Capítulo 23: Verdad inesperada, P2.

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Antes de iniciar!!!
Agregue un vídeito para mostrarles un poco me las mujeres Alfa en el omegaverse, así que lo pueden encontrar arriba ⬆️, aún lado de la imagen.
En serio me encanta esto..., aquí las mujeres se pueden sabrosear al macho 😎
Sin otra cosa que comentar, aquí esta este capítulo.

Aquella mujer me tomó de la mejilla y me dio un beso en la boca, cosa que de inmediato me causo un rubor en mí

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Aquella mujer me tomó de la mejilla y me dio un beso en la boca, cosa que de inmediato me causo un rubor en mí.

Al mismo tiempo, Asmita le gritaría muy molesto a aquella mujer:
-maldita, suelta a mi querido

Ella me miró sonriente, pero al instante la cambio por una de molestia al mirar a Asmita.
-que insolente eres, ¿cómo te atreves a interrumpir mi encuentro con mi amado señor Tenma?

-¿tu amado?, maldita, dejalo en paz

Arce lo miró con una sonrisa cínica para abrazarme por detras y pasar su lengua por mi cuello, provocando un escalofríos en mí, al final continuo:
-lamento decirte que debo irme con mi señor Tenma, así que da gracias a mi amo que no te mato

Al instante me cargó y me teletransportó hacía otra parte del mundo, más exactamente en Grecia, que en ese tiempo se conocía como Hélade, pero por diversos problemas económicos se fue fragmentado y a la vez uniendo conforme pasaban los años.

Ella me colocó en una cama de finas telas y continuo con su intenso beso.
En mi caso trataba de zafarme, pero mis fuerzas y mi celo generaron que ella siguiera.
-De... Detente -susurre entre jadeos-

-oh mi señor, es que ya no puedo esperar, lo eh esperado tanto tiempo -dijo al quitarse aquel vestido negro-

Al ver aquel encaje en su hermoso cuerpo, algo en mi ser omega la deseaba, tanto como ella a mi.

Tomó mi mentón y me dio un beso, mientras volvía a recostarme. Estaba a punto de botar aquel brasier de sus voluminoso busto, cuando fuimos interrumpidos por un hombre.
Al instante ella tomó una sabana y se curbio, mientras hizo una pequeña reverencia.
-Mi señor Kairos, lamento está situación, pero he esperado tanto tiempo a mi amado que no puedo aguantarlo más

-Descuida Arce, no tienes porque disculparte, pero podría hablar con mi hijo un momento, después pueden darme todos los nietos que quieran -dijo sonriente-

-sí mi señor, con permiso

Al dejarnos solos, ese tal Kairos se acerco a mí, mientras me trataba de poner en pie. Además su cuerpo era igual al de mi fallecido padre.
-Hola mi amado hijo, mi Pegaso, mi asesino de dioses, mi fruto prohibido

-¿quien eres?, ¿que es lo que quieres de mí?, ¿por qué eres igual a mi papá?

-hijo, te traje aquí porque no permitiré que te maten de nuevo, en esta era pienso terminar con aquel idiota de mi hermano y sus tontos hijos

Entre las cariñosas alas y la acaudalada muerte [Finalizada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora