El regreso al reino de Dulce fue tranquilo, como si no hubiesen salido del reino. Los Park dieron la bienvenida a su país con cientos de reporteros fotografiando el descenso del avión, flashes por doquier.
Aun con la ayuda de los guardias, los paparazzi buscaban la forma de tomar los mejores ángulos de la familia imperial. El bombardeo de preguntas eran hechas, hacia el monarca, el cual respondía las que fueran más necesarias.
Todo salió bien. Fueron bien recibidos.
Park TaeHyun sabe que está a salvo, se encuentra en un lugar en el que es difícil dañarle, tanto a él, como a su reino. La probabilidad de un ataque a su país es muy baja, por no decir imposible.
El monarca tiene asuntos que atender, el parlamento ha sido puesto al tanto de lo que acontece en los reinos a la redonda, a estas alturas inclusive el mismísimo concejo debería de saberlo, más nada pueden hacer, no está en sus manos la decisión que se tome para aminorar los daños.
Con la consorte de ayuda, TaeHyun puede mantenerse calmado, sin olvidar qué gran parte se debe a su animal, aquella pantera de un color tan oscuro que parece no tener comparación alguna, su felino es simplemente impredecible.
Por ahora todo marcha en orden. Siendo el día uno de cuando se firmó la alianza es más que seguro que tendrá por lo menos un par de semanas tranquilas.
La noche anterior durmió poco, se mantuvo con los ojos abiertos por casi toda la noche, dormir en un castillo ajeno, se sintió extraño, sin obviar el hecho de que en más de una ocasión por su mente pasó el ser asesinado mientras dormía, no es un secreto que más de una nación quiere ver muerto al rey Park, al tener bajo su poder países que son grandes exportadores de alimentos es sumamente predecible que más de un enemigo debe tener.
Específicamente cuando a la luz salió lo que paga de impuestos cada monarca, siendo el mismo que el de países vecinos, externos al cuadrado.
Park sabe lo que hace, al ser —prácticamente— sus tierras, sabe lo que más le conviene y en donde debe invertir. Así como él exporta alimentos, el reino de Picante es el exportador de combustible, una idea realmente estúpida es siquiera pensar en abandonar el cuadrado, no solo por la seguridad y abastecimiento, se trata de principios.
—¿Qué es lo que circula en las noticias?— pregunta, lee breve un par de papeles que tiene a un costado.
—La magnífica entrada al bajar del avión. Se susurra que somos una dinastía, una con poder— SoMin ríe.
—Que el pueblo confíe en nosotros nos asegura que pese a la situación que se está viviendo aún creen en una solución, no planearían derrocarnos, por lo menos no ahora— ha estado intentando ser un buen rey, lo logró con mucho esfuerzo, pero posibilidades hay muchas, y él debe estar preparado para cada una de ellas.
—JiMin debe regresar al internado— la fémina informa —. Sus días libres han acabado, no quiero dejar ir a mi bebé— dice con pesar.
—Por cómo están las cosas, lo mejor es que tenga una educación igual de buena que su hermano, segundogénito o no, ahora hay más certeza de que querrán deshacerse de SeokJin.
ESTÁS LEYENDO
Reino Amargo «Yoonmin»
FanfictionEl heredero a la corona finalmente ha crecido, la espera valió totalmente la pena y quien opine lo contrario merece ser ejecutado. La corona prontamente será cedida y por ello es que la búsqueda del consorte ideal para el príncipe ha empezado, y na...