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El lobo había dicho que no faltaba mucho para llegar, que después de la curva delante de ellos podría ver la muralla. Ella apenas podía girarse para verlo mientras que él se dedicaba a besar su mano, a besar cada uno de dedos, siempre manteniendo el contacto con ella. Al parecer era muy importante para ellos. Y sin importar lo avergonzada que se sintiera, la sensación se desvaneció al pensar que así sería su vida, despertaría al lado de este Dios lobuno, que le daría los “buenos días” de la manera más exquisita posible. Y las buenas tardes…y las buenas noches, envueltos entre sábanas blancas. Y no podía quejarse, -quien podría- pero…apenas lo conocía, no quería que él pensar que eso era natural para ella, acostarse con alguien en las primeras cuarentaiocho horas. Pero él no era solo “alguien”, era su compañero, su compañero por la eternidad. O lo que sea.

-          Mira, ahí está, el Glenrial –señalo con la barbilla hacia adelante. Su voz la saco de su estupor, de la profundidad de sus pensamientos. Dentro de los árboles se descubrió una muralla, una barrera altísima que los mantenía a salvo de ataques. Ya que según él. No era nada para un lobo enojado. Al parecer la muralla servía más que nada para humanos curiosos que se adentraran de más en el bosque. La amenaza de una bestia levantándose, era demasiado para que los miembros de la noche respetaran los limites, la mayor parte del tiempo.

Era extensa, más que lo que podía ver, perdiéndose entre los árboles y la oscuridad, con puntos de vigilancia cada tanto, y guardias caminando de un lado a otro atentos a los movimientos del bosque. Se acercaron a un portón de acero sólido, toda la estructura parecía ser de acero, impidiendo ver hacia el interior por alguna rendija o unión entre los paneles. Se detuvieron esperando unos segundos antes de que la compuerta bajara dejándolos pasar.

Y los vio. Por primera vez los vio, lo que pensaba que solo era un mito, una lectura para relajarse y dejar su mente volar. Todo eso estaba aquí, un mundo nuevo revelándose ante ella. Todos los hombres altos, y de un aspecto muy similar al de Vlad, y las mujeres...-pff- su autoestima empezó a ser golpeada con fuerza, derribándola poco a poco con cada visión. Rubias en su mayoría, algunas castañas, por sus cuerpos y porte al caminar, podía decir que todos, y cada uno de ellos estaba en alerta, en espera del ataque enemigo, pero sus rostros, sus sonrisas le evidenciaba que no más, que deseaban y querían esta paz. Niños corriendo de un lado a otro, niños pequeños, jugando entre ellos, con sus padres.

Al inspeccionar el resto de lugar mientras avanzaban lentamente pudo ver que la mayoría de las casas parecían pabellones de cacería, en la mayoría todas eran de madera y muy grandes, apostaba que por lo menos deberían tener tres habitaciones. Al fondo pudo ver un campo con pasto, y por las dimensiones era obvio que era utilizado con fines recreativos, cerca de él, una zona techada con mesas de picnic y un enorme asador.

-          “All my friends are heathens, take it slow” – murmuro la canción tema de la película Suicide Squad haciendo que el lobo lanzara una risa al aire llamando la atención de los que pasaban cerca de ellos. Habían bajado los vidrios de la SUV para dejarle ver mejor su hogar. -“Wait for them to ask who you know” – lanzo un silbido al aire al ver que se detenía ante la “casa” más grande del lugar, una mansión!

-          No tienes ni una idea de lo cerca que estas – se burló a la vez que bajaba y tomaba su maleta, antes de abrirle la puerta a su compañera.

-          “Please don´t make any sudden moves” –inspiro profundo intentando tomar valor. Mientras rodeaba el vehículo esperando que él se acercara.

-          Somos tu manada ahora, nadie te hará daño, porque para eso tendrán que pasar por encima de mí, y nadie pasa por encima del alfa de este clan. – curvando un dedo debajo de su barbilla la hizo verlo hacia arriba. –Relájate, eres todo lo que yo esperaba, y pensé que jamás podría tener –inclinándose lentamente, besos sus labios, sujetándola posesiva por la cintura acercándola a él, solos unos segundos infundiéndole valor.

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⏰ Última actualización: Jun 01, 2021 ⏰

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