Entre las cariñosas alas y la acaudalada muerte [Finalizada]

Capítulo 16: El hombre del sombrero involucrado en una tragedia del pasado. P1.

Antes de iniciar!!!

Perdónenme porqué el capítulo fue un poco más largo de lo habitual (de hecho tuve que cortarlo en 2 partes) pero si borraba partes se le iba a ir la esencia 😅 así que así quedo esto...

Me quedé viendo al peli azul un tanto desconfiado, pero luego saco una toalla y fue a ponermela.
-¿mocoso? -dije molesto-

-lo siento, es la alegria, sube, tenía tantas ganas de verte

-¿qué?, ¿quien eres? -pregunté triste-

-digamos que soy un pariente tuyo

Tuve que aceptar, porque era la única opción para salir de esas hectáreas de bosque.
Me seque lo más que pude y entre al carro, que más que carro, era una camioneta Nice BMW.

Aquel tipo no paraba de verme con esa alegría que tienen los niños al ver un juguete nuevo.
-disculpa, ¿quien eres?, ¿a donde vamos?

Manigoldo me dijo al instante sin perder esa sonrisa:
-mi jefecito, bueno mi padre quiere verte, sinceramente me dijo que te sentía triste y me mando aquí para recogerte

-¿que?, ¿cómo lo supo?

-sinceramente mi padre es una caja de sorpresas, así que te mentiría al decirte algo que ni yo sé

-bueno... gracias Manigoldo

-de nada ma.... este Tenma, Tenma

Desvíe mi vista a la ventana, para dejarme sumergir en mis mil pensamientos.
Al cabo de un rato, Manigoldo me indicó que ya habíamos llegado.
-muy bien, será mejor que te bañes y te recuestes, no queremos que te resfries -dijo al bajarse y abrirme la puerta-

-gracias, aunque no sé donde estamos

-¡ah...!, perdona, estamos en la colonia Narvarte, pero descuida mañana por la mañana te llevare a tu casa

-¡eh...!, bueno muchas gracias

Me indicó el camino hacia adentro de la gran casa, luego me dijo que esperara en la sala, ya que le llamaría a su "jefecito".
Acepte aunque no quise sentarme, honestamente seguía mojado un poco y no quería ensuciar los sillones.

En seguida bajo aquel peli azul de mis sueños, aquel titán llamado Epimeteo. Fue a abrazarme y por mi parte, me quede en shock por el acontecimiento.

-mi querido Tenma, ¿cuánto tiempo?, me tenías preocupado

-¿qué?, ¿quién eres? -pregunté curioso-

Obvio ya sabía quien era, pero no iba a permitir que me siguieran alterando.

-¿aún no recuerdas? -preguntó al separarse-

-nop... ¿quién eres?

-¡ah...!, maldita sea, el idiota de Prometeo me mintió, -dijo molestó al ver a otro lado- bueno no importa -regreso su vista a mi-