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Dentro de casa de Gilbert estábamos sentados en a sillas del comedor, tenia una manta sobre mis hombros y la mirada de Gilbert sobre mi, yo solo me dedicaba a mirar el fuego.

- ¿Que sucedió? - me pregunto el

- Yo... peleé con mi padre - lo mire a los ojos y tenia una ceja arriba - el quiere que me case, pronto, pero yo no quiero.

- ¿No planeas casarte?

- No ahora, en un futuro algo lejano tal vez, pero no casi cumpliendo 14. Además de que mencione a... - suspire

- Si no quieres decirlo esta bien.

- No, necesito hablarlo, - lo mire a los ojos - no puedo quedarme callada sobre esto. - el me brindo una sonrisa cálida.

- Emily - comencé a hablar mientras el se sentaba frente a mi - ella era mi hermana, falleció hace dos años

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- Emily - comencé a hablar mientras el se sentaba frente a mi - ella era mi hermana, falleció hace dos años. Mi padre, constantemente le insistia en el matrimonio, igual que a mi, solo que ella si se caso, eso fue lo que la arrastro a... - mi voz se empezaba a quebrar, no sabia que me pasaba, nunca solia ser asi, no era expresiva asi en publico, o en lugares que no fueran con mi madre o Jason.

Gilbert se dio cuenta de esto y se sento a mi lado.

- ¿Puedo... abrazarte? - Lo voltee a ver con lagrimas en los ojos y solo pase mis brazos por su cintura, sollozando mientras el acariciaba mi cabeza.

El silencio invadio la habitación, solo el fuego de la chimenea alumbraba la habitación.

Me separe de el y me seque las lagrimas.

- Escucha, si no quieres seguir contando, esta bien...

- Lo siento es que... no es facil.

- Puedo imaginarlo.

- Yo lamento venir aqui e interrumpir - dije levantandome mientras me quitaba la cobija de mis hombros - me ire a casa, aun no es tarde - mire por la ventana y era cierto, el sol estaba por ponerse.

Me dirigí a la puerta con Gilbert detras de mi.

- _______ - me hizo voltear y mirarlo, se quedo mirandome hasta que parecio reaccionar - lleva esto - me dio el sueter gris que traia puesto, se lo había quitado cuando entramos - hace frio.

Lo tome con mis manos y me lo puse sobre el vestido.

- Gracias Gilbert, supongo que nos vemos luego, no en la escuela.

- Adios ______

Me di la vuelta y comencé a caminar a casa, ahí fue cuando reflexione.

¿Que haré llegando ahí? Mi padre no querra ni verme a la cara, y no puedo ver a mi mama a la suya luego de lo que paso.

En menos de lo que imagine ya estaba enfrente de la puerta de mi casa.

Empuje la manija y entre a casa, lo primero que vi fue a mi madre sentada en el sofa frente a mi hermano.

- Dios ______ - se acerco a mi y me abrazo, parecia que había llorado - ¿Donde estabas?

- Solo sali un poco, necesitaba estar sola 

- Estaba preocupada por ti.

- Lo siento madre, si me permites ire a la biblioteca.

Camine rumbo a aquel lugar y entre, tome un libro y me sente en uno de los sofas del lugar.

Mientras leia tocaron la puerta, era Jason.

- Hola ¿Puedo pasar? - solo asenti con la cabeza y segui con mi lectura

El se sento frente a mi y al ver que no le hacia caso, quito el libro de mis manos, lo que provoco que lo mirara a la cara.

- Oye que...

- Papa se fue - solto de repente.

- ¿Que?

- Dijo que se iría unas semanas para...

- ¿Para que? - el no hablaba - Jason para que...

- Fue a Charlottetown a conseguirte un esposo.

Me tumbe en el sofa, pero esta vez no estaba triste, estaba enojada.

Necesitaba hablar de este tema con alguien, y conocia a la persona indicada, y esta vez, no es Gilbert.

Necesitaba hablar de este tema con alguien, y conocia a la persona indicada, y esta vez, no es Gilbert

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Al día siguiente fui a la escuela y me sente con las chicas y comenzamos a hablar.

Al parecer a Anne le había llegado al regla y no sabia que era o porque pasaba, entonces ese fue el tema de conversacion del día.

Ese día Gilbert si asistio a la escuela, al parecer era el ultimo.

Le preguntaron unas cuantas cosas las cuales respondió correctamente, como de costumbre. Sin embargo, lo extraño fue que Anne no pudo contestar, creo que se debía a que se sentia algo mal.

Y la entiendo, la regla es espantosa.

Regresamos a casa y decidí que necesitaba hablar con Anne lo mas pronto posible.

OTRO CABELLO DE FUEGO | Gilbert BlyhteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora