Capítulo 02

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Cuando llegué a la oficina vi a una chica de cabello rubio sentada frente al escritorio.

—Señorita Collins, tome asiento por favor —la directora señaló la silla.

Comencé a caminar confundida tratando de descifrar lo que podía ser.

—El profesor Hamilton dijo que quería verme —dije mientras me sentaba.

—¿Qué tal va todo?, ¿Te encuentras bien?

Y ahí estaba ese tono de lástima y preocupación que me tenía harta.

Nunca he entendido la lógica de la gente, por lo general dejar el pasado atrás es difícil, normalmente las personas buscan de alguna manera olvidar todo para seguir adelante. A lo que me refiero es a por qué preguntar "Te encuentras bien" si con esas simples palabras haces que recuerde todo por lo que anteriormente estuvo mal, y si una parte se había olvidado. Felicidades hiciste todo lo contrario a hacerlo sentir bien.

—Estoy bien. —Solté cortante y rápido fingiendo una sonrisa.

Cruzamos miradas sin saber que decir por un instante.

—Le presento a Katte Sartori.

Me volví hacia la chica sentada a un lado de mí dedicándole una sonrisa.

Ella regresó el gesto.

—Es nueva en la ciudad, acaba de ingresar a la institución por lo que no conoce nada, ¿me ayudarías a enseñarle la escuela y apoyarla en lo que necesite?

—Claro —voltee hacia donde se encontraba la rubia—. Será un placer ser tu guía.

Mentir se me da bien.

—¡Perfecto! —la señora Mikaelson me tendió una hoja de papel—, aquí está su horario, puedes llevarla a su primera clase.

Que divertida manera de empezar el día.

Empezamos a caminar a la puerta. Saliendo de la oficina me dispuse a enseñarle lo que debía saber.

—Este es el edificio principal, por ese pasillo llegas a la biblioteca, por allá está la cafetería y a tu derecha los baños.

—Wow, sí que es grande la escuela —la chica abrió los ojos sorprendida— mi antigua escuela solo contaba con un edificio y una mini cafetería, aquí podría perderme cambiando de un salón a otro.

—¿Acaso cabían en tu escuela?

Decidí bromear un poco.

—Sorprendentemente si, aunque ni siquiera yo sé cómo lo hacíamos, la escuela completa cabría en la cafetería y eso es mucho —respondió sonriente.

—Sí que era pequeña entonces...... ¿Cuál es la ciudad que tiene la escuela más pequeña del mundo? —pregunté curiosa.

—De dónde es el mejor equipo de fútbol americano, Pittsburgh.

Me quedé sorprendida ante su respuesta.

—Nunca pensé que una chica de tu apariencia conociera de fútbol.

Las palabras salieron de mi boca sin pensar.

—¿Chica de mi apariencia? —enarco las cejas—. ¿A qué te refieres?

En serio Hannah, ¿no puedes quedarte callada por un instante y no decir todo lo que piensas?

—Ehh...sí ya sabes, como te vistes, el maquillaje y los coqueteos hacia los chicos —señale a los chicos parados detrás— ¿creíste que no me daba cuenta de las miradas con ellos?

Una De EllosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora