Admiración (Pt.3)

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Mil prejuicios y razones aparecían en mi mente como el sol a tus ojos después de estar encerrada en tu habitación todo el día.

¿Estaba lista para escuchar sus razones y terminar decepcionada al imaginarme que el chico frente a mí no era mi admirador? Claro que no estaba preparada, sin embargo, si no lo sé, acabaré peor.

–Bueno... Yo iba a devolverte tu declaración. Ayer tú me lo diste mientras hablabas de él y como te fuiste tan rápido, no noté que aún lo tenía– sonrió de lado y se alborotó el cabello, su precioso cabello azabache.

Si, estaba decepcionada. No podría ser el momento perfecto, pero bueno, yo quería mi romance trágico.

–Yo estaba emocionada por ello pero ya no importa... Creo que tendré más cuidado con mis manos y con mi imaginación–suspiré derrotada– ¿Tú crees que mi admirador se presente?–

–Yo creo que sí... ¿Quiéres buscarlo?– Se levantó con rapidez de la raíz y se acercó más de lo que ya estaba.
Tragué grueso, no podría mentirle a sus bellos ojos, simplemente no podía decirle que a quien esperaba era a él.

Negué– No quiero que me vea en esta situación. Mis pecas resaltan más cuando el carmín de mis pómulos aparece y, como lloré, es mucho peor– Reí incomodamente– ¿Irás dentro? No quiero arruinarte un baile tan bello y maravilloso como éste, recuerda que solo es una vez al año.–

Él negó y tomó mi mano –Tienes unas manos muy pequeñas, eso es lindo– sonrió con nerviosismo, lo sé por la forma en que sus cejas jugeteaban para mantenerse en una posición correcta. Yo no pude evitar reír.

–Marilla dice que por eso puedo hacer una masa exquisita para pasteles y bollos– me encogí de hombros– Aunque, si un chico me desposa, no quiero que sea por mi comida. El que alguien te admiré por tu personalidad y tu mente es... Muy muy bello; la comida no debería de ser un factor importante para escoger al amor de tu vida.–

–¡Qué bueno que tocas ese punto!, considero que una mujer debería de ser vista más allá de su sazón, claro, es un extra pero no considero que sea un requisito, yo podría preparar avena todos los días–

–Eres el primer muchacho que dice eso, estoy muy orgullosa de tí– sonreí de lado a lado y me olvidé de la música lejana y el hecho de que yo tenía un pretendiente desconocido– Tengo que decirte algo...–

Él apretó mi mano, aún no reaccionaba y omití el que la seguía sosteniendo.

–Dime, soy todo oídos– se puso en cunclillas frente a mí; nuestros ojos continuaban viéndose con cierto brillo.

–Yo estaba emocionada porque supuse que tú serías mi admirador. Ahora tengo dudas de que lo seas porque solo querías verme en el rosal para devolverme mi declaración, pero no puede haber alguien más con el cabello azabache y que reciba los bellos comentarios que yo he hecho de tí– Reí por mi declaración tan tonta, suponiendo que mis palabras e imaginación son buenas; en este momento estaba en blanco, me estaba declarando y no he sido romántica, ¡Jane Austen, perdóname! – Estoy completamente segura de que no hay color que me encante más. Sé que suena muy arriesgado de mi parte el que yo te diga esto, tomando en cuenta que nos conocemos desde hace mucho pero, somos mejores amigos y rivales, eso lo vuelve más extraño– solté una carcajada al escuchar mi excusa tan simple – Gilbert, te quiero, no de la manera en que debería querer a un amigo tan bueno como tú pero lo hago. Te quiero como Elizabeth quiere a Darcy o cómo Bash y Mary se quieren. No es necesario que me contestes, no necesito a un hombre para vivir pero me encantaría ser en quién pienses para compartir esas competencias extrañas o para bailar aunque ambos seamos un desastre haciéndolo. Te veo como un igual y no hay nada más bello como lo que le provocas a mi corazón cuando te veo, hablo o discuto algo irracional.– cerré mis ojos para tranquilizar la adrenalina que recorría mis venas y evitar salir corriendo de la situación como era mi costumbre.

No me reconocía en lo absoluto pero aquí estaba, siendole sincera a alguien cuyos sentimientos sobre mí eran muy confusos.

Él parecía mudo, soltó su respiración poco a poco, podía sentirlo temblar por nuestras manos conectadas. Abrí uno de mis ojos para visualizarlo y él ya se estaba riendo, alcé una ceja confundida. Él soltó mi mano para después dirigir su tacto hacia mi mejilla. Ahora yo era la sorprendida.

–Creo que soy un muy mal admirador secreto– se limitó a decir con un tono divertido, se fué acercando a mí hasta juntar nuestras frentes; el viento golpeaba nuestros cabellos y el escalofrío llegó justo en mi espalda.

–Te quiero como tú quieres a Jane Austen o a la luna y su brillo, te quiero como tú quieres tu libertad, porque no hay amor más puro que el que tú sientes por las cosas que te rodean y no hay amor más puro que el que yo siento por tí.–

Sonreí con ojos llorosos al escuchar aquella comparación tan acertada, me había cautivado en mente y alma. Mi corazón había hecho una elección sabia al quererlo.

–Es más lindo de lo que creí, Joven Blythe – concluí acompañada de una gran sonrisa y un beso en su mejilla.

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Me van a odiar pq no he actualizado peeeeero, aquí está la última parte de  éste Three-shot.

Espero les guste y si gustan alguna historia en especial pueden escribirme al privado o dejar un comentario en esta parte.

Los amo por el simple hecho de leerme.

Cuídense mucho, usen Cobrebocas, lávense sus manitas y sigan sus sueños, no dejen que ésta Pandemia acabé con ustedes.

Mis más bellas vibras para ustedes

~Moonbianks ❤️

Chances  [AWAE One shots] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora