...---dejó suspendidas sus palabras en el aire---larga historia,¿quieres venir a comer?---propuso de la nada.

---Está...bien(?)---respondió no muy seguro. Que su amigo tratara de evadir la pregunta le parecía raro y más aún su extraña forma de actuar,preguntas como qué hizo,qué le hicieron o qué sucedió exactamente,le invadían en la mente. Conocía a Changbin desde hace ya unos años,pero eso no importa,podría conocerlo de solo días y notar que esa no era para nada la usual actitud del chico y que realmente algo estaba pasando con él,pero decidió guardarse todo para más tarde,si él aún no estaba listo para contarlo era mejor no llenarlo con más presión.

Habían emprendido una caminata hasta la parada de autobuses,no quedaba tan lejos,apenas unas dos cuadras,sin embargo,para el pecoso el trayecto fue de unos dos kilómetros sin exagerar. El silencio lo carcomía por dentro y las ganas de averiguar porqué Changbin se limitaba a permanecer con la boca cerrada,se acrecentaba más. Al llegar a la parada sintió volver a respirar y como la sangre volvía a su curso normal,solo él sabía cuánto se aguantó el no abrir la boca para cometer una estupidez. Afortunadamente,en cuanto llegaron el bus se hacía ver a unos cuantos metros,pero su buena suerte acabó allí ya que el vehículo,por primera y única vez,yacía sobrecargado de pasajeros sin ningún asiento libre para ser ocupado.

Guess What! [BangHan|Chansung]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora