-Sam, es hora –hablo Caleb llegando con los chicos a donde estaba.
-Bien –miré la hora –comenzamos en 5 –hablé y él se fue asintiendo --¿estás bien? –le pregunté a Ben, esa herida tiene que dolerle como los mil demonios gracias a Avery.
-Sí –dijo y se puso de pie –creo que moriré de hambre o algo a si –murmuro y solo yo lo escuche.
Jackson Pov:
-Yo también, pero tenemos reunión, así que... camina –dijo Sam arrastrándolo con ella.
-Sam –Sebas saludo a Sam bostezando, mientras me entregaba a Sol que parecía acababa de despertar –ya la alimenté –me aviso y yo asentí –yo no sé ustedes, pero tengo hambre, así que si quieren ir a la cafetería síganme, si no adiós –hablo comenzando a caminar.
-Es increíble como Sam pelea ¿cierto, chicos? –preguntó Emma sacando tema mientras caminábamos siguiendo a Sebas.
-Claro, es mi hermana –dijo Maicol arrogante.
Samantha Pov:
-Entonces ese es el plan de protección –terminé de explicarles a todos junto a Ben.
- ¿Alguna duda? –preguntó Ben y nadie dijo nada por lo que se dio por terminada la reunión.
Todos se levantaron y se fueron, menos mi pelotón, nosotros siempre creamos un plan que solo el pelotón sabe, es en caso de que haya traidores, solo el pelotón se mantiene al tanto del plan y luego de que se crea queda totalmente prohibido hablar de él, a menos de que llegue la hora de utilizarlo.
-Creo que aquí no es un buen lugar –comento Avery mirando los alrededores con desconfianza.
-Exacto, hablaremos en mi casa –dije Sam y nos levantamos –tengo hambre –me queje en un grito haciendo sobresaltar a todos menos a Ben.
-Yo también –grito Ben y yo de un brinco me subí a su espalda y el comenzó a correr a la cafetería, los chicos nos veían divertidos.
En la cafetería todos dejaron de hacer lo que hacían para ver a 2 moribundos sucios y corriendo al recibidor, diría que hasta damos miedo.
Cuando llegamos yo salté de la espalda de Ben y me puse en la fila delante de él sacándole la lengua, cuando me giré Miranda, la encargada de la cocina me miraba divertida.
- ¿Qué vas a querer? –preguntó.
-De todo –dije segura, ya para nadie aquí es raro verme comer mucho, ella me sonrió y me paso mi bandeja con comida.
-Lo mismo que ella –dijo Ben cuando miranda le preguntó que comería.
Miré la cafetería y me encontré con mi familia en una mesa alejada del resto, tenían 2 mesas juntas, por lo que había espacio para mí y los chicos, cuando Ben llego a mi lado le señale la mesa y nos dirigimos a ella, sí que buenos amigos somos, dejamos a los otros abandonados.
-Volví –chillé sentándome, no sé porque, pero de solo ver mi comida mi sonrisa crecía.
Ben y yo nos pusimos a comer ignorando las miradas de todos.
-Se siente como si no hubiese comido nada en el día entero –dije mirando el plato que orgullosamente estaba vació.
-Eso es porque no has comido nada hasta ahora –dijo mi papá.
-Ohh, cierto –asentí y de pronto alguien me dio un zape y luego otro --¿y eso porque fue? –miré mal a Ben.
-Te dije que la comida es lo más importante ¿Cómo que no habías comido nada? –murmuro Ben ofendido –me deshonras hermanita, se supone que primero tienes que pensar en la comida y luego en todo lo demás –terminó de hablar y Alexa quien se sentó a su lado le dio un zape.
-Amor, que tu ames la comida, no significa que ella lo tenga que hacer –habló Alexa y le dio otro zape y yo solté una carcajada –tú no te rías –me señalo y yo paré mordiéndome para aguantar una carcajada, pero fallé.
-Es que te vez tan tierna enojada –dije limpiándome las lágrimas –nadie imaginaria que debajo de esa fachada se esconde una fierecita –murmuré y ben estallo a carcajadas.
-Sí tiene razón –dijo Ben apretujándole los cachetes a Alexa.
-Aww, se ven tan tiernos –chilló Avery mirándolos, luego me miró y estallamos a carcajadas –Ben, amor ¿estás bien? ¿te duele algo? ¿quieres ir a la enfermería? –preguntó imitando a Alexa y agarrando mis manos.
-No, cariño, estoy bien, solo fue un rasguño, yo soy fuerte, mira toca –dije mostrándoles mis "músculos" –vamos toca –la anime y ella me siguió la corriente.
-Wow, eres muy fuerte Ben y estas tonificado –dijo siguiendo, imitando a Alexa, se mordió el labio con deseo y me miro.
-Y eso que no has visto mi trasero, nena –dije imitando a Ben guiñándole el ojo --¿quieres tocar? –pregunté y me iba a levantar, pero ella no me lo permitió.
-Ben por Dios, hay más personas presentes –murmuro Avery fingiendo estar avergonzada.
-No me importaría nena –hablé coqueta.
Avery y yo nos miramos y estallamos a carcajadas al igual que todos los presentes, excepto Ben y Alexa, que se enojaron.
-No es gracioso –dijo Alexa enojada y nosotros nos reímos más fuerte.
-No les hagas caso corazoncito, solo nos tienen envidia –dijo Ben y todos dejaron de reír excepto Avery y yo, que al contrario nos reímos más fuerte, hasta llorando.
-Ni que fueran lo más lindo del mundo –dijo secándose las lágrimas –además yo soy más del team SamJack –habló guiñándome un ojo.
- ¿SamJack? –preguntó Maicol confundido.
-Samantha + Jackson = a SamJack --dijo con cara de obviedad, se escuchó un ahhh, de parte de todos.
-Siento que olvido algo –dije llamando la atención de todos.
Miré mi celular y vi que duramos 3 horas en la reunión, 3 horas más las 2 de entrenamiento son 5 horas, sin contar las otras 2 que duramos en la primera reunión entonces son 7 horas, ¡7 horas! Maldición como pude olvidarme de eso, tomé mi teléfono y marqué rápidamente a Javier, pero me mandaba al buzón, intenté unas 7 veces más y sucedía lo mismo, creo que mi cara de pánico se notó a kilómetros.
-Sam ¿Qué sucede? –preguntó mi papá.
-Javier, Sarah y mamá debían de estar aquí hace 7 horas –dije levantándome de repente, los chicos también lo hicieron –necesito la ubicación de Javier, el informé de su misión y traten de contactarse con él y los agentes que lo acompañaban –dije enojada y los chicos se fueron, las chicas no –es hora de irse, escolten a mi familia a mi casa y no se muevan de ahí, que no se queden solos, las quiero –les susurre solo para que ellas los escucharan y me dirigí al cuarto de armas, sé que algo no está bien, y matare a todo el que se atreva a tocar a mi mamá, Sarah o Javier.
Jorge Pov:
Vi como mi hija daba órdenes y luego se iba, pero las 3 chicas mas no se movieron y ahora estaban serias, no había ningún rastro de diversión.
-Es hora de irnos –dijo Abigail seria.
Un soldado llego y miró a las chicas.
-La Teniente Adams les manda esto –dijo dándole a cada una metralleta y una pistola.
Las chicas las tomaron, unas de ellas, se fue, ahora solo quedaban 2 y nos escoltaron hasta afuera donde nos esperaban 2 camionetas con choferes, el grupo de dividió y se montaron en ambas camionetas, cada chica se montó en una y nos dirigimos a la casa.
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EMPRESARIA Y MILITAR
Novela Juvenileste libro es la continuación de, La nerd militar. ................................. La muerte es un castigo para algunos, para otros un regalo, y para muchos un favor... y yo, Logan, definitivamente te concedere ese favor, aunque no lo quieras, ni...