El inquietante retumbar de los dedos ansiosos contra la mesa comenzaba a irritarle pero no se atrevió a mencionar nada, solo se limitaba a observar al chico que era un manojo de nervios frente suyo, ni siquiera era capaz de levantar la vista hacía él, solo habían tomado asiento y este agachó de inmediato la mirada, como si no quisiera confrontar la situación actual y eso a Shisui le molestaba aún más, su mentira fue cruel y aún así tenía el cinismo de guardarse las cosas ahora por temor a ser valiente aunque sea una vez en la vida o eso pensaba el pelinegro que no encontraba las palabras adecuadas para que el otro no se desmaya ahí mismo del nervio, incluso percibía los leves temblores que lo sobresaltaba cada que sus ojos rojos se posaban sobre su figura intentando descifrar en qué pensaba.
Finalmente luego de varios minutos de eterno silencio, se decide a actuar, bufando con pesadez y revoloteando los ojos mientras extrae un frasco de su bolsillo del pantalón, cogiendo una pastilla del frasco para estirarla al pelilargo que en un movimiento lento levanta la mirada aún con la pena implantada en los ojos, temblando del labio inferior.
- Tómala, es un calmante - habla con voz pacífica, necesitaba respuestas y no obtendría nada teniendo a Itachi a punto de tener un colapso -
- Gracias... - apenas y logra escuchar la respuesta, poco más bajo y sería algo ininteligible -
Coge la pastilla con la mano aún temblando fuertemente, sintiendo un calor en las mejillas en cuanto sus dedos hacen contacto con la palma de Shisui, incluso hubiese soltado un jadeo de no ser porque a tiempo logró morder su labio inferior para evitar que cualquier sonido se emitiera.
Una vez que se toma el medicamento, ensaya bien lo que dirá, no sabía ni como empezar y es que tener esos ojos carmesí escrutándolo no le ayudaban en nada a calmar su ansiedad, sentía que las palmas de la mano le picaban, los ojos se le cristalizaban cuando hacía el mínimo esfuerzo por emitir alguna palabra que jamás salía por el nudo que tenía atorado en la garganta. A esto sumando que de vez en cuando el ojirojo volteaba a ver ocasionalmente al pequeño a lado suyo que estaba distraído completamente en el celular del pelilargo, viendo algún video musical infantil.
Deja escapar una ligera exhalación, respirando con un poco más de normalidad, al parecer los efectos de la pastilla estaban funcionando, al menos ya no sentía tanta presión en el pecho o la falta de aire al intentar articular cualquier palabra.
Voltea hacía Shisui que tenía la mirada clavada en el niño, sin ninguna expresión de momento, solamente limitándose a observar y analizar al pequeño que estaba absorto de lo que sucedía entre ambos adultos.
- ¿Como se llama? -
La pregunta sale con tanta tranquilidad, sin ese tono de exigencia que se habría imaginado o con signos de enojo que casi le hacen abrir la boca de par en par por la impresión
Inhala y exhala en un intento por conseguir hablar sin que se le quiebre la voz, acariciando los cabellos de su niño, viéndolo entretenido con el celular, al menos su pequeño le transmitía una paz que le reconfortaba y hacía poder responder aunque fuera sin mirar directamente al pelinegro que esperaba impaciente su respuesta.
- Hiro - susurra sin dejar de acomodar los cabellitos negros -
El niño alza la mirada, viendo al pelinegro y a Itachi, finalmente balbuceando algo ininteligible al pelilargo que solo deja un dulce beso en la frente de este para dejarle seguir viendo su teléfono
- ¿Aún no sabe hablar? - arque una ceja viendo el sonrojo en las mejillas del otro que al instante vuelve a bajar la mirada -
- No - juguetea con los dedos de la mano, haciendo una mueca entristecida - lo he llevado al pediatra y dicen que pronto lo hará, solo debo pasar más tiempo ensayando con él -
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Melodías a nuestro nombre
FanfictionParte II Triste, lúgubre, la vida de Itachi parecía volver a tornarse oscura después de su ruptura con Shisui. Los días pasaban como pesadillas a su alrededor mientras que su corazón intentaba inútilmente recuperarse, su cabeza lo atormentaba con e...