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Aclaraciones antes de comenzar, hay muchas canciones en toda la historia. Les dejo la lista al final por si no las conocen y quieren oirlas mientras leen. 

"Asi-" - seran pensamientos

Asi - seran recuerdos

"Asi" - sera letra de cancion

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Los años han pasado para Vlad cual rio fluyendo a toda velocidad hasta su cauce. Después de ver sus vidas escurrirse por sus manos, lenta y dolorosamente gran parte de el murió con ellas, con cada una de ellas murió una parte de su ser, de su esperanza por un mundo mejor, de su anhelo por un futuro donde ellos pudieran encajar y quizás hasta relacionarse con los humanos sin que les teman. Un mundo donde ellos sean algo más que alimento para todo hijo de la noche, ese era el camino que sus existencias estaban tomando, ese era el futuro que ella había querido lograr, cansada de esconderse en la oscuridad ocultando en realidad quien era. Ella quería mostrarse ante el mundo como su compañera, una tan diferente a él mismo, una relación tan prohibida y toxica, pero tan hermosa y completa, como solo la relación de un Alfa y su Luna puede ser. Una Luna vampiro.

Por más que él intentara convencerla de que el revelarse al mundo sería un suicidio masivo para toda su raza, nunca lo escucho. Su relación con el profesor Van Hellsing cambio mucho en la forma que ella veía el mundo, él siempre supo lo que eran, pero supo tratarlos como seres civilizados, no los monstruos sedientos de sangre que pinta el folklore. Ella con su importante puesto en el consejo europeo logro el apoyo de una gran parte de sus iguales, logro la abolición del yugo de los aristócratas hacia los lobos. Arriesgo todo para que sus hijas pudieran ser llamadas Ladies y el pudiera ser un Lord, que pudiera tener propiedad y no estar bajo el hombre Phantomhive nunca más. Claro que esto ayudo a toda su manada, pero su motor fueron ellos, siempre lo fueron.

Es por eso que, para él, es imposible olvidarla, esos enormes ojos verdes, esa sonrisa adornada con dos grandes gotas blancas invertidas, tan mordaz como frágil. Verla a ella en su cabeza era ver el vivo reflejo de sus hijas, tan similares como diferentes. Una más mortal que la otra, una más racional que la otra, tan parecidas a ellos, pero tan diferentes al mismo tiempo.

Sumergido en sus sueños lejanos, de un pasado mejor, más sencillo, más feliz. Hasta que alguien grita su nombre haciéndole reaccionar. Se vio a si mismo frente a una estufa prendida, su mano estaba sobre el fuego, desde que las perdió busca cualquier "accidente" para reunirse con ellas, pero no es lo que Kat hubiera querido, su sueño se logró, y como su esposo es su deber llevar su estandarte.

- El filete Rosso! La mesa 9 espera – grito el jefe de cocina. Retiró la mano del fuego viéndola roja, pero sin estar quemada, al menos no de manera grave. Rápidamente se encarga del platillo para dejarlo en la barra caliente.

Dos t-bones término medio, el ver la carne tan jugosa trae tantos recuerdos a su cabeza. Sujetando aun el plato, sostuvo de el ligeramente cuando intentaron tomarlo de sus manos y gruño con suavidad mostrando los dientes. La expresión de miedo del mesero del otro lado, provoca que la cocina se llene de sus risas antes de volver a su estación.

– Maldita sea Rosso, ¡no es gracioso! – grita abriendo la puerta en dirección al restaurante. Si ellos saben quien es, el sueño de Kat se cumplio, parcialmente.

Los humanos jamás aceptaron que no están en la cabeza de la cadena alimenticia, y no hay como culparlos. Yo también temería si hubiera alguien por encima de mí. Pero al ser una de las criaturas más fuertes del Lore, no hay mucho de que preocuparse.

Dejo su manada, el saber que había perdido a tu familia, el ver la lastima en los rostros de todos, no era algo que pudiera soportar, no más. Esa compasión con que era tratado, humillaba a su bestia. Era preferible dejarle el cargo a su Beta, algún día regresaría. "Cuando los cerdos vuelen...-"

Siempre a tu ladoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora