Los días habían pasado de manera rápida, aun no me había instalado en mi nuevo departamento.
Por razones obvias no lo había hecho y unas de esas razones era el estúpido y molesto Gerard Way.
Después de tanto pensarlo, levante mi trasero del sofá, estaba decidido a enfrentarlo.
Además parte del departamento seria MIO por lo que no debía temerle.
Me encontraba en la misma puerta de madera, estaba a punto de darme la vuelta e irme de donde vine.
Pero para mi muy mala suerte la puerta se abrió, dejando a mi vista al hermoso e irritante Gerard Way.
-Que grata sorpresa -
Odiaba su sarcasmo, de alguna manera me molestaba.
-Estemm... Yo preguntaba cuando podría instalarme en MI departamento -
Dije recalcando la palabra "MI" de "MIO" Por si no le quedaba claro.
-Cuando quieras -
Esas palabras las había escuchado la ultima vez...
-Bien, lo haré AHORA -
Mi voz era decidida y llena de valor.
-Okay -
Dijo saliendo por la puerta, arrojando detrás de el, las llaves, afortunadamente las logre tomar entre mis dedos.
Mi habitación había quedado ordenada, la ropa estaba en sus respectivos cajones, los libros acomodados en el pequeño librero. Todo estaba en orden.
Curiosamente le di un vistazo a la habitación de Gerard, que se encontraba a lado de la mía.
Como lo había imaginado, todo estaba desordenada, había ropa por doquier y hojas esparcidas en el escritorio de la habitación.
Tome entre mis manos las hojas, en ellas habían dibujos, unos hermosos y otro pésimamente extraños y feos.
-¿Que haces aquí? -
Se escucho una voz detrás mio. Era de Gerard.
-Y-yo... -
Tragaba saliva, había violado la regla numero 1 de Gerard.
-¿Tu que? -
Pregunto serio.
-Yo.. Lo siento -
No había encontrado una excusa creíble, así que solo opte por disculparme y salir de su habitación.
Por fortuna la puerta estaba aún abierta. Me había arrepentido de haber invadido el espacio personal de Gerard.
Me encontraba recostado en mi cama, pensado en... Gerard... malditos pensamientos
Tal vez si el no fuera tan grosero y egoísta yo ... Me enamoraría de el...Pero que cosas digo... no puedo ser tan estúpido ¿o si?
Escuche que llamaban a la puerta, no me tome la molestia de levantarme, así que me quede en mi misma posición.
Aquella voz era chillante y de alguna manera me causaba estrés...Me levante de la cama, abriendo poco la puerta.
-Gerard lindo... ¡Ya! Me haces cosquillas -
Decía la chica con voz chillante.
-Lindsey linda - Pronunciaba Gerard, besando el pálido cuello de aquella chica. Al parecer el idiota de Gerard noto mi presencia
-¡Enano! -
Aprovechaba cada momento para insultarme y molestarme.
Idiota "pensé"
-Lynz hermosa te presento a Frank, ¡el enano! -dijo riendo.
-Un gusto Franki -contesto sonriendo.
Solo me limite a sonreirle a la chica de cabellos rubios.
-Di algo idiota -
Bien Gerard se estaba ganando una paliza de mi parte.
No dije nada. Yo no tenia nada que decir. ¡Nada!
-Lynz, hermosa te llamo luego -
Dijo Gerard sacando a la chica del departamento
-P-pero Gerard Bonito -
Cerró la puerta dejando con las palabras en la boca a la chica.
"Que educado" pensé.
Jugaba con el aro de mi labio inferior.
-¿Puedes dejar de hacer eso? Me molesta.-Dijo fulminándome con la mirada.
-Bueno -
Conteste restándole importancia y caminando a mi habitación.
Sentí unas manos en mis brazos, rosandome la piel. Un aliento suave y entrecortado detrás de mi. Un delicioso y embriagante aroma a perfume, mis fosas nasales disfrutaban de el. Mordí mi labio, mi piel se erizó.
Una melodiosa voz susurró a mi oído:
-Eres una molesta presencia enano -
Diciendo aquello, Gerard aparto sus manos de mis brazos, saliendo calmadamente del departamento y riéndose a carcajadas.
Aquellas palabras me enfurecieron.
-¡¡Estúpido Gerard Way!!-
Y cerrando con un portazo, entre a mi habitación.
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¿Amor u odio?
Fanfiction-Eres un imbécil Gerard Way, me largo de aquí - -¡Hey Frank se te olvida alguien! -dijo Way con una sonrisa. -¿Que? -pregunto Anthony confundido. -Yo - -Te amo estúpido - Así era la vida de Frank desde que Way apareció en ella... ¿sera amor u odio?
